Bonales Occidental, techo de Huelva, y Tentudía, techo de Badajoz, desde el Monasterio de Tentudía

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Reseña de la ruta en Adventoorer: Bonales Occidental y Tentudía desde el Monasterio de Tentudía.

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Acabo mi viaje a Cádiz tomando un desvío que me va a llevar al Bonales Occidental y al Tentudía, respectivamente los techos de Huelva y Badajoz. Las dos montañ… ehhhh, cerros… mmmm, elevaciones están tan cerca que se pueden subir en un rato. Eso voy a hacer yo. Estoy de viaje de vuelta y es fin de puente, así que cuanto antes acabe, menos atasco tendré.

Mi intención es la de comenzar desde el Puerto de los Ciegos, entra ambas… ejem… colinas, pero no ando muy enterado de cómo llegar. En Calera de León me desvío hacia el Monasterio de Tentudía, que sé que está en la cima del Tentudía, pero no hay indicaciones hacia el puerto.

Conduzco un rato por la carreterita hasta un desvío hacia Cabeza la Vaca. Como no señala el puerto, yo sigo adelante, aunque ese es el camino que tenía que haber cogido. Al no desviarme, tras unas cuantas curvas descubro que he acabado en el monasterio, o sea, en la cima del Tentudía.

Ya que estoy aquí no voy a volver atrás. Bueno, comenzaré desde este punto. Da lo mismo, porque de cualquier manera voy a acabar donde empiece, pero creo que es la primera vez que inicio una ruta desde la cima.

Muy bonito el monasterio. Me asomo al interior y parece que hay que pagar para entrar, así que me doy la vuelta. De todas maneras no tengo mucho tiempo. A lo lejos (no demasiado) se ven los Bonales, el Oriental y el Occidental.

Para llegar a ellos no hay gran dificultad. Primero se baja hasta el Puerto de los Ciegos, donde pretendía empezar, y luego se sube.

Es un paseo agradable. El Bonales Oriental está cubierto de robles, aunque la mayoría no son demasiado viejos. Solo alguno tiene buen tamaño. Ya está empezando a oscurecer y el ambiente tiene su encanto. Aunque pierde buena parte de él cuando voy llegando arriba y me encuentro con un valla de alambre de espino.

Afortunadamente, un poco a la izquierda un pequeño tronco ha caído sobre la valla y ayuda bastante a cruzarla sin desgarrarse nada. Justo detrás está la cima del Bonales Oriental, y un poco más allá, cruzando unos sembrados, el Bonales Occidental.

De momento no quiero dar por conseguidos todos los objetivos del viaje. Interpreto que aún no he subido al Tentudía, porque llegar en coche me parece demasiado chusco.

Regreso al Puerto de los Ciegos en un suspiro, y empiezo a subir al Tentudía, pasando por la lomilla de El Labrado. Se me hace raro acabar en subida, pero es lo que hay. Tras un corto esfuerzo, vuelvo al monasterio.

Por una vez, y sin que sirva de precedente, se me ha dado bien y he subido todo lo que quería subir en este viaje. A ver cuánto dura la suerte.

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