Activity

Camino de Santiago 10. Belorado - Atapuerca

Download

Trail photos

Photo ofCamino de Santiago 10. Belorado - Atapuerca Photo ofCamino de Santiago 10. Belorado - Atapuerca Photo ofCamino de Santiago 10. Belorado - Atapuerca

Author

Trail stats

Distance
19.95 mi
Elevation gain
1,542 ft
Technical difficulty
Difficult
Elevation loss
925 ft
Max elevation
3,850 ft
TrailRank 
67 4.8
Min elevation
2,504 ft
Trail type
One Way
Moving time
7 hours 21 minutes
Time
9 hours 50 minutes
Coordinates
5661
Uploaded
October 30, 2021
Recorded
October 2021
  • Rating

  •   4.8 2 Reviews

near Belorado, Castilla y León (España)

Viewed 662 times, downloaded 91 times

Trail photos

Photo ofCamino de Santiago 10. Belorado - Atapuerca Photo ofCamino de Santiago 10. Belorado - Atapuerca Photo ofCamino de Santiago 10. Belorado - Atapuerca

Itinerary description

Nos disponemos a realizar la etapa más larga de esta primera parte del Camino que estamos haciendo.
El Códex Calixtinus, la primera guía medieval del Camino de Santiago, obra de Aymeric Picaud, advertía que en las inmediaciones de los Montes de Oca —pequeña tachuela que interrumpe las planicies castellanas del Camino— se apostaban bandidos dispuestos a todo por apropiarse de la bolsa de los peregrinos incautos. Esos tiempos hoy ya han pasado y a lo único que hay que temer es a las rampas que, nada más dejar atrás Villafranca Montes de Oca, suben duras entre pinares para sortear esta pequeña sierra que supera los 1.100 metros de altitud sobre el nivel del mar (hemos comenzado la etapa en Belorado, a 765 metros). Partimos de Belorado a las 7:30 de la mañana sin nada en el estómago ya que todo estaba cerrado. El Camino sale de Belorado por la Avenida de Santiago y el Camino del Matadero hasta alcanzar la carretera N-120. Poco antes de llegar al Río Tirón, el Camino se separa de la carretera unos metros para cruzar el cauce a través de una pasarela instalada junto al puente medieval. Paralelo a ésta se encuentra el puente de piedra conocido como El Canto. Esta será la tónica de la primera parte de la ruta. La antigua ‘carretera de Logroño’ marca el camino muy cerca del trazado de la actual carretera nacional. Desde que salimos de Belorado, el Camino pica hacia arriba en una pendiente prácticamente imperceptible que va ganando metros de manera suave pero constante. Por una pista separada de la N-120 por el cauce del río Retorto, afluente del Tirón, avanzamos cómodamente hasta Tosantos. Justo antes de llegar nos encontramos un área de descanso con varias mesas y barbacoas. Continuamos por la Calle Real de Tosantos, que nos permite seguir adelante sin entrar en el pueblo, y apreciar, al otro lado de la N-120, la ermita de la Virgen de la Peña, enclavada en un escarpe rocoso. El Camino vuelve a ser idéntico a los primeros kilómetros. Sin demasiados sobresaltos, en un corto tramo, llegamos a Villambistia, donde nos recibe la iglesia parroquial de San Esteban, del siglo XVII. Este pueblo, que se distribuye en una ligera pendiente, en el pasado perteneció a la jurisdicción del Hospital de Villafranca. Una fuente de varios caños es uno de esos lugares que vinculan la magia con el Camino de Santiago y que suelen estar relacionados con cauces o fuentes de agua. La fuente que se encuentra junto a la Iglesia de San Esteban, dicen, tiene la propiedad de dar vitalidad al cansado y curar todo tipo de males. También el recuerdo del desaparecido hospital de la Caridad vincula al núcleo con la Ruta Jacobea. La senda parece empinarse, como muestra de lo que se avecina. Dejamos Villambistia por un camino arbolado. Seguimos adelante y, sin nada más que reseñar, llegamos en poco tiempo a Espinosa del Camino, a la que llegamos tras sortear la N-120. Aquí el Camino Francés comienza su lento ascenso hacia los Montes de Oca. El trazado actual atraviesa su larga calle mientras que en el pasado coincidía con el Camino Real a las afueras del caserío. La población perteneció también al señorío del Hospital de Villafranca. Atravesamos el pueblo a través de las calles Villa Franca y Santa Cecilia. Unos 200 metros después de dejar las últimas casas atrás cruzamos el cauce de un pequeño arroyuelo (Río Retorto) y seguimos por la pista hasta llegar a las ruinas del antiguo monasterio mozárabe de San Félix. Apenas quedan un par de muros arruinados y una portada de claro sabor musulmán (mozárabe) de este cenobio medieval que, según la tradición, descansa el ilustre Diego Rodríguez de Porcelos, fundador de la ciudad de Burgos. Pasadas la ruinas giramos a la izquierda en hacia la carretera nacional hasta el pueblo de Villafranca de Montes de Oca, lugar ideal para tomarse un descanso antes de afrontar el tramo más duro de la jornada. El nombre de esta villa trae ecos de su pasado esplendor cuando fue Sede Episcopal. La impresionante Iglesia de Santiago y el Hospital de peregrinos de La Reina dan buena muestra de la importancia de esta villa típicamente jacobea que se extiende a ambos lados de la ruta que conduce a Santiago (la N-120 en este tramo). También fue punto temible en el trazado jacobeo medieval al iniciarse allí los Montes de Oca plagados de bandidos y salteadores. Estamos ya a 955 metros sobre el nivel de mar; en estos los 11 kilómetros recorridos hasta ahora hemos subido casi 200 y subiremos otros 200 en los próximos 3,5, por lo que conviene reponer fuerzas y llenar las cantimploras de agua ya que por los próximos 12 kilómetros (unas tres horas) caminaremos entre pinares. Antaño los Montes de Oca fueron un lugar arriesgado donde los peligros aguardaban tras cada matorral y cada recodo; hoy en día, a pesar de tratarse de un tramo muy solitario, ofrecen naturaleza, belleza y paz. Dejamos la carretera N-120, pasamos junto a la iglesia de Santiago (que guarda una talla barroca del Apóstol Santiago) y dejamos de lado el que fue el hospital de la Reina o de San Antonio Abad. Las primeras rampas (pasando por un mirador sobre las sierras de la Demanda y San Millán) hasta la Fuente de Mojapán son las más duras de la travesía, y conviene tomárselo con calma. A partir de la fuente el Camino comienza a suavizarse. Seguimos la pista entre robles, enebros y brezos, que continúa su ascenso, primero hasta un repetidor y después hacia un monumento a los caídos durante la Guerra Civil, que se encuentra a escasos metros de la carretera nacional. A partir de aquí, el camino baja vertiginosamente hasta un pequeño barranco en el que vuelve a subir un duro, aunque corto, repecho. La pista de gravilla suelta pasa a ser una amplia pista forestal rodeada de pinares de repoblación por la que, en un suave descenso, recorremos siete kilómetros y medio hasta llegar al monasterio de San Juan de Ortega, uno de los grandes monumentos del Camino Francés. Este último tramo es tedioso, conviene tomárselo con calma y además nos cae un chaparrón que nos deja bastante mojados. Aprovechamos para comer en el albergue de San Juan de Ortega y reponer fuerzas ya que aunque muchos peregrinos terminan etapa aquí, nosotros decidimos seguir hasta Atapuerca.
Abandonamos San Juan de Ortega y llegamos a una carretera autonómica donde existe una gran cruz, que dejamos a nuestra espalda, adentrándonos en un hermoso bosque de robles. Seguimos de frente y algún paso «canadiense» da cuenta de que nos encontramos en una zona eminentemente ganadera. Se hace patente la antigua trinchera del ferrocarril que comunicaba Burgos con la Sierra de la Demanda. Una hermosa pradera salpicada por algunos notables ejemplares de roble nos lleva, sin pérdida, a la localidad de Agés. Dejamos atrás Agés echando un último vistazo a su arquitectura tradicional. A la salida del pueblo nos encontramos con un airoso puente que salva el río Vena, cuya construcción está atribuida al propio San Juan de Ortega. Desde este punto, casi dos kilómetros de una carretera poco transitada nos llevan hasta la siguiente población, Atapuerca, en la que nuestros ancestros, al abrigo de sus oquedades, encontraron su forma de vida. Aunque el tráfico es escaso, la recomendación es mantener siempre las normas de seguridad en la circulación. Doña Urraca donó la villa de Atapuerca a la Orden militar del Hospital de San Juan de Jerusalén, cuyos miembros atendían con esmero a los peregrinos enfermos. Alfonso VII confirmaría esta donación en el año 1138. Para atravesar la zona pantanosa entre Agés y Atapuerca el santo ingeniero de Ortega construyó una calzada de la que aún se conservan restos. En los alrededores de este enclave se mantiene en pie un hito conmemorativo de la batalla que en estos campos libraron navarros y castellanos.

Waypoints

PictographWaypoint Altitude 2,543 ft
Photo ofBelorado

Belorado

PictographWaypoint Altitude 2,717 ft
Photo ofTosantos

Tosantos

PictographWaypoint Altitude 2,862 ft
Photo ofVillambistia Photo ofVillambistia

Villambistia

PictographWaypoint Altitude 2,993 ft
Photo ofEspinosa del Camino Photo ofEspinosa del Camino

Espinosa del Camino

PictographRuins Altitude 3,056 ft
Photo ofRuinas monasterio mozárabe de San Felix

Ruinas monasterio mozárabe de San Felix

PictographWaypoint Altitude 3,195 ft
Photo ofVillafranca Montes de Oca

Villafranca Montes de Oca

PictographMountain pass Altitude 3,797 ft
Photo ofAlto de la Pedraja Photo ofAlto de la Pedraja

Alto de la Pedraja

PictographReligious site Altitude 3,315 ft
Photo ofMonasterio de San Juan de Ortega

Monasterio de San Juan de Ortega

PictographWaypoint Altitude 3,200 ft
Photo ofAgés Photo ofAgés

Agés

PictographWaypoint Altitude 3,162 ft
Photo ofAtapuerca

Atapuerca

Comments  (2)

  • Photo of pariaso
    pariaso Nov 8, 2021

    I have followed this trail  View more

    Etapa larga y dura por la subida a los Montes de Oca, pero también una de las mas bellas.

  • Photo of Chema Xema
    Chema Xema Sep 14, 2022

    I have followed this trail  verified  View more

    Después de tanto secano se agradece algo de montaña y desnivel , gracias.

You can or this trail