Cabeza Nevada o Cervunal y Cinco Lagunas desde Navalperal de Tormes (Gredos)

Bella y muy dura ruta por Gredos. En este caso, aprovecharemos la idea de visitar las Cinco Lagunas para ascender a una de las cimas más características de este macizo: el Cervunal o Cabeza Nevada.

Se trata de una ruta que se suele hacer haciendo pernocta en las lagunas, o incluso de dos días, haciendo noche primero en el chozo del Cervunal y luego ya en aquellas. De hecho, en el descenso, vi muchísima gente subiendo a dormir en ellas. En cualquier caso, es perfectamente realizable en un día, pero hay que tener cuidado: en días de verano de mucho calor (como el que me tocó vivir), especialmente el descenso se hará larguísimo y duro. Aunque iba con bastante agua (3,5L), al final tuve que racionarla. No vi fuentes, más que la que hay al comienzo (donde me sacié ya al llegar), y aproveché el arroyo de la Garganta del Pinar para refrescarme en él.

Por otro lado, la catalogo como difícil, a pesar de no ser técnicamente complicada, por dos razones: la distancia y el descenso del Cervunal y en menor medida, del descenso a la Garganta del Pinar desde las Lagunas. El descenso del Cervunal lo hice yo creo (viendo algunas rutas que tenía como referencia, que hablaban de destrepes), por un sitio muy bueno. Apenas tuve que apoyar las manos en el descenso alguna vez. Aun así, es bastante tendido y tiene zonas de piedra, por lo que puede llegar a provocar resbalones. Así pues, extremar precauciones en el descenso del pico. .

La ruta la iniciaremos en el parking situado a las afueras del pueblo de Navalperal de Tormes. Es un parking amplio donde hay cabida a bastantes coches. Eso sí, llegar hasta él es un poco complicado. Tanto el pueblo como la carretera para llegar hasta él son muy estrechos, con cabida para un solo coche salvo en puntos aislados.

Iniciamos la ruta cruzando el puente sobre el Tormes. De ahí seguiremos por la Garganta del Tormes, atravesando los lechos de un río con bajo caudal en esta época, y cruzando un par de puentes más hasta que llegamos a una bifurcación (más bien, trifurcación). Veremos unos carteles indicándonos: a la izquierda, la Laguna Grande de Gredos; a la derecha, a las 5 Lagunas (camino por el que regresaremos). Nosotros en cambio, tras avanzar unos 5 metros a la derecha tiraremos de frente por una trocha bien señalizada por hitos. Y prácticamente desde aquí hasta los 1780 mts aprox, estaremos en continuo ascenso, pasando varias colinas una detrás de otra. Llegada esa altura, el camino se estabiliza en plano hasta alcanzar el Refugio (chozo) del Cervunal.

Llegamos al chozo, lugar en el que aprovecharemos para tomar un pequeño ágape. Eché un ojo al refugio. Está en buenas condiciones para pasar la noche.

Tras un ratito de descanso, nos tocará ya la parte "seria" de ascenso al Cervunal. De primeras, tomaremos una senda algo difusa, pero con algún hito que ayuda a seguirla. Casi iremos más intuyendo por dónde se debe subir que por lo marcado de la misma. De hecho, y a pesar de no ver hitos, ascenderemos de inicio, por la parte derecha del lecho de un río, y posteriormente, por el lecho mismo. Eso se puede hacer ahora en verano que está seco. Imagino que en otra época no se podrá. En cualquier caso, parece ser el camino correcto, ya que al final de este lecho veremos ya algún hito como marcando la senda. Desde aquí, tendremos que subir al collado previo al Cervunal. Esta subida corta sí que está bien marcada.

Ya una vez en el collado, no nos quedará mucho trecho hasta la cima. Pero aquí ya, aunque habrá hitos sueltos, todo el camino hasta hollarlo será a través de bloques grandes de piedra. A mi este tipo de subidas me gusta, pero es importante destacar que no es una subida "comoda" como si se tratara de una senda.

Tras unos 200 mts de subida, alcanzamos la cima. Ésta es un poco difusa. Comentar que yo consideré la cima un montón de piedras un poco más adelante de donde marcan los mapas. En cualquier caso, es una cima muy amplia que no tiene dificultada alguna.

Aquí aprovechamos para volver a comer algo. También me di cuenta que, en mi afán por subir, me había pasado de largo un bonito mirador de las 5 lagunas que estaba un cacho más abajo. Yo aquí volví a bajar hasta dicho mirador, para luego regresar de nuevo a la cima. Este paso lógicamente es prescindible. De hecho, o bien no se hace (lo cierto es que después en la bajada, que la hice por otro sitio, se ven casi las mismas vistas), o bien se hace de primeras antes de llegar a la cima. Así no hay que subir dos veces. Bajé unos 50 mts de desnivel, pero con el "tute" que ya llevamos, al final todo cuenta...

En fin, lo comentado, las vistas desde ese mirador de las 5 lagunas, así como La Galana, Almanzor, etc, sin impresionantes, pero se pueden contemplar también en el descenso.

Relativo a éste, y tal y como comenté al principio: lo hice comenzando por una pequeña y visible canal. Es tendida, pero no lo suficiente para tener que hacer destrepes. Aun así, es una bajada seria, y hay que poner los 5 sentidos en ella para evitar resbalar con piedras sueltas que podrían darnos un gran disgusto.

Tras un descenso de unos 350 mts pronunciados, y con mucha calma, llegaremos a la Laguna Bajera. A partir de aquí, el camino está marcadísimo con muchos hitos, así que no tiene ninguna pérdida, e iremos recorriendo las distintas y preciosas lagunas. También veremos ya un montón de gente y grupos que vienen a pasar la noche, ya que el sitio es realmente precioso, con el flanqueo del Risco de las Natillas, el Picurucho y el Risco del Gutre flanqueándonos. También comenzaremos a ver por doquier decenas de cabras montesas, iconos de este macizo.

Tras llegar a la Laguna Cimera y aprovechar el idílico lugar para comer el bocata, volveremos sobre nuestros pasos hasta alcanzar la Laguna Bajera y desde aquí, comenzar el descenso hacia la Garganta del Pinar. Este descenso también tendrá algún punto un poco empinado, aunque no tan marcado como el descenso desde el Cervunal. En cualquier caso, se trata de un descenso hitado en todo momento, por lo que es fácil seguirlo. Y ya alcanzada la base de la Garganta, continuaremos descendiendo ya poco a poco por terreno más sencillo, e iremos atravesando la Laguna de la Escoba, así como pequeñas cascadas y arroyuelos formados por estas lagunas. También poco después nos encontraremos con el Chozo de la Barranca, el cual por cierto no sé cómo estará en su interior porque parecía estar cerrado.

La senda será sencilla, pero como dije al principio, en un día tan caluroso, hace mucha mella. Especialmente porque es importante reseñar que no hay ninguna sombra hasta la parte final, donde ya aparecen algunos robles. De ahí que en algún punto me desvié unos metros del camino, con la idea de remojarme un poco, al estar "abrasado".

Finalmente, a falta de unos dos kms aprox. enlazamos con el camino de la ida y llegamos sin mayor problema al parking.