Camino de Santiago Primitivo: 13ª etapa (última):A Salceda-Santiago de Compostela (w/ English version)

Camino de Santiago Primitivo: 13ª etapa (última):A Salceda-Santiago de Compostela (w/ English version)

Esta última es una etapa muy urbana, pero muy excitante por la ansiada llegada al destino soñado.

A los cinco kilómetros de partir de A Salceda, el camino atraviesa la carretera N-547 por un túnel para acceder a la fuente de Santa Irene, que en su momento tenía agua e, inmediatamente, a la ermita homónima, del
S. XVII. Más adelante, tras un nuevo cruce de la carretera, se pasa por una curiosa fuente barroca, también sin agua.
Poco después, se llega a Pedrouzo, lugar donde son muchos los peregrinos que pasan la última noche, al objeto de acortar la última etapa.
Tras atravesar un bosque de eucaliptos, el camino experimenta un giro de 90º con el fin de rodear el aeropuerto de Santiago, el más importante de Galicia.
En San Paio, se ubica la iglesia de Santa Lucía, del s. XIX. En Lavacolla, la de San Pelayo, también decimonónica, junto a un cruceiro. Su nombre se debe a que los peregrinos solían lavarse en el arroyo cercano a la población antes de entrar a Santiago. Junto a la catedral, también existía una fuente, la Fons Mirabilis, que se usaba para este propósito y que en la actualidad está colocada en el centro del claustro.
Tras pasar por las instalaciones de la televisión gallega y de RTVE, llegamos al monte do Gozo, llamado así porque era y sigue siendo el lugar desde el que los peregrinos oteamos por primera vez, en la lejanía, las torres de la catedral de Santiago. Ahí, puede contemplarse las estatuas de dos peregrinos en actitud de celebración. Fue erigida en 1993, con motivo de la peregrinación del papa Juan Pablo II en 1989, y representan al propio pontífice y a San Francisco, que también peregrinó a Santiago en 1213. Otra escultura cercana, de la misma época, también los muestra. En sus inmediaciones, se ubica la capilla de San Marcos. La original, ya desaparecida, era del s. XII. La actual es de 1965. El Monte contiene el mayor albergue de peregrinos de cuantos existen, con capacidad para 800 personas
Los últimos kilómetros transcurren en un suspiro, fruto de la excitación. La ciudad nos da la bienvenida con innumerables anuncios intentando convencernos de que la mejor manera de celebrar el reto logrado es con un tatuaje a modo de “último sello”. Es una práctica que se ha puesto de moda recientemente.
Entramos en el casco histórico por la praza Porta do Camiño, donde se encontraba la puerta de San Pedro, también conocida como Porta Francixena (por ser la del camino francés), hoy desaparecida. Nos encaminamos hacia la plaza de Cervantes y descendemos, hacia la derecha, camino de la catedral. Alcanzamos la misma por la plaza de la Inmaculada. Una larga cola nos indica que aquí se encuentra la puerta de la Azabachería, que es la que permite a los peregrinos acceder a la catedral para abrazar la estatua del apóstol que se halla en el altar mayor y visitar su sepulcro con, supuestamente, sus restos. Es un rito que dejaremos para mañana, a las 8:30, que es cuando la abren, pues la cola entonces suele ser mucho menor. Tener en cuenta que, en año compostelano, el acceso para estos ritos peregrinos se llevan a cabo desde la puerta Santa, por la plaza de Quintana, y permite a los fieles ganar el jubileo o indulgencia plena. El abrazo al apóstol quedó prohibido con el
COVID, pero se ha vuelto a restableces hace apenas unas semanas.
Junto al abrazo al apóstol y la visita del sepulcro, el tercer rito peregrino es asistir a la misa en la catedral, cuyo horario suele ser a las 7.30 h, 9.30 h, 12.00 h y 19.30 h. Con suerte, si se trata de una misa especial o algún grupo lo solicita (y lo paga), podrá asistirse al impresionante vuelo del botafumeiro.
Por último, pasamos por el arco del Pazo de Xelmírez y ya hemos llegado a nuestro destino, la espectacular plaza del Obradoiro. ¡Qué alegria! Embargados por la emoción, contemplamos la fachada barroca de la catedral y el constante trasiego de peregrinos.
Nos dirigimos, ahora, a que nos expidan la Compostela, el documento del cabildo que acredita la peregrinación. Esta se obtiene en la oficina de atención al peregrino, a apenas unos metros de la plaza del Obradoiro, en la rua das Carretas. El proceso es muy sencillo: en la entrada, se escanea un QR que da acceso a un formulario online y se rellena (también puede accederse directamente al formulario en este enlace: https://catedral.df-server.info/agencias/Individuo.aspx?lang=2&fbclid=IwAR0YVtm2PV2rsbuUVHVTCzYwsHIs7of_kZE8WpoW4ZtdSITEVWg7xXF8Chw_aem_AS1l9BQ0Z8kna2EyCxJSpa4vqJcQaBbeMCguvjn7kGmAv18BXwre2-BI-Gu6_yR6foA). Una vez cumplimentado, el sistema genera un código de barras. Con el mismo, ya podemos entrar en el edificio de acogida. Ahí nos darán un número de espera. Cuando en la pantalla anuncien nuestro número, nos indicará el mostrador al que dirigimos. En el mostrador, un voluntario nos pedirá la credencial para comprobar los sellos y estampar el último de ellos, el correspondiente a la catedral. Tras esto, expondremos el código de barras obtenido para que lo lea un escáner y, de manera automática, se generará el documento de la Compostela, que es gratuito. Si queremos el documento de la distancia, que contiene el lugar de origen de la peregrinación y los kilómetros recorridos, tendremos que indicarlo así en el formulario o en el mostrador y tendrá un coste de 3 €. Cuando lo hicimos, no había mucha cola y el proceso no tardó más de cinco minutos.
Hasta hace algunos años, era posible acceder a la catedral por su fachada principal, subiendo las escaleras que daban acceso al pórtico de la Gloria. Era costumbre que el peregrino, tras quedarse boquiabierto al contemplar el Pórtico de 1188, posiblemente el mejor pórtico románico del mundo, tocara el parteluz y chocara su cabeza con la cabeza de la estatua del maestro Mateo, su autor. Hoy día, nada de eso es posible. Para poder acceder al Pórtico de la Gloria, es necesario concertar previamente la visita y pagar por ello. Hay un cupo máximo de visitantes y, en temporada alta, suele agotarse. Así que la reserva con antelación es aconsejable. Ni que decir tiene que durante la visita, que se realiza bajo la atentísima mirada de un guardia de seguridad, está terminantemente prohibido tocar nada. A pesar de todo ello, la visita al Pórtico de la Gloria es algo imprescindible para cualquiera que vaya a Santiago, y si la visita es guiada, mejor que mejor.
Otra cosa que ha cambiado es el acceso al original del Códice Calixtino, la primera guía del Camino de Santiago, elaborada en el s. XII. Tras el robo del mismo por el electricista de la catedral en 2011 y su posterior recuperación, ya no es posible contemplarlo.

Nuestro periplo no termina aquí. Mañana tenemos pensado continuar peregrinaje hasta la costa, para llegar primero a Finisterre y, después, hasta Muxia. Pero esa es otra historia.

Track de la 12ª etapa “Melide-A Salceda”: https://www.wikiloc.com/hiking-trails/camino-de-santiago-primitivo-12a-etapa-melide-a-salceda-w-english-version-144104732

Track de la 1ª etapa “Finisterre-Muxía”: https://www.wikiloc.com/hiking-trails/negreira-144359631

Resumen del Camino Primitivo “Oviedo-Santiago de Compostela”:
- Número de etapas: 13.
- Kilómetros oficiales: 319 km.
- Kilómetros recorridos: 331 km.
- Media por etapa: 25,4 km.
- Desnivel positivo: 7700 m (aprox.). Media por etapa: 592 D+.