Belorado - Agés

Partimos del lugar donde finalizamos la etapa ayer, en las inmediaciones de la N-120.
Por las calles de Belorado, siguiendo las flechas del Camino dejamos la población hasta llegar al puente romano del río Tirón.
El frondoso parque del Vivero está en el margen del río. Se pasa por una pasarela de madera al lado del puente romano por lo que se aprecia muy bien los pilares y arcos del mismo. Se le conoce con el sobrenombre de puente de El Canto.
Más adelante hay carteles informativos del Camino que transcurre por la provincia de Burgos.
Dejamos a la izquierda el cerro Vardeles y el pico Cabeza de la Encina mientras caminamos paralelos a la N-120.
Cruzamos los arroyos de San Andrés y de Los Cañales hasta llegar a Tosantos.
El camino se desvía a la izquierda para ascender suavemente.
En las lomas de Los Caños aparece excavada en las rocas areniscas la ermita de la Virgen de la Peña. La fotografiamos desde lejos ya que el Camino no pasa por ella.
Poco a poco vamos aproximándonos a Villambistia dejando el Henar y la cima de La Piedra a nuestra izquierda.
Llaneamos hasta llegar a Villambistia. Aquí pasamos al lado de la iglesia parroquial de San Esteban y a los pocos metros nos encontramos con la ermita de San Roque y la fuente de los cuatro caños a la que una leyenda le atribuye poderes mágicos.
Abandonamos la población por el camino de la Fuente pasando por La Dehesa Nueva y Rodaño. Los campos siguen cultivados de cereales.
Cruzamos de nuevo la N-120 para dirigirnos a Espinosa del Camino.
Al salir de la pequeña población cruzamos el río Retorto. Hay un suave ascenso para llegar a una pequeña meseta. A los pocos metros se inicia un descenso que nos lleva a las ruinas del monasterio mozárabe de San Félix. La tradición sitúa en este monasterio los restos mortales del fundador de Burgos, el Conde Diego Rodríguez Porcelos.
Seguimos por el camino y nos desviamos a la izquierda siguiendo a distancia el curso del río Oca.
Al llegar a la carretera hay una pequeña senda al lado del arcén que nos hace caminar en fila india hasta llegar a Villafranca Montes de Oca.
En esta población nos detenemos a tomar un refrigerio para continuar el ascenso hacia los Montes de Oca.
Ascendemos por las calles para pasar por la iglesia de Santiago y el hospital de peregrinos de la Reina o de San Antonio Abad. Al salir de Villafranca hay una senda a la izquierda señalada con una flecha amarilla al lado de una tapia por la que nos decidimos a ir.
Por esta empinada senda se acorta el camino. Como vamos andando se puede hacer. Las bicis continúan por la pista a la que nos juntamos unos metros más adelante.
El paisaje cambia, apareciendo los robles. La cuesta se suaviza al llegar a la fuente Mojapan, donde hay un área de descanso para el peregrino. Desde el mirador se aprecian las sierras de la Demanda y de San Millán.
Continuamos a la sombra de robles, enebros y brezos lo que nos hace muy llevadera la caminata.
Llegamos al monumento de la Pedraja que conmemora a los caídos en la guerra civil española, donde hay una zona de descanso para los peregrinos. A la derecha sale el camino de Cerratón que lleva a los aerogeneradores del parque eólico de Valvuena, colocados en esta cima.
Para llegar al rio Cerratón o de la Pedraja hay un empinado descenso que nos lo tomamos con calma para evitar resbalones.
Al pasar el puente nos sorprende una empinada cuesta.
La remontamos y aparece el Camino Viejo con una zona despejada entre los pinos haciendo de cortafuego.
Seguimos ascendiendo hasta llegar al Alto de la Pedraja.
Al poco tiempo llegamos al Oasis del Peregrino, un área de descanso con un bar ambulante que ofrece bebidas y viandas a los caminantes.
Dejamos atrás la Magdalena y el monte Mataterrazos repletos de vegetación.
El camino desciende hasta llegar a San Juan de Ortega.
Aquí nos detenemos un buen rato para visitar el interior de la iglesia de San Juan de Ortega, donde está el sepulcro de estilo gótico del santo que fue discípulo de Santo Domingo de la Calzada. Nos Impresiona la monumentalidad del ábside y la puerta de la iglesia.
La capilla de San Nicolás está unos metros más adelante de la iglesia. Es de estilo románico con planta de cruz griega.
El recinto del Monasterio queda detrás de la iglesia y de la capilla.
Continuamos por el asfalto de la carretera hasta llegar a un cruce de varios caminos donde aparece un crucero.
Hay varias señales que dirigen a Santovenia (variante del Camino que pasa por esta población, Zalduendo e Ibeas de Juarros que hoy día no se transita) o a Agés.
Continuamos de frente por el camino señalado a Agés, final de nuestra etapa de hoy.
Por un camino entre pinos silvestres pasamos por La Rasilla. Las piernas ya notan el cansancio.
Poco a poco la arboleda va desapareciendo y nos encontramos praderas. Al despejarse la vegetación aparecen unas vistas maravillosas de los cultivos de cereales.
Hay viento lo que hace moverse las espigas de cebada que parecen las olas del mar.
El día se ha despejado y aparece un cielo azul con unas nubes blancas que nos hacen detenernos para fotografiarlas.
Tras un paso canadiense iniciamos un descenso viendo ya próxima la población de Agés.
Pasamos por el Sextil y la Hoya y nos adentramos en Agés, donde buscamos un lugar para comer y tener un merecido descanso tras la etapa que ha sido larga y con un buen desnivel al pasar Villafranca y cruzar los Montes de Oca.
En resumen: Etapa larga (27 Km). Llana desde Belorado a Villafranca. Desde aquí se inicia la subida a los Montes de Oca para cruzarlos lo que la hace más dura. Muy bien señalizada por lo que no hay pérdida.