Belmonte Ondes Dolia Belmonte

Dejamos el coche en Belmonte, a la entrada, que era fiesta.
Damos una pequeña vuelta por el pueblo para localizar la Casa del lobo, y cogemos la ruta que empieza bien señalizada dirección a Ondes, paralelos al Río Pigueña.
Al poco llegamos a un área recreativa, donde está situado el cercado de los lobos, que pudimos ver desde afuera bastante bien, realmente son como perros. (para verlos más cerca hay que ir a la casa del lobo y sacar los pases).
Seguimos camino y pronto se hace pindio (empinado) y el firme pasa a ser camino medieval, con sus inconvenientes, porque además las piedras estaban húmedas del día anterior (mejor hacerlo en seco).
Subiendo subiendo, llegamos a la fuente que está en Ondes, con la suerte de que el camino está recién desbrozado; bebemos y nos adentramos en el pueblo.
Giramos para salir de él haca la iaqda por carretera, ya que la pista paralela existente estaba llena de maleza y al poco la abandonamos.
Tras una ligera subida por la carretera, llegamos a San Miguel de Ondes.
En este pueblo, visitamos el tejo centenario (no se exactamente cuantos años) y una torre del siglo xvi.
Tras un descanso y ver la fuente del pueblo llena de ranas y peces de colores, cogemos una senda a izqdas que nos lleva a los prados de la Corredoria tras una breve ascensión.
Ahí continuamos por el Camín Real de la Mesa, un poco embarrado por la lluvia del día anterior.
Las vistas de pastizales son increibles.
Seguimos ruta hasta Dolia, donde dejamos el Camín Real y cogemos el desvío izqda. dirección Tablado y de ahí a Belmonte de nuevo.

La ruta tiene muchas fuentes de agua fría cristalina, mejor hacerla con pantalón largo y botas, por algún tramo que tiene hortigas, por lo demás se podrías hacer de corto.
Se pasa por un pueblo abandonado, una pena.

La califico de moderado, pero la dificultad es física y no técnica. Hay que estar con una forma mínima, ya que la subida desde los lobos hasta la Corredoria es pindia y con el firme típico de las sendas medievales.