Burgos (Caleruega). Sendero de las Loberas PRC-BU-69.

Longitud: 11 kilómetros.
Tiempo total: 3 horas 12 minutos.
Tiempo en movimiento: 2 horas 46 minutos.
Desnivel acumulado de subida: 129 metros.
Índice IBP: 32.

Esta ruta que se corresponde con PRC-BU-69 recorre el municipio burgalés de Caleruega donde podremos disfrutar, además de su patrimonio paisajístico de campos de cereal y monte de encina carrasca, de alguna de las construcciones pastoriles tradicionales que se han conservado hasta nuestros días y otras de épocas más lejanas que han sido descubiertas y estudiadas recientemente. Tengo que reconocer que este municipio ha realizado una gran labor en la rehabilitación, cuidado y descripción informativa de los lugares que vamos a visitar así como en el balizamiento de toda la ruta, idea que seguramente se ha ido fraguando ya desde el año 2.012 cuando recibió el premio Renacimiento en reconocimiento a la labor de mantenimiento y recuperación de su patrimonio histórico, cultural y medioambiental. Además Caleruega ha sido incorporada en 2.017 como miembro de la Asociación de Pueblos más Bonitos de España.

La marcha es un cómodo paseo en el que recorreremos la Piedra de Castro, punto intermedio de la romería de la Virgen del Castro o del “Santito”, el Camino Empedrado que es el resto de una calzada romana que unía Caleruega con Clunia, el Yacimiento Arqueológico de “La Pudia” que muestra los restos de una pequeña aldea de los siglos IX y X, un recién restaurado palomar que funciona como observatorio de aves, las Bodegas y el Castillo de Alfonso VIII, bodegas consideradas las más antiguas de la Ribera del Duero, 2 corrales con loberas estando uno de ellos habilitado como centro de interpretación, los restos de la Ermita de San Mamés que se encuentran al lado de la encina Hueca y por último, la encina de Santo Domingo que nos encontramos ya cerca de Caleruega.

Como podemos observar es un entretenido paseo que se hace de forma muy cómoda ya que siempre andaremos por caminos o sendas sin apenas desnivel. Además hay varias áreas recreativas donde podremos parar a descansar o disfrutar del paisaje. A pesar de que nos encontraremos varias fuentes en el recorrido, al menos cuando yo realicé la marcha no tenían agua.

Como aderezo a este recorrido alrededor de Caleruega nos encontraremos con lugares que por distintos motivos merecen una visita: Santo Domingo de Silos donde su lugar más emblemático es el Monasterio, un poco antes de llegar encontraremos el Desfiladero de la Yecla, también tenemos la ciudad romana de Clunia situada en Peñalba de Castro y en el cercano pueblo de Araúzo de Miel podemos realizar otro día la interesante ruta el Sendero de Pinarejos que recorre sus pinares.

Como apunte adicional antes de describir la ruta comento que este Sendero de las Loberas es un recorrido actualizado del existente con anterioridad, habiéndose añadido lugares con excavaciones que se han realizado últimamente.

Comenzamos la marcha en Caleruega y el primer punto que nos encontramos es la Piedra de Castro. Por este lugar pasa y para la Romería a la ermita de la Virgen de Castro o del “Santito” que se encuentra en el Alto de Castro de la ciudad romana de Clunia. La figura de peregrinación del Santito es una representación de Santo Domingo datada en el s. XVII y que sólo sale para esta romería, estando el resto del tiempo custodiada en el Real Monasterio de las Madres Dominicas.

Continuamos y llegamos al “camino empedrado”, que es el resto de la antigua calzada romana que comenzaba en Clunia y pasaba por Caleruega hasta llegar a Segisamone (Sasamón). No supe identificar ningún resto reseñable al respecto.

Poco después llegamos al Yacimiento Arqueológico de “La Pudia” que muestra los restos de una pequeña aldea altomedieval de los siglos IX y X instalada en una alta plataforma desde donde se tiene un buen dominio de la vega del río Bañuelos. Esta aldea albergaba una pequeña comunidad campesina y se han podido identificar la iglesia que era el edificio principal del poblado, así como tres pequeñas viviendas alrededor de una “plaza”.

Nos quedamos contemplando un momento cómo los perros dirigen un rebaño de ovejas hacia donde les indica el pastor para continuar después hacia un Palomar recientemente restaurado. Está previsto que sea convertido en un mirador de aves, sobre todo de buitres.

Después de cruzar el río Bañuelos nos encontramos un área recreativa y otra de las joyas de la ruta, las Bodegas de Alfonso VIII con una longitud de 30 metros y una altura de 5. Están consideradas las más antiguas de la Ribera del Duero ya que hay escritos custodiados en el monasterio de las madres dominicas de Caleruega que la datan del año 1.179. Fue descubierta, limpiada y rehabilitada en el año 2.009. Al lado tenemos el Castillo de Alfonso VIII y no he podido encontrar información para añadir. Desde la loma donde se encuentra el castillo tenemos unas bonitas vistas del mirador de aves y el pequeño lago que se encuentra a su lado.

Seguimos y nos encontramos una fuente sin agua de nueva construcción, la Fuente del Sapo.

Continuamos nuestra marcha y poco después de cruzar un tramo de camino asfaltado comenzamos a entrar en un monte bajo principalmente de encina carrasca, donde después de dejar una torre metálica de observación encontraremos 2 corrales con loberas, edificaciones que dan nombre a esta ruta. La primera construcción además es un Centro de Interpretación que se encuentra cerrado y que es visitable poniéndose en contacto con el Ayuntamiento. La segunda edificación sí nos la encontramos abierta y podemos entrar, teniendo la precaución de dejar la puerta cerrada tal y como nos la encontramos. Las loberas se llamaban a una construcción de forma cónica dentro de los corrales donde se guardaban los rebaños durante la noche y que servían de refugio a los pastores. Tenían una sola entrada y un respiradero y los utilizaban en caso de que los lobos entrasen en los corrales.

Nos dirigimos hacia la fuente del Monte del Prado, nuevamente sin agua a pesar de que cerca cruzamos una pequeña pradera repleta de juncos, típicos de las zonas con bastante humedad en su suelo.

Cerca tenemos una pequeña área recreativa a la sombra de la encina Hueca, donde nos desviaremos levemente para acercarnos a las ruinas de la Ermita de San Mamés, uno de los yacimientos de la época medieval de Caleruega. Estudios recientes han desestimado la hipótesis inicial que estas ruinas fueron erigidas en honor al Beato Manés (1.170-1.234), hermano de Santo Domingo de Guzmán. Se ha constatado que se corresponden con los restos de una ermita plenomedieval que actuó como lugar de almacenamiento y custodia de grano y que actuaba como una ermita-granero propiedad del monasterio de Santo Domingo de Silos bajo la advocación de San Mamés según documentos custodiados de nuevo en el monasterio de las madres dominicas de Caleruega. Visualmente podemos contemplar solo parte de la cimentación de los muros de la ermita-granero ya que las piedras fueron utilizadas posteriormente en la construcción de tenadas y corrales cercanos con bastante probabilidad. En el interior se identifican además de una tumba cinco silos, son cavidades de un metro de profundidad actualmente cegadas que servían para el almacenamiento del cereal, encontrando otros 2 en el exterior. En el año 1.273 pasó su jurisdicción del monasterio de Santo Domingo de Silos al recién fundado convento de Santo Domingo de Caleruega y es posible que, al trasladar el depósito del grano al nuevo convento el de San Mamés comenzara a abandonarse para llegar finalmente a su expolio.

Continuamos la ruta y antes de salir del encinar nos encontramos con la encina de Santo Domingo y pasando poco después al lado de la fuente de los Burros que nos encontramos como el resto sin agua, debido seguramente a la época en que estamos y a la ausencia de lluvia este invierno.

De este modo vamos finalizando la ruta y nos acercamos a Caleruega donde vemos un panel explicativo de los puntos que hemos visitado. Además cruzaremos sin visitar un lagar rehabilitado, el museo Lagar de Valdepinos. En él se encuentran elementos propios del prensado del vino, útiles de la vendimia y aperos de labranza.

Ya en el pueblo de Caleruega hay que mencionar los siguientes lugares que merecen la pena conocer, además existen visitas guiadas en ambos conventos:

La Iglesia parroquial de San Sebastián de Caleruega es un templo románico y en él se encuentra el lugar donde fue bautizado Santo Domingo de Guzmán. Esa pila bautismal con el paso del tiempo se trasladó al convento de las Madres Dominicas, para pasar a Valladolid y acabar finalmente en el convento de las dominicas Santo Domingo el Real en Madrid. Desde prácticamente sus orígenes y salvo alguna excepción los miembros de la familia real han sido bautizados en esta pila.

El Real Monasterio de Santo Domingo es el Convento de las Madres Dominicas y tiene sus orígenes en el solar donde su ubicaba la vivienda donde nació Santo Domingo. En 1.237 su hermano Manés construyó un pequeño templo para conmemorar la canonización de Santo Domingo y ya en el año 1.266 Alfonso X el Sabio fundó un convento de monjas. Uno de los grandes tesoros de este Convento está en el amplio archivo que conservan.

Por último podemos visitar el Convento de los Padres Dominicos, que se funda en 1.952. En su interior está ubicado el Torreón de los Guzmán, que es el monumento más antiguo y que formaba la línea de fortalezas de las riberas del Duero del siglo X.