CAMINHO DA GEIRA E DOS ARRIEIROS ETAPA 6 CORTEGADA-BERÁN
near Cortegada, Galicia (España)
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Trail photos
Itinerary description
Magnífica etapa llena de elementos interesantes la que nos conducirá de la ciudad balneario de Cortegada a Berán, ya que nos llevará un tiempo más que bien empleado las visitas a Meréns, con su flamante mayor escudo de Galicia, la obligada visita a Ribadavia, antigua capital del reino de Galicia, o Beade, con su espectacular calvario y capela de San Roque. Además, hoy por primera vez entraremos de lleno en el Camiño dos Arrieiros, antiguo camino utilizado en el medievo, sobretodo en el margen izquierdo del río Avia, para transportar el vino ribeiro en primera instancia a Santiago de Compostela y desde allí a zonas de la cornisa cantábrica, de allí a Inglaterra e incluso como documentado, a América de la mano de Cristóbal Colón.
Salimos de nuestro alojamiento, la histórica Casa do Conde, para girar a la derecha por la carretera OU-402 por la que seguiremos unos metros antes de cruzar girar a la derecha y en subida, alcanzar entre casas la Rúa do Regueiro. Acabaremos saliendo otra vez a la carretera, que dejaremos para tomar un sendero que desciende entre pinos a la derecha para llegar a Rabiño, donde nos llama la atención un curioso peto de ánimas, uno de esos pequeños santuarios ubicados en caminos, encrucijadas e iglesias en Galicia y en el norte de Portugal (alminhas), los cuales constituían una manifestación material del culto a los muertos y de la devoción a las ánimas que se procesaba en esas regiones. Giramos a la derecha por el asfalto tomando unos 600 metros después la bifurcación a la derecha donde comenzaremos a subir de manera progresiva hasta la Igrexa de San Bieito de Rabiño. Unos 400 metros más adelante dejando a la derecha la iglesia encontraremos dos caminos de tierra entre árboles, tomando el que sigue por la derecha. Comienza aquí una fuerte continua durante unos 700 m que nos lleva a un alto donde debemos tomar la pista de tierra que desciende a la izquierda y que nos llevará a pasar por un depósito. Al poco, ya tendremos una bonita panorámica de la localidad de Meréns, así como del río Miño. El recorrido por la población de Meréns nos lleva a pasar por la Casa dos Condes de Ximonde o Casa Grande en cuya fachada encontramos el magnífico escudo de Puga Sarmiento, considerado el más grande de Galicia, y que cuenta con 18 particiones así como de una corona en la parte superior. Al lado, encontramos otro curioso peto de ánimas, y al poco dejaremos a la derecha la Igrexa de San Cibrán. Pasada la población, cruzaremos otra vez la carretera para tomar un camino que en unos 600 m nos llevará a la orilla del rio Miño, por donde iremos durante unos 3 kilómetros en un precioso tramo a la sombra de los árboles hasta llegar al puente del Rio Arnoia. Cruzado el puente bajaremos a su derecha para pasarlo por debajo e iniciar un precioso recorrido al borde del citado río, afluente del Miño, y el segundo que le aporta más caudal sólo superado por el río Sil. Llegamos a la desembocadura donde podemos ver una serie de pequeños islotes, siguiendo por el paseo hasta pasar por unas viñas y algo después, dejando a nuestra derecha la Capela de Nossa Señora del Perpétuo Socorro. Rodeamos las instalaciones deportivas y nos adentraremos en un bonito bosque de robles acercándonos al río Miño y comenzando a encontrar cada vez más, viñas en plena época de vendimia. Este bonito y cómodo tramo nos llevará unos kilómetros, hasta llegar a un punto donde parece que el camino de tierra desaparece, haciendo un giro de 180 º en subida por asfalto para alcanzar la carretera OU-0305 que nos llevará al puente sobre el río Miño, que cruzamos, y que siguiendo la carretera y tras dos curvas, nos dejará en Ribadavia, a la que accedemos tras cruzar el puente sobre el río Avia. Sin duda que esta localidad merece dedicarle un par de horas al igual que hicimos nosotros, una vez pasada la Porta Nova y entrado en el núcleo antigua de la ciudad, nos situamos ante la iglesia de Santa Maria Madalena, tomando algo en el bar de la plaza y aprovechando para dejar las mochilas y poder recorrer cómodamente la ciudad. En la Praza Maior, nos dirigimos a la oficina de turismo donde nos pusieron un par de sellos, uno de ellos el de la iniciativa de los Descubridores de Sefarad, obteniendo además un pasaporte para futuras visitas. Ribadavia, es una de las ciudades que forman parte de la ruta de las juderías (barrios de callejuelas estrechas donde habitaban concentrados quienes practicaban la religión judía), así que no podíamos pasar por la ciudad sin dejar de pasear por esa zona en busca de símbolos, grabados, detalles y ornamentos relacionados con la cultura hebrea. Otro lugar imprescindible a visitar, aunque sea desde el exterior, es su castillo y parte de la muralla defensiva, así como la iglesia de Santo Domingo, donde se oficiaba una boda a nuestro paso, así como las de San Xoán, relacionada directamente con el Camino de Santiago y el paso de peregrinos a lo largo de la historia, así como la Igrexa de Santiago, al lado del museo etnológico. Como colofón a nuestro paso por la bonita población, compramos en un pequeño puesto, algunos dulces elaborados según recetas tradicionales de la repostería sefardí. Salimos de la localidad pasando junto a la ciutada Igrexa de Santiago por la Rúa Santiago y después por la Rúa San Martiño, por donde saldremos del núcleo histórico. Luego, tomaremos la Rúa do Ribeiro hasta llegar al parque de Nova Veronza junto al río Avia, que recorreremos hasta pasar bajo el viaducto de la autospista de la Rías Baixas. Continuaremos más o menos siguiendo el curso del río en dirección a San Cristovo, al que llegaremos cruzada la carretera OU-504 a la altura de un peto de ánimas. Entramos a la población pasando por su iglesia y dejándola atrás por asfalto para entrar en un bonito tramo donde vamos a encontrar inmensos campos de viñas. Vale la pena echar de vez en cuando la vista atrás para observar la bonita estampa de la viñas, y más como fue en nuestro caso, si tenemos la suerte de coincidir con la época de la vendimia. Pasamos por una capilla, la Capela da Misericordia, donde aprovechamos para hacer una pausa antes de continuar hacia la ya cercana población de Beade, que atravesamos y donde tenemos una bucólica vista de su iglesia de Santa María entre la viñas. A la salida de la población, no hay que perderse su espectacular calvario al lado de la Capela de San Roque. En Beade, estuvo establecida una de las siete encomiendas que tuvo en Galicia, la orden militar de de San Juan de Jerusalén, orden protectora de los peregrinos. A la derecha de la iglesia de Santa María, a la que vale la pena acercarse, encontraremos el arco de entrada de la sede presidido por 3 escudos de piedra, además de encontrarnos con un exclusivo cruceiro coronado por una cruz de malta, elemento único en Galicia. Dejamos esta zona monumental de Beade saliendo a la carretera OU-212 que tomamos a la izquierda y que seguimos en ligera subida durante unos 2 km. Llegaremos a una señal donde se nos indica la dirección Berán-Leiro, que seguiremos y que dejaremos al poco para entrar a un bonito camino entre los viñedos que en subida y después de cruzar un vez la carretera para continuar por el camino, nos dejará en las primeras casas de Berán donde encontramos el Hospedaje Casa Lucita, nuestro alojamiento de hoy. A destacar el magnífico trato y el cariño con los que los propietarios tratan a los peregrinos, en una pensión muy sencilla, donde no debemos esperar grandes comodidades, pero donde vamos a tener, ducha, cama y una comida casera excelente.
Salimos de nuestro alojamiento, la histórica Casa do Conde, para girar a la derecha por la carretera OU-402 por la que seguiremos unos metros antes de cruzar girar a la derecha y en subida, alcanzar entre casas la Rúa do Regueiro. Acabaremos saliendo otra vez a la carretera, que dejaremos para tomar un sendero que desciende entre pinos a la derecha para llegar a Rabiño, donde nos llama la atención un curioso peto de ánimas, uno de esos pequeños santuarios ubicados en caminos, encrucijadas e iglesias en Galicia y en el norte de Portugal (alminhas), los cuales constituían una manifestación material del culto a los muertos y de la devoción a las ánimas que se procesaba en esas regiones. Giramos a la derecha por el asfalto tomando unos 600 metros después la bifurcación a la derecha donde comenzaremos a subir de manera progresiva hasta la Igrexa de San Bieito de Rabiño. Unos 400 metros más adelante dejando a la derecha la iglesia encontraremos dos caminos de tierra entre árboles, tomando el que sigue por la derecha. Comienza aquí una fuerte continua durante unos 700 m que nos lleva a un alto donde debemos tomar la pista de tierra que desciende a la izquierda y que nos llevará a pasar por un depósito. Al poco, ya tendremos una bonita panorámica de la localidad de Meréns, así como del río Miño. El recorrido por la población de Meréns nos lleva a pasar por la Casa dos Condes de Ximonde o Casa Grande en cuya fachada encontramos el magnífico escudo de Puga Sarmiento, considerado el más grande de Galicia, y que cuenta con 18 particiones así como de una corona en la parte superior. Al lado, encontramos otro curioso peto de ánimas, y al poco dejaremos a la derecha la Igrexa de San Cibrán. Pasada la población, cruzaremos otra vez la carretera para tomar un camino que en unos 600 m nos llevará a la orilla del rio Miño, por donde iremos durante unos 3 kilómetros en un precioso tramo a la sombra de los árboles hasta llegar al puente del Rio Arnoia. Cruzado el puente bajaremos a su derecha para pasarlo por debajo e iniciar un precioso recorrido al borde del citado río, afluente del Miño, y el segundo que le aporta más caudal sólo superado por el río Sil. Llegamos a la desembocadura donde podemos ver una serie de pequeños islotes, siguiendo por el paseo hasta pasar por unas viñas y algo después, dejando a nuestra derecha la Capela de Nossa Señora del Perpétuo Socorro. Rodeamos las instalaciones deportivas y nos adentraremos en un bonito bosque de robles acercándonos al río Miño y comenzando a encontrar cada vez más, viñas en plena época de vendimia. Este bonito y cómodo tramo nos llevará unos kilómetros, hasta llegar a un punto donde parece que el camino de tierra desaparece, haciendo un giro de 180 º en subida por asfalto para alcanzar la carretera OU-0305 que nos llevará al puente sobre el río Miño, que cruzamos, y que siguiendo la carretera y tras dos curvas, nos dejará en Ribadavia, a la que accedemos tras cruzar el puente sobre el río Avia. Sin duda que esta localidad merece dedicarle un par de horas al igual que hicimos nosotros, una vez pasada la Porta Nova y entrado en el núcleo antigua de la ciudad, nos situamos ante la iglesia de Santa Maria Madalena, tomando algo en el bar de la plaza y aprovechando para dejar las mochilas y poder recorrer cómodamente la ciudad. En la Praza Maior, nos dirigimos a la oficina de turismo donde nos pusieron un par de sellos, uno de ellos el de la iniciativa de los Descubridores de Sefarad, obteniendo además un pasaporte para futuras visitas. Ribadavia, es una de las ciudades que forman parte de la ruta de las juderías (barrios de callejuelas estrechas donde habitaban concentrados quienes practicaban la religión judía), así que no podíamos pasar por la ciudad sin dejar de pasear por esa zona en busca de símbolos, grabados, detalles y ornamentos relacionados con la cultura hebrea. Otro lugar imprescindible a visitar, aunque sea desde el exterior, es su castillo y parte de la muralla defensiva, así como la iglesia de Santo Domingo, donde se oficiaba una boda a nuestro paso, así como las de San Xoán, relacionada directamente con el Camino de Santiago y el paso de peregrinos a lo largo de la historia, así como la Igrexa de Santiago, al lado del museo etnológico. Como colofón a nuestro paso por la bonita población, compramos en un pequeño puesto, algunos dulces elaborados según recetas tradicionales de la repostería sefardí. Salimos de la localidad pasando junto a la ciutada Igrexa de Santiago por la Rúa Santiago y después por la Rúa San Martiño, por donde saldremos del núcleo histórico. Luego, tomaremos la Rúa do Ribeiro hasta llegar al parque de Nova Veronza junto al río Avia, que recorreremos hasta pasar bajo el viaducto de la autospista de la Rías Baixas. Continuaremos más o menos siguiendo el curso del río en dirección a San Cristovo, al que llegaremos cruzada la carretera OU-504 a la altura de un peto de ánimas. Entramos a la población pasando por su iglesia y dejándola atrás por asfalto para entrar en un bonito tramo donde vamos a encontrar inmensos campos de viñas. Vale la pena echar de vez en cuando la vista atrás para observar la bonita estampa de la viñas, y más como fue en nuestro caso, si tenemos la suerte de coincidir con la época de la vendimia. Pasamos por una capilla, la Capela da Misericordia, donde aprovechamos para hacer una pausa antes de continuar hacia la ya cercana población de Beade, que atravesamos y donde tenemos una bucólica vista de su iglesia de Santa María entre la viñas. A la salida de la población, no hay que perderse su espectacular calvario al lado de la Capela de San Roque. En Beade, estuvo establecida una de las siete encomiendas que tuvo en Galicia, la orden militar de de San Juan de Jerusalén, orden protectora de los peregrinos. A la derecha de la iglesia de Santa María, a la que vale la pena acercarse, encontraremos el arco de entrada de la sede presidido por 3 escudos de piedra, además de encontrarnos con un exclusivo cruceiro coronado por una cruz de malta, elemento único en Galicia. Dejamos esta zona monumental de Beade saliendo a la carretera OU-212 que tomamos a la izquierda y que seguimos en ligera subida durante unos 2 km. Llegaremos a una señal donde se nos indica la dirección Berán-Leiro, que seguiremos y que dejaremos al poco para entrar a un bonito camino entre los viñedos que en subida y después de cruzar un vez la carretera para continuar por el camino, nos dejará en las primeras casas de Berán donde encontramos el Hospedaje Casa Lucita, nuestro alojamiento de hoy. A destacar el magnífico trato y el cariño con los que los propietarios tratan a los peregrinos, en una pensión muy sencilla, donde no debemos esperar grandes comodidades, pero donde vamos a tener, ducha, cama y una comida casera excelente.
Waypoints
Intersection
725 ft
A la derecha
Intersection
729 ft
A la izquierda
Intersection
794 ft
A la derecha
Intersection
860 ft
A la derecha
Intersection
955 ft
A la izquierda
Intersection
1,237 ft
A la izquierda
Intersection
1,168 ft
Abajo izquierda
Waypoint
968 ft
Abajo a la izquierda
Waypoint
765 ft
Cruzamos carretera OU-402
Intersection
512 ft
A la izquierda
Intersection
515 ft
A la izquierda
Intersection
519 ft
A la izquierda
Intersection
496 ft
A la izquierda
Intersection
548 ft
A la derecha
Comments (1)
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Information
Easy to follow
Scenery
Moderate
Grande trabalho de informação pormenorizada