Camino de Santiago del Norte. Etapa Santillana del Mar - Comillas

Etapa plácida e interesante, que alterna paisajes de interior con dos breves incursiones junto al mar, y que discurre casi siempre por asfalto, aprovechando carreteras locales. La etapa la finalizamos en la localidad de Comillas, que a finales del siglo XIX se convirtió en lugar habitual de veraneo de la aristocracia y la alta burguesia; destacan los edificios de estilo modernista como El Capricho, una de las primeras obras de Antoni Gaudí.

La villa marinera de Comillas, de origen medieval, adquiere protagonismo a mediados del siglo XIX gracias a la inmensa fortuna del primer Marqués de Comillas, D. Antonio López. Tiene un pequeño núcleo con casonas de estilo clasicista montañés y casas populares

Fuera del núcleo urbano se encuentran los edificios más emblemáticos, todos ellos de finales del siglo XIX principios del XX con representaciones neomudéjares, neogóticas y modernistas, entre otros estilos. En Comillas se puede visitar la fachada principal del cementerio de estilo modernista con una iglesia parroquial tardo-gótica XV-XVI, los edificios y jardines de la Universidad Pontificia de Comillas, El Capricho de Gaudí, Palacio de Sobrellano, etc.

Durante esta etapa se pueden visitar además la iglesia de San Martín de Cigüenza, la abadía de Vía Coeli en Cóbreces y la iglesia Parroquial de Novales entre otros.

RECORRIDO:
Salimos temprano desde el Albergue El Convento (CA-131) hacia la izquierda para girar a la derecha al llegar al Museo Diocesano Regina Coelli y, unos 50m. más adelante, a la izquierda por la calle Juan Infante, en una bifurcación. Esta calle nos lleva a la bonita Plaza Mayor de Santillana, donde se sitúa el Ayuntamiento y la Torre de D. Borja, entre otros. Desde la plaza Mayor o del Ayuntamiento, tomamos la calle de los Hornos, a mano derecha y en ascenso y al cabo de 500 metros de subida pasamos junto a la puerta de un camping. Seguimos de frente por un pasillo con vallas a ambos lados, espacio que separa las dos zonas del camping. Al final de dicho pasillo, tras una bajada por escaleras, cruzamos la carretera CA-137 y continuamos de frente por una carreterilla local. Tras una breve subida, entre bellos paisajes de prados, descendemos hacia las casas de El Arroyo.

De nuevo en subida, pasamos junto a una ermita de piedra y tomamos a la izquierda una pista asfaltada; enseguida superamos un collado, donde comienza un bonito tramo en bajada que nos lleva a Oreña (localidad que dispone de un bar-posada a 150 metros del camino, así como otros servicios un poco más allá, a pie de la carretera).

A la salida de Oreña, tomamos a la derecha una pista asfaltada que asciende, entre prados, hasta la iglesia de San Pedro de Oreña, del siglo XVI, situada en lo alto de una loma. Siguiendo la misma pista descendemos hacia el barrio de Caborredondo, donde nos incorporamos a la carretera CA-920, convertida en calle principal, que tomamos a mano derecha. Pasamos junto a la ermita de San Bartolomé, construida en el siglo XI, y 250 metros más adelante encontramos un bar-restaurante.

En Caborredondo, pasamos ante el albergue Izarra y continuamos en ascenso por la misma carretera local, que ahora pasa a denominarse CA-352; superamos un puente por encima de la CA-131 y seguimos de frente; al cabo de 800 metros, junto al acceso a la finca La Solana, nos
desviamos a mano derecha por una pista en bajada (atención, pues la señal es pequeña y algunos se la pasan); caminamos a lo largo de un valle de postal, con prados, vacas y campos de maíz, para llegar a Cigüenza, pequeña localidad de casas dispersas.

En Cigüenza continuamos por la misma pista, cruzando el arroyo de San Miguel y superamos la iglesia de San Martín de Tours (construida en el siglo XVIII) y al cabo de 600 metros, tras otro puente sobre un regato, entramos en el barrio de La Herrería. Aquí al llegar a la ermita de San Pantaleón, del siglo XVII; giramos a la derecha, en ascenso, para llegar a la carretera CA-353, la cual tomamos a mano derecha; avanzamos con cuidado por su arcén, flanqueado por plátanos de sombra, y al cabo de 1,1 km aprox. llegamos a las primeras casas de Cóbreces. El camino prosigue de frente, a lo largo de la acera de la carretera en dirección hacia la iglesia y el monasterio-abadía, fáciles de distinguir por sus pináculos neogóticos y sus colores vistosos.

Ya, en Cóbreces, seguimos en descenso por la acera, dejando a nuestra izquierda la iglesia de San Pedro ad Víncula y pasando junto a la abadía de Viaceli (donde los monjes suelen habilitar un albergue), cruzamos la carretera C-131 y superamos la ermita de San Roque y unos 50 metros más adelante tomamos la carretera local CA-357 a nuestra derecha en dirección a la playa de Luaña. Una vez en la arena giramos a la izquierda, continuando por pasarelas de madera y cruzamos un puentecito peatonal para iniciar el duro ascenso al pueblo de Trasierra. Durante la subida podemos gozar de bellas vistas sobre la playa, y una vez arriba divisaremos, a lo lejos, los Picos de Europa.

En Trasierra continuamos por pista de asfalto, sin apenas desniveles, al cabo de aprox. 1,2 km giramos a la izquierda por una fuerte bajada que conduce al barrio de Sierra, donde cruzamos de nuevo la carretera CA-131, Seguimos por la carretera a mano derecha durante apenas 50 metros para girar a la izquierda por la carretera local CA-358, en descenso; para pasar junto al cementerio de Ruiloba, lugar donde comienza un andadero peatonal. Bordeamos un camping y continuamos hasta La Iglesia.

En La Iglesia (Ruiloba) junto al ayuntamiento giramos a mano derecha por la calle Abadía, en dirección al campamento juvenil. Caminamos entre altos muros de piedra y pasamos ante el colegio público de Ruiloba, con su albergue juvenil anexo. Por una carreterilla local, en subida, llegamos a la capilla de San Roque y San Sebastián, en la localidad de Pando; en el interior de la iglesia hay dos grandes conchas marinas, convertidas en pilas bautismales, y un libro de peregrinos donde podemos firmar.
Seguimos a mano derecha por la carretera local CA-360, sin apenas arcén, durante 1,0 km hasta el núcleo rural de Concha, donde doblamos a la izquierda por su preciosa calle Mayor, toda ella empedrada y flanqueada por casonas con balcones de madera.

Al final de la calle comienza una pista asfaltada a mano izquierda, al cabo de unos metros tomamos otra pista también a la izquierda, esta vez en ascenso, para girar por un camino de tierra que nace a la derecha. Ahora caminamos bajo el bosque y tras 1km aprox. descendemos a la carretera CA-131, ya a la entrada de Comillas. El camino nos deja en plena curva de la carretera, justo antes del puente sobre el arroyo Gandarias, con vistas sobre las rocas de una pequeña cala. Mucha atención aquí, pues es un punto peligroso y bastante estúpido, donde no tenemos más opción que cruzar a la brava la carretera, en plena curva, ya que no han dejado arcén en el margen izquierdo. Este desaguisado podría resolverse pintando un paso de peatones y abriendo un pequeño hueco en la valla cilíndrica.

Al cabo de 150 metros cruzamos de nuevo la carretera (hay paso de peatones) y tomamos la acera de la izquierda que asciende, a la sombra del arbolado, hasta el casco antiguo de Comillas, villa muy turística y que cuenta con todos los servicios.
¡BUEN CAMINO!

INFORMACIÓN de gronze.com
- https://www.gronze.com/etapa/santillana-mar/comillas


AVISO: La ruta descrita, así como el track y waypoints los he descargado de mi GPS después de hacerla personalmente. Aun así, debéis de considerarlos meramente orientativos. Los tracks no marcan siempre el itinerario exacto, por tanto, pueden contener errores, esto es debido a que durante la grabación por GPS la recepción de los satélites puede ser débil especialmente en zonas de barrancos, desfiladeros profundos, zonas de bosque espeso, etc. Queda a la responsabilidad de quien las realice, las medidas de seguridad apropiadas para cada dificultad, que dependerán de las CONDICIONES climatológicas, así como la preparación tanto técnica como física del que las realice.
Siempre recomiendo ir acompañado al monte, dejando aviso a un conocido o familiar de nuestro itinerario y tiempos previstos, llevar el teléfono con carga suficiente, agua, comida y abrigo adecuado a la época y recorrido a realizar.
Deja todo como estaba o mejor para que todos podamos seguir disfrutándolo y que las únicas huellas de tu paso sean las de tus botas.