CABRA-PICACHO Y ERMITA DE LA VIRGEN DE LA SIERRA-LA NAVA-LOBATEJO-CHORRERAS-SUMIDERO-SIMA DE CABRA

Excelente ruta que nos permite adentrarnos en algunos de los rincones más bellos y singulares del Parque Natural de las Sierras Subbéticas. Ruta muy variada en la que sentiremos la devoción y el fervor religioso que impregna el sendero por el que los egabrenses suben a venerar a su Virgen de la Sierra, con un tramo final realmente bonito. Este recorrido nos permite coronar dos vértices geodésicos: el emblemático Picacho de Cabra, también conocido como el Balcón de Andalucía por sus extraordinarias vistas a toda la comunidad autónoma, y el Lobatejo, con su inmenso lapiaz protegiéndolo de los incautos que nos empeñamos en encaramarnos a su cumbre. Descenderemos por el Arroyo de la Fuensanta que nos regala unas preciosas cascadas, conocidas como Las Chorreras y que nos conducen a la inmensidad de La Nava de Cabra, encantador paraje que atesora esta sierra en sus alturas, y en cuyo seno esconde el reciente Sumidero del Río Bailón, un singular fenómeno geológico que aconteció el año pasado y en el que el terreno engulle literalmente todo el río que se precipita hacia las entrañas de la tierra en una cascada hasta nadie sabe donde. Realmente imponente. Y como colofón de esta ruta llegaremos a la histórica Sima de Cabra, de 116 metros de profundidad y que ya es mencionada por Cervantes en El Quijote. Todo ello salpicado por infinidad de enormes quejigos centenarios y preciosas fuentes de piedra, peculiares estaciones de penitencia del caminante que patea por estos lares. En definitiva, una recorrido concebido para disfrutar y que constituye una sucesión de parajes singulares en una ruta para el recuerdo.
Iniciamos la ruta en la Estación de Cabra en la Via Verde de la Subbética. Tomamos la vía verde a la derecha en dirección Lucena hacia el sur. A unos 400 metros nos encontraremos un cruce con un carril y una señalización del Sendero de la Ermita o PR-A 80. Iniciamos la subida por este sendero tomando la pista que nos sale a la izquierda y que con fuerte pendiente gana altura rápidamente entre olivos en dirección este. El camino que llevamos también es conocido como el Camino de Góngora, nombre que le viene del Cortijo de Góngora, cuyas ruinas pasamos tras hacer el camino una doble curva. Buen punto este para echar la vista atrás y obtener unas buenas vistas de la ciudad de Cabra. Seguimos avanzando ahora junto al arroyo de Góngora hasta llegar a la zona conocida como Los Colchones donde encontraremos una preciosa piedra de molino y donde comienza a aflorar la roca por doquier a la vez que el Picacho de Cabra se erige desafiante al frente. Tras pasar una puerta el camino aumenta la pendiente mientras avanza junto a una pedrera y una cresta rocosa con un agreste lapiaz que ameniza el esfuerzo. Pasaremos junto al Peñón de la Beata rodeado de enormes quejigos y por donde seguramente veremos preciosos ejemplares de caballos de pura raza española. Llegamos al Cortijo de la Viñuela, donde tenemos junto a su entrada una fuente para la reposición hídrica. Aquí abandonamos la pista y tomamos una vereda que nos lleva a la carretera de subida al Santuario. Tras cruzar la carretera flanqueamos unas puertas de forja que dan entrada a un frondoso bosque de pinos, abetos y cipreses. El sendero avanza zigzagueante jalonado por gran cantidad de cruceros de piedra hasta llegar a la cumbre, el Picacho de Cabra (1216m), fantástico mirador que ofrece una panorámica excepcional de las tres unidades geográficas y geológicas que componen Andalucía: Sierra Morena, la Depresión del Guadalquivir y la Coordillera Bética. En 1926, durante el XIV Congreso Geológico Internacional, el Picacho de Cabra fue elegido el punto de partida de las excursiones por el sur de la Península. Fue declarado Sitio Natural de Interés Nacional en 1929, una de las primeras figuras de protección que se otorgaron en España. Junto a esta cumbre se encuentra el Santuario o Ermita de Ntra. Sra. de la Sierra, puesto que según la leyenda aquí fue encontrada la imagen de la Virgen de la Sierra (siglo XIII), la patrona de Cabra, cuando finalizó la ocupación musulmana. Tras detenernos en varios miradores descendemos de nuevo el precioso sendero por el que accedimos a esta cumbre hasta llegar a la carretera, que seguimos ahora hacia abajo en dirección este hasta que tras pasar un zigzag de la carrtera nos encontramos a la izquierda un aparcamiento señalizado; estamos ante el inicio del Sendero de la Nava. Abandonamos pues el asfalto e iniciamos este sendero que comienza por pista. Inmediatamente veremos bajo ésta una preciosa fuente de piedra y las ruinas del Cortijo Nuevo, seguimos por la pista dejando por encima nuestra el Cortijo del Loberón y recortando un zigzag de la pista llegaremos al Cortijo de la Virgen ya en plena Nava de Cabra. Seguimos la pista hacia el norte hasta que tras cruzar el Río Bailón encontramos una bifurcación, lugar donde abandonamos el sendero señalizado tomando la pista que se dirige hacia el este a nuestra derecha. Seguimos esta pista que cruza el sector más meridional del Polje de la Nava entre hermosos quejigos centenarios y fuentes como la Fuente de la Nava. Avanzamos junto a la abrupta cara norte del Tajillo del Aguila siguiendo siempre la pista. Pasamos junto el Cortijo Romero y posteriormente por el Cortijo de Navazuelo. Tras pasar el cortijo nos encontramos una fuente bellísima, la fuente de Navazuelo, con sus características pilas de roca y musgo. Aquí abandonamos la pista y tras pasar por los antiguos cortijos de Navazuelo comenzamos a subir por una cañada que surge junto a ellos en dirección este entre encinas y vetustos quejigos para girar posteriormemente hacia el NE e iniciando un trabajoso lapiaz que nos conduce hasta el vértice geodésico del Lobatejo (1379m). Sus vistas son sublimes, además de brindarnos habitualmente el vuelo del buitre leonado puesto que las buitreras de una importante colonia de este ave se encuentran muy cerca de este punto. Comenzamos a descender hacia el oeste evitando la cresta por donde hemos venido antes encontrando ahora un senderillo que nos conduce cómodamente al Collado de Navazuelo, donde encontramos una pista que nos introduce en un idílico bosque de encinas y quejigos bastante frondoso y húmedo, repleto de musgos y líquenes, dándole una aspecto de bosque encantado que amenizará gratamente este tramo de fuerte descenso. Tras pasar una puerta salimos a otra pista de más entidad que tomamos a nuestra derecha en dirección NO y que tras pasar el Puerto del Mojón y el Cortijo del Dornajuelo nos introduce en los Llanos Altos de Navazuelo, una impresionante llanura entre el Cerro Alcubillas y la Peña de Miguel Pérez, donde se forma el Arroyo de la Fuensanta, cuyo cauce seguimos aguas abajo introduciéndonos en un encinar donde el arroyo discurre transmitiendo una serenidad idílica hasta llegar a dos cascadas conocidas como Las Chorreras donde el Arroyo de la Fuensanta se despeña crenado unas covachas y pozas espectaculares. Salimos de nuevo a la Nava donde tomamos la pista señalizada como Sendero de la Nava para que nos lleve en dirección sur hasta tomar una pista que nos parece a la derecha y que tras cruzar el Río Bailón por un puente se dirige hacia la Majada y el Cortijo de las Melladas. Tras cruzar el puente nos salimos de la pista ara continuar hacia el SO por el borde oeste de la Nava. Tras cruzar un vallado por una puerta llegamos al paraje de Alameda Negro o “Alameílla Negra” donde nos encontramos un impresionante sumidero o ponor en el que se precipita el Río Bailón en forma de cascada, desapareciendo por completo hacia las entrañas del terreno. Sorprendente. Seguimos la misma dirección (sur) por el borde de la nava y tras pasar una valla por un el tronco de un álamo caído que nos hace de sencillo puente comenzamos a apartarnos del valle para subir poco a poco buscando el Puerto del Robledo, situado en el collado entre el Picacho de Cabra y el Cerrillo de la Sima, siguiendo una antigua cañada bastante perdida que nos lleva hacia este. Una vez en el Puerto del Robledo nos encontramos con la sorpresa desagradable del día pues vergonzosamente la puerta que hay estaba cerrada, atada y reafirmada impidiendo el paso a cualquier persona. Hay un punto asequible de la alambrada junto a un quejigo que es por donde se puede abordar el paso aunque no de forma sencilla. Desde aquí contemplamos los bellos Tajos del Hoyo Robledo y nos dejamos caer hacia el oeste por la cañada hasta llegar al pilar del Robledo en las proximidades del Cortijo o Casa del Robledo. Desde aquí avanzamos en ascenso junto a una albarrada de piedra en dirección NO, hasta que un poco después en un colladito nos salimos del sendero para tomar otro de menor entidad que desciende con bastante pendiente hacia el oeste y que nos conduce siempre encajonados junto a un barranquillo con bastante vegetación hasta llegar a la impresionante Sima de Cabra de 116 metros de profundidad. Una de las cavidades con más historia y leyendas del mundo. Un poco más adelante llegaremos a las bellas ruinas del Cortijo de la Sima, con la hiedra ocupando sus tapias. Nos introducimos en el olivar y ya por pista y siempre con dirección suroeste descendemos hacia la Via Verde en las inmediaciones de la Estación de Cabra, punto de inicio y final de esta ruta.