Camino de Santiago - Villar de Mazarife a Astorga

Etapa larga pero divertida. Salimos con frontales de Villar: más de 5 kilómetros de carretera. En Villavante entramos al pueblo (hay fuentes antes y dentro del mismo) pero se puede evitar y atajar si no se deja el camino (a costa de cruzar las vías). Antes de Puente de Órbigo, tenemos otro pequeño tramo de carretera con un cruce algo peligroso. El puente romano sobre el río Órbigo, llamado “del Passo Honroso”, se alarga sobre una extensa pradera. Su nombre se debe a las justas del caballero Don Sueño de Quiñones que a finales del siglo XV se comprometió a romper unas cuantas lanzas de los caballeros que cruzaran el puente, para conseguir merecer a doña Leonor, que finalmente fue su esposa. Hoy en día se celebra dicha historia con simulaciones de justas entre caballeros. Cruzamos Hospital y pronto llegamos a Villares. El ayuntamiento ha puesto unas señales del camino que atajan y llevan a un área de descanso con fuente. A partir de aquí empezamos la subida a los páramos, con descensos intercalados, el primero de los cuales nos deja en Santibañez de Valdeiglesias. Antes de llegar vemos un bar curioso (bodega enterrada) y en el pueblo tomamos un pincho en el albergue parroquial (¡bastante caro!). Los paisajes de los páramos merecen el repecho: pinos, encinas y carrascas, campos de cereal y vides adornan los horizontes. Llegamos al crucero de Santo Toribio con unas vistas amplias de Astorga y desde allí nos precipitamos hasta San Justo de la Vega. Comemos en un bar al pie del camino y tomamos fuerzas para llegar a la catedral. La entrada en Astorga es empinada y entretenida. Entramos en la catedral, con coste reducido para peregrinos. Espectacular combinación de estilos. Recomiendo la visita virtual de 360 grados, disponible dentro e incluida en el precio: las perspectivas son increíbles, incluso llegan a dar vértigo. ¡Buen camino! ¡Ultreia!