Benaocaz - Pinaleta, Campanilla del Gigante y Hoyos del Jauletas, PN Sierra de Grazalema, 2022-10-25

CARACTERÍSTICAS DE LA RUTA

- Distancia: 10 km.

- Tiempo de realización: 6 horas 9 minutos a ritmo tranquilo y con paradas.

- Grado de dificultad: DIFÍCIL, ruta para expertos. Sin embargo, si eliminamos la subida a la Cresta de la Campanilla, que es opcional, se queda en un nivel MODERADO ALTO.

- Trazado: circular.

- Desnivel: 526 m. Altitud máxima en la Cresta de la Campanilla (1197 m), y mínima en el Pajaruco (730 m).

- Terreno: Caminos y senderos pedregosos, campo a través, rocas y lapiaces (con algunas trepadas y destrepes).

- Permiso: No hace falta. Todos los pasos están habilitados (no se saltan alambradas). Hay algunos cotos de caza.

- Recomendaciones: Son necesarios el GPS, guía con experiencia y cierta preparación física y técnica.

RESUMEN

Espectacular ruta circular, de nivel difícil (recomendada para gente experta), entre Benaocaz, el Mítano, la Pinaleta, la Campanilla del Gigante y los Hoyos del Jauletas. Se trata de una ruta un tanto dura y rompepiernas, pero en la que disfrutaremos de excelentes panorámicas y atravesaremos lugares recónditos y de una belleza indescriptible. Nos encontramos en el término municipal de Benaocaz, dentro del Parque Natural de la Sierra de Grazalema.

DESCRIPCIÓN

El grupo Palo Corto regresa a la zona del Jauletas, para realizar un trazado circular pasando por la Pinaleta, la Campanilla del Gigante y los Hoyos. Lo más novedoso de esta espectacular ruta es el trazado y la subida a la Cresta de la Campanilla, que nos ofrece magníficas panorámicas en 360⁰.

Aparcamos al Norte de Benaocaz y salimos de la localidad por detrás del Refugio El Parral, siguiendo el antiguo Camino del Quejiguillo. Subimos hacia el Noreste faldeando una ladera con buenas vistas al Ojo del Moro, el Valle del Pajaruco, la Sierra Alta y la Sierra de Don Fernando. Pasamos por la Fuente Ojito Nogal y el Pajaruco (apena ver las huellas de la dura sequía) y continuamos subiendo con buenas panorámicas por las zonas del Pinarejo y el Mítano. Pasamos el seco y pedregoso cauce del Arroyo de las Piletas y observamos a lo lejos las paredes de la Cascada del Mítano (sin una gota de agua).

Continuamos subiendo hacia el Noreste entre las estribaciones del Mítano y el Jauletas. Pasamos el Arroyo del Dornajo y una portilla y, poco más adelante, abandonamos el Camino del Quejiguillo y vamos girando al Noroeste hacia la Pinaleta del Jauletas. Atravesamos este pequeño pinar de repoblación campo a través (la pinaza borra los senderos), y subimos por terreno abrupto y entre matorral hasta enlazar con un sendero que nos conduce a los Hoyos del Jauletas.

Avanzamos por el citado sendero hacia el Sur y bajamos al Hoyo de Jauletas, que tiene forma de cráter, aunque es solo una gran depresión caliza circular poblada de encinas y carrascas. Establecemos una base en el fondo del Hoyo y desde aquí subimos hacia el Noroeste hasta el refugio de la Campanilla del Gigante (se parece a una gran boca abierta mostrando la campanilla). Desde este refugio, situado al pie de un tajo calizo, aprovechando los estratos, subimos con precaución hasta un collado con nuevas y desconocidas perspectivas del Jauletas y su entorno. Continuamos trepando por los afilados lapiaces de la Cresta de la Campanilla hasta una cima muy aérea (1197 m) y con bellas panorámicas en todas direcciones. Desde arriba, haciendo un giro de 360⁰, veremos la cumbre y los Hoyos del Jauletas, el Simancón, el Morrocano, el Circo del Dornajo, el Caíllo, parte de Ubrique, etc.

Desde la Cresta de la Campanilla, descendemos (asegurando los movimientos en los pasos complicados) hasta la base del Hoyo de Jauletas. Luego, continuamos hacia Sur atravesando hoyos y lugares de increíble belleza. Primero nos acercamos a contemplar el grandioso espectáculo que se puede observar desde el Balcón del Hoyón. A continuación, bajamos por el lado izquierdo (hay que afinar con el track), zigzagueando hasta la zona de los Miradores, donde disfrutaremos de nuevas perspectivas de los Hoyos. Por último, salimos por la Puerta Secreta al exterior del Jauletas.

Luego, iniciamos un largo descenso hacia el Suroeste, bordeando las estribaciones del Sur del Jauletas y siguiendo el cauce seco del Arroyo del Dornajo (afluente de las Piletas). En el camino, nos acercamos a un sumidero, cuyo entorno fue utilizado antiguamente como corral. Seguimos hasta el Arroyo de las Piletas, donde disfrutamos del colorido otoñal de unos arces de Montpellier. Más abajo, pasamos la Cancela del Cráneo de Vaca y vamos girando hacia el Sur. Y campo a través por una dehesa de encinas enlazamos con el Sendero de la Ruta del Salto del Cabrero.

Pasamos el pequeño puente de piedra del Pajaruco (de un solo arco) y avanzamos fácilmente hasta Benaocaz, donde finalizamos nuestra ruta, algo dura para las piernas pero muy fotográfica y espléndida para el ánimo y los sentidos.