Biótopo protegido del Flysch Deba-Zumaia

Carlos, Rafa y yo, nos encontramos en la estación de Euskotren en Deba, en una mañana soleada y con marea baja, para caminar por la senda que te permite ir viendo los espectaculares flysch existentes entre las playas de Santiago en Deba e Itzurun en Zumaia.
Este biótopo protegido de 8 km de litoral entre esas dos poblaciones, tiene la rasa mareal mayor del mar Cantábrico y de Europa. Se extiende 5 km mar adentro aunque solo se pueden ver unos 200 ó 300 m en marea baja. Es llamativo y espectacular ver como los flysch verticales se internan en la mar a modo de un gran costillar (ver fotos).
Una rasa mareal, rasa intermareal o rasa litoral, es una plataforma rocosa costera, al nivel de la marea baja, que aparece por delante de un acantilado rocoso. Se trata de una formación debida a la erosión del mar sobre éste, que se produce solo si se dan una serie de factores como son los tipos y disposición en capas de las rocas y una diferencia intermareal significativa (altura entre la marea alta y la baja).
La rasa está, por tanto, ligeramente por debajo del nivel marino y es visible en la marea baja y ante la retirada del oleaje.
Previamente a la descripción de esta bella etapa, indicar en unas pocas líneas, algunas características de estas increíbles formaciones rocosas.
Los Flysch son rocas sedimentarias formadas por la deposición alternativa de capas de rocas duras (caliza, pizarra o areniscas) intercaladas con otras más blandas (margas y arcillas), que se formaron bajo el agua a lo largo de la plataforma continental, cuando tuvo lugar la colisión de las placas tectónicas ibérica y europea, hace unos 50 millones de años.
A medida que la placa continental empujaba, las capas de depósitos de sedimentos se fueron deslizando a diferente velocidad de sedimentación, en función del tamaño de los granos, haciendo que las partículas más grandes se hundieran más rápido, mientras que en la parte superior se acumularan los granos más finos.
Con el paso del tiempo, las capas menos resistentes a la intemperie forman largos surcos paralelos en la roca.
Estos flysch de Zumaia se formaron durante un período de 100 millones de años. Las capas se inclinaron de oeste a este, de manera que los estratos más antiguos se encuentran al oeste mientras que los más recientes se encuentran al este. Estas capas proporcionan información muy valiosa de la historia de la Tierra de hace, entre 100 y 50 millones de años.
Iniciamos la etapa en la playa de Santiago en Deba para contemplar en el frente rocoso los primeros estratos de flysch negro y trazas de hierro. Según nos vayamos desplazando hacia el este, aparecerá el flysch calcáreo (gris) en la pared de Aitzuri; los estratos de estas dos formaciones presentan orientaciones distintas.
Así las capas del flysch negro tienen una orientación paralela a la línea de costa, mientras que las calizas del flysch calcáreo, más duras y resistentes, son prácticamente perpendiculares a la línea litoral.
Subimos a la carretera nacional, con pocos coches todavía, por la que continuamos hasta el mirador de la Virgen de Itziar, para tomar más adelante a la izda, una senda que desciende hasta la EDAR (Estación Depuradora de Aguas Residuales) de Itziar y Deba.
Llegamos luego a la antigua vía de Euskotren y pasamos por un túnel corto, dejando a la dcha otro más largo que está cerrado, para continuar por la senda señalizada con pintura roja-blanca de la GR vuelta a Gipuzkoa.
Es una zona de gran belleza por su espesa vegetación y gama de verdes.
Nos vamos acercando al paredón de Aitzuri (flysch calcareo) de 130 metros de altura, que representa la división entre el flysch negro (lo que hemos recorrido) hacia el oeste y el flysch calcáreo (lo que nos falta hasta Zumaia) hacia el este.
La falla de Andutz que discurre paralela a este gran paredón de Aitzuri, es el principal accidente tectónico de todo el biótopo que separa, divide, el flysch negro del Cretácico inferior del Flysch calcáreo más joven y más duro del Cretácico superior.
Esta diferencia de dureza controla la erosión marina, dando lugar al cabo de Aitzuri, con rocas calcáreas más duras, y a la ensenada de Usarragaundi, con una litología más arcillosa y menos resistente, que ha sido erosionada con mayor facilidad.
La orientación de los estratos con respecto a la línea litoral determina la morfología de los acantilados. Así hacia el oeste, los estratos del flysch negro son paralelos a la línea de costa y producen un cantil rectilíneo. Al este, por el contrario, las capas del flysch calcáreo de Sakoneta son perpendiculares a la línea de costa y su erosión diferencial da lugar a un perfil de cabos y calas.
En resumen, que la diferente orientación de los estratos está marcada por la falla de Andutz.
Por otro lado, indicar que el frente rocoso de Aitzuri alberga dos grandes cuevas, oquedades erosivas de más de 20 m de altura y profundidad, generadas por el desgaste del mar a favor de la roca más fácilmente erosionable.
Al llegar a la cima de Mendatagaina, con la marea baja contemplamos el bello flysch de Mendata y su rasa mareal, a la que no bajamos (lo dejamos para otra ocasión), pero si que sacamos unas cuantas fotos desde este incomparable mirador.
Señalar que mar adentro existen otras plataformas sumergidas y escalonadas, que nos indican antiguos niveles del mar. En la última glaciación, hace unos 18.000 años, el nivel del mar estuvo 120 metros por debajo del actual.
La pequeña cascada de Mendata constituye un perfecto ejemplo de valle colgado: atestigua que la velocidad de retroceso de estos acantilados es superior a la capacidad de erosión de valle del riachuelo.
Los valles colgados representan uno de los rasgos geomorfológicos más curiosos de este biótopo. La explicación sería que cuando la velocidad de erosión y retroceso de los acantilados es mayor que la velocidad de erosión y socavación del cauce del riachuelo, los acantilados ganan la partida: el valle queda colgado y el cauce tiene que saltar al mar en forma de una pequeña cascada.
La de Mendata es un muy buen ejemplo de cascada colgante en el acantilado, que se ha formado como consecuencia de la captación del riachuelo por el acantilado.
A continuación está la playa de Sakoneta, de arena muy fina, de grandes dimensiones y protegida por dos cabos que le dan una forma de medialuna, muy característica en las playas encajadas.
Desde aquí se ve como el oleaje golpea directamente la base del acantilado, socavándolo y produciendo desprendimientos de grandes bloques de roca. Estos bloques se convierten poco a poco en cantos rodados, que se acumulan y vuelven a golpear su base, aumentando el poder de erosión del mar. El retroceso de los acantilados es aquí más evidente que en cualquier otro lugar, ya que a sus pies se extiende la rasa mareal más espectacular de todo el biotopo.
Desde Sakoneta por el GR121 ascendemos hasta el área de Elorriaga (Elorrixa) por donde pasa el “Camino de Santiago”, encontrándonos con una pareja muy interesante de jóvenes peregrinos madrileños, que venían felices desde Irún, más que impresionados por las espectaculares vistas del litoral guipuzcoano y de la suave meteorología.
Por senda con bonita panorámica de los acantilados pasamos por punta Algorri, para finalmente ascender a la ermita de San Telmo, sobre el acantilado, con extraordinaria panorámica del flysch y de la bonita playa de Itzurun, conocida por tener sus aguas propiedades beneficiosas para la salud gracias a su alta concentración en yodo, además de ser una de las playas menos contaminadas de la costa vasca.
Agradecer a Rafa, una vez más, por la aportación de sus magníficas fotos.

A modo de resumen, indicar que las transiciones entre las edades geológicas tienen un enorme interés científico, ya que dichas transiciones muestran grandes crisis biológicas y cambios bruscos en las condiciones ambientales a lo largo de la historia del planeta, como ocurre en el caso del límite entre el Cretácico y el Terciario.
Para entender esos cambios ambientales repentinos, señalar que en la cala Algorri existe un estrato de arcilla oscura que contiene una altísima concentración del metal iridio (muy escaso en la tierra).
Su explicación está en el meteorito que exterminó a los dinosaurios y al 70 por ciento de las especies del planeta hace 65 millones de años.
Este hecho se pudo comprobar hace unos años durante unas prospecciones petrolíferas en el Golfo de México, en las que se descubrió un cráter submarino de casi 180 km. de diámetro, justo frente a las costas de Yucatán, que correspondería al impacto de un meteorito de unos diez km. de diámetro, datado científicamente con una antigüedad de 65 millones de años.
En Algorri, en cada una de las capas de roca anteriores, los científicos encuentran más de cien especies de fósiles y microfósiles, vida antigua, variada y abundante. Después, todo se interrumpe con esa misteriosa franja oscura. Y en el siguiente estrato apenas quedan media docena de esas especies: aquí ocurrió una extinción masiva y repentina. Es el límite entre la era cretácica y la terciaria.
Por lo tanto, el concepto de geodiversidad es muy significativo en este Biótopo, no sólo por la información que aporta cada roca sino también por el valor añadido de su conjunto.
Y finalmente, estos son los flysch del biótopo:
- En playa Mendata, 300 metros de flysch calcáreo (alternancia de margas, margocalizas y calizas micríticas) del Cretácico Superior.
- En la ensenada de Aitzuri, 1300 metros de flysch detrítico-calcáreo (margas, margocalizas y calizas arenosas de grano muy fino) del Cretácico Superior.
- Al este de Aitzuri, 200 metros de flysch de transición (margas, margocalizas y calizas margosas) del Cretácico Superior.
- En Punta Aitzgorri (Algorri), 180 metros de capas rojas (margas rojo vivo, margocalizas y calizas) del Terciario.
- En la playa de San Telmo, 150 metros de flysch de transición (calizas micríticas de tono gris claro, margas y margocalizas) del Terciario.
- En Punta Mariantón, 300 metros de flysch terciario (alternancia de areniscas y lutitas) del Terciario.
Tras tomar unas exquisitas “birras” en un bar de Zumaia, nos dirigimos hacia la estación de Euskotren, donde habíamos dejado el coche, para irnos a comer a un rte de Iraeta, recomendado por Rafa, en el que a pesar de llegar bastante tarde (las 4), comimos muy bien, rápido y barato.