BEC DE FERRUTX desde la Ermita de Betlem

La ruta Bec de Ferrutx desde la Ermita de Betlem tiene como objetivo coronar la cima del Bec de Ferrutx de 528 m de altitud. Parte de la Ermita de Betlem, pasa por el Coll Pelat y de regreso por Es Ferruxet (517 m), el Puig d’en Pelat (485 m) y la Talaieta (412 m). Alargamos la ruta visitando la Ermita de Betlem y subiendo al Puig d’en Coassa (320 m) para ver los restos del observatorio.

Llegamos a la Ermita de Betlem por la carretera Ma-3333 que une Artá con la Ermita. Dejamos aparcado nuestro vehículo en el parking que hay a la izquierda de la barrera que da acceso a la Ermita y comenzamos a caminar tomando un sendero que hay a mano izquierda mirando a la entrada.

Este sendero, llamado Camino del Puig de Ferrutx, forma parte del GR-222. Enseguida se adentra en un bosque de pinos que tiene abundancia de carrizo y matorral bajo. A los pocos metros vemos a nuestra derecha el cementerio donde sobresale una capilla.

Un poco más adelante vemos también a nuestra derecha los restos de las Casas de Can Virell, donde podemos apreciar los bancales construidos en la ladera de la montaña que denotan la existencia en esta zona de cierta actividad agrícola llevada a cabo tiempo atrás.

El sendero continua y luego inicia un descenso hasta cruzar el torrente Jonquera donde comienza a ascender hasta alcanzar un collado donde el camino se ensancha. Dejamos a nuestra izquierda La Talaieta, un peñasco al que subiremos de regreso.

Un poco más adelante vemos a nuestra izquierda una desviación que conduce hasta Artá. Nosotros seguimos por nuestro camino que ahora inicia un largo ascenso y donde el bosque ya ha desaparecido.

Pasamos al lado del Puig d’en Pelat que lo tenemos a nuestra izquierda y al que subiremos también cuando regresemos. Desde este lugar vemos por primera vez nuestro objetivo, el Bec de Ferrutx, que se alza majestuoso sobre el llano que tiene a sus pies.

Ahora iniciamos un descenso con fuerte pendiente hasta el Coll d’en Pelat y a continuación comenzamos la subida hacia la cima del Bec de Ferrutx.

El camino de subida es rocoso aunque señalizado con hitos y va bordeando la ladera de esta parte de la montaña. En unos cuantos minutos alcanzamos la cima del Bec de Ferrutx, coronada por un par de hitos.

Las vistas panorámicas que ofrece son realmente espectaculares. Se ve toda la Bahía de Alcudia, la urbanización de Betlem, la colonia de San Pedro. S’ Estañol, Son Serra de Marina, Can Picafort. Al fondo se distingue el Puerto de Alcudia, Aucanada, Cabo Pinar, Cabo de Formentor, etc. y también se ve una buena parte del interior de la isla.

Una vez que hemos disfrutado con estas vistas iniciamos el regreso por la misma ruta, introduciendo algunas variantes. Primero tomamos el sendero que cresteando conduce a Es Ferruxet, otra cima del Puig de Ferrutx de 517 m de altitud, coronada por un vértice geodésico y que se halla a unos metros de la anterior. Las vistas que ofrece son fantásticas. Destaca la visión de los acantilados del Bec de Ferrutx.

Desde aquí retomamos el camino de vuelta y al pasar al lado del Puig d’en Pelat decidimos subir a su cima situada a 485 m de altura.
La subida es corta y cómoda, tan solo 11 m , pero las vistas mejoran considerablemente.

Volvemos de nuevo al camino y continuamos el regreso hasta llegar a la altura de La Talaieta que queda a nuestra derecha. Es un peñasco cuya cima está situada a 412 m de altura. No hay camino para llegar a ella y la pendiente es bastante pronunciada aunque no presenta demasiada dificultad. La ladera está invadida por el carrizo. En unos 15 minutos alcanzamos la cima, coronada por un gran hito y las vistas que ofrece en los 360º bien ha merecido la pena el esfuerzo de la subida.

Descendemos al camino y seguimos hasta el aparcamiento. En lugar de dar por finalizada aquí la excursión, como íbamos bien de tiempo, decidimos hacer una visita a la Ermita de Betlem.

Entramos en el recinto por un amplio sendero cementado enmarcado por cipreses. Se trata de una construcción sencilla, donde en la fachada principal encontramos un reloj de sol, una pequeña ventana y un rosetón. Alrededor encontramos los restos de los antiguos huertos, una era y construcciones destinadas a almacenes o instalaciones ganaderas que permitían una vida autosuficiente en la comunidad religiosa.

En la parte trasera hay un portillo sin puerta y detrás salen dos caminos, uno de frente y otro a la derecha. Este último va rodeando el recinto y finaliza a los pocos metros en una especie de Mirador Natural que ofrece unas buenas vistas de la urbanización de Betlem, Es Caló, Sa Talaia Freda, Puig de Sa Creu, etc.

El camino que sale de frente y que tomamos nos conduce en corta subida por un sendero acotado hasta la cima del Puig d’en Coassa, situado a 320 m de altura. Allí vemos las ruinas de dos construcciones que constituían un antiguo observatorio. Las vistas que ofrece este lugar sobre la bahía de Alcudia son de primer orden.

Desde aquí ya solo nos queda regresar por la misma vía hasta el aparcamiento y dar por finalizada esta bonita excursión.

-Los componentes del grupo hemos sido: Pepe, Emiliano, Salvador y yo (Juan González Blázquez) como guía

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