Brañagallones - Peña del Viento

Nos estrenamos en un enclave único, mágico e inigualable: el entorno del Refugio de Brañagallones, en pleno corazón del Parque de Redes. Dividiremos nuestra experiencia en dos jornadas.

En esta primera jornada nos dirigimos a la imponente Peña del Viento. Una ruta con cierta dureza debido a su longitud y desnivel.

Partimos del Refugio para dirigirnos al comienzo oficial de esta ruta, donde un gran panel informativo nos marca el inicio de este sendero PR.

Una cómoda pista nos llevará, tras pasar un puente, al entorno de Valdebezón en el que un panel indicador nos guía hacia la canal oficial de subida a la Peña del Viento, bien marcada y jitada.

En esta ocasión nosotros giraremos a la izquierda en lugar de seguir de frente, hacia esta vía oficial. ¿Motivo? Las enormes vistas de la Sierra del Páramo, La Rapaona y Les Rapaínes que nos acompañarán durante todo el trayecto hasta el Collado de Las Agujas. Este tramo no ofrece una dificultad adicional a la vía oficial, con senderos claros y evidentes, siendo de consideración la ausencia de jitos o marcas. Es recomendable el uso de bastones para superar con mayor comodidad un pedregal situado en la parte final del ascenso.

Una vez lleguemos al Collado de Las Agujas giraremos a la derecha para continuar por un evidente sendero que conducirá a la cómoda canal final de subida.

Las vistas desde esta preciosa cima abarcan una buena parte del trazado de la pista Wamba, por la que descenderemos más tarde, y cumbres destacadas como el cercano Cascayón.

Descenderemos de esta Peña por la misma canal de subida, evitando un cresteo que tiene pinta de complicarse, al no visualizar con claridad esta vía a causa de la niebla.

El descenso a la pista Wamba es muy, muy evidente, con abundantes jitos y marcas.

Tras recorrer unos kilómetros por la pista llegaremos al cruce con el desvío al Cascayón y el Lago Ubales. En este punto nos desviaremos a la derecha, bajando a un bonito y cómodo bosque por el que continuaremos, durante varios kilómetros, por un cómodo y evidente sendero, tornando en una pista al final, por el que volveremos al Refugio.