Camino de Santiago Portugués - Etapa 2 - O Porriño-Redondela

Camino de Santiago Portugués - Etapa 2: O Porriño - Redondela.

Partimos desde la iglesia de Santa María, pasamos por delante del Ayuntamiento, un edificio muy singular y seguimos de frente por la rúa Ramiranes hasta la rotonda, cruzamos de frente y entramos en la N-550.

Unos metros más adelante pasamos bajo la autovía y nos desviamos a la derecha por una pista asfaltada paralela a la nacional durante 1 km. Vemos a nuestra derecha la fuente Do Chan y casi enfrente, en una gran roca, hay una placa de homenaje a dos escaladores de Porriño que han coronado el Everest, además de otros “ochomiles”.

Seguimos de frente, al poco giramos a la izquierda y de nuevo salimos a la N-550, caminamos por el arcén unos 600 m. y pasado un aserradero, al llegar al rio, seguimos una senda paralela a la carretera hasta llegar a un cruce en que giramos un poco a la izquierda y tomamos una pista asfaltada junto a una pequeña ermita. Enfrente hay un crucero, una fuente dedicada a Santa Marta y un monolito en homenaje a la madre Teresa de Calcuta, donde se pide ayuda para los pobres, Después de unos metros volvemos a la nacional; unos minutos por el arcén y giro a la izquierda para tomar otra pista; cruzamos el río Louro y un poco más adelante giramos a la derecha.

En poco más de 1 km. llegamos a la iglesia de Santa Eulalia de Mos, enfrente de ella está el Pazo de Mos y un poco más arriba, a la izquierda del camino, vemos el Albergue, que a estas horas está cerrado. Pasamos junto a un par de bares y seguimos en ascenso hasta llegar al Cruceiro de los Cabaleiros, donde parece ser que era el punto de reunión de los caballeros de la comarca.

Llaneamos un poco pero enseguida la subida continua y cada vez más fuerte, aunque el camino se vuelve más agradable ya que entramos en una bonita zona de bosque, por fin sin asfalto. Tras 2 kms. de ascenso, llegamos al alto del monte de Santiago de Antas. En el cruce, en una pradera a la izquierda, está la Capilla de Santiaguiño.

Tomamos una senda de frente. Junto a ella hay varios monolitos de piedra. Unos metros más adelante vemos un miliario romano con una placa informativa. A partir de aquí comienza el descenso hacia Redondela.

La senda termina en una pista asfaltada que a su vez va a parar a la carretera, junto a una pastelería. Entramos en el barrio de Lourerio. Seguimos recto unos metros y más adelante se gira a la izquierda hasta la churrasquería Choles y una vez allí se gira a la derecha. Continuamos bajando prestando mucha atención a las señales, pues hay varios cruces, aunque bien señalizados.

Caminamos por una pista asfaltada durante 2 kms. en suave bajada en medio de un bosque, pero al llegar a la aldea de Padrón, el descenso es tan fuerte que hay que ir casi frenando. Pasamos de un barrio a otro sin ver principio ni final, pues las casas se suceden a ambos lados de esta pista que baja y baja. Ya en el valle, rodeados de campos de maíz y pequeños viñedos emparrados, el Camino es un agradable paseo que nos deja de nuevo en la carretera N-550.

Caminamos unos 600 m. por el arcén y entramos en Redondela, girando a la izquierda junto al convento de Vilavella. Avanzamos por la Rúa Pai Crespo. Pasamos bajo el viaducto de hierro y llegamos a la Praza da Torre. De frente está el Albergue, que es la Casa da Torre, una antigua mansión señorial rehabilitada con instalaciones bastante modernas. Es el final de nuestra etapa de hoy.

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¡¡ Buen Camino !!

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