Camino de Santiago 6. Los Arcos a Logroño

Traspasamos el portal de Castilla (hito 001) e inmediatamente cruzamos la carretera y el río Odrón. Pasadas las últimas casas de Los Arcos retornamos a otra pista agrícola que avanza en línea recta, paralela a la N-111, durante tres kilómetros (hito 002). Llegados a este punto, difícil de describir pero señalizado, nos desviamos a mano derecha por una senda. Proseguimos por ella hasta la regata de San Pedro y la carretera de Sansol (hito 003), que nos lleva a esta localidad. Visitamos el pueblo de grandes casas solariegas y con inmejorables vistas sobre Torres del Río (hito 004). Un rápido descenso nos sitúa a las puertas de Torres. Cuesta subir por sus empinadas calles y dar con la iglesia del Santo Sepulcro (hito 005), templo octogonal del siglo XII que mantiene una torre adosada que pudo utilizarse como faro para guiar a los peregrinos que nos precedieron. Abandonamos Torres del Río por la parte alta y sus últimas calles dan paso a una pista que a su vez cede ante un camino posterior. Éste termina por endurecerse y emula el trazado de la NA-1110 (antigua N-111), carretera que cruzamos en plena subida para alcanzar la ermita de la Virgen del Poyo (hito 006). El santuario, en sillarejo y muy sobrio, fue construido en el XVI y reformado durante el barroco y el siglo XIX.
Bajamos de nuevo a la NA-1110 y la seguimos hasta salir de la curva, donde tomamos un camino que sube hasta una carretera secundaria que va hacia Bargota. Seguimos de frente por la carretera y la dejamos cien metros después para coger una pista. Gracias a ella podemos descender más cómodos el barranco de Cornava, un desnivel de más de 125 metros fruto de la erosión del agua. No todo es arcilla, aquí crecen pinos de repoblación y algunos frutales, y al fondo del barranco hay parcelas geométricas de viñedos y olivares nutridos por la tierra semiárida. Llegados al fondo de la hoya continuamos entre toboganes y prestando atención a los cruces. Nuestro trazado es calcado al de la NA-110 y por eso no es de extrañar que terminemos caminando por ella. Tras un kilómetro de asfalto salimos por la izquierda y proseguimos en paralelo (hito 007) a la vía hasta la entrada de Viana. Avanzamos hasta el centro de la población por las calles El Cristo, La Pila, el portal de la Trinidad, la plaza del Coso, donde está el Balcón de Toros y, finalmente, la calle Mayor (hito 008), que conduce hasta la plaza de los Fueros. Aquí se dan cita, frente a frente, el Ayuntamiento y la iglesia de Santa María (hito 009), gótica de soberbias dimensiones y orgullosa de su original portada renacentista.
Dejamos Viana junto al colegio Ricardo Campano y por una pista entre huertas vamos a cruzar la NA-7220. Más adelante haremos lo propio con la NA-1110 y seguiremos también por pista hasta la ermita de la Virgen de Cuevas (hito 010). Si alguien necesita un descanso debe saber que detrás de la ermita hay una agradable zona arbolada con mesas y una fuente. El día pasa entre campos de cultivo y, al llegar a la altura de una señal que indica Observatorio El Bordón, Laguna de las Cañas, giramos a la derecha para internarnos brevemente en un pinar. Después cruzamos la carretera por una pasarela (hito 011), ojo, y seguimos por el talud junto a otra masa de pinos hasta acercarnos a la papelera del Ebro, donde se encuentra el límite provincial (hito 012). Navarra, cede el turno a La Rioja. Un mojón de piedra con la vieja inscripción -provincia de Logroño- lo confirma. A partir de aquí será un andadero el que nos guíe hasta la capital riojana. Entramos en Logroño por el puente de piedra sobre el Ebro (hito 013), de 1884 pero construido sobre reformas del primitivo que se levantó en el siglo XI por Santo Domingo de la Calzada y San Juan de Ortega.