Camino del Estrecho. 3ª etapa: El Lentiscal - Tahivilla

Desde El Lentiscal tenemos dos opciones:
Opción A (2,3 kms. por asfalto)
Desde el Bar Bellavista tomaremos la carretera que sube a la entrada de las ruinas, la cual, a 500 mtrs. quedará a nuestra izquierda (lunes cerrado). Proseguiremos la carretera, y a 1,54 kms. - desde la entrada a las ruinas – nos uniremos a la Opción B
Opción B (1,6 kms. por playa y camino)
Partiendo del Hotel/Restaurante Bellavista buscaremos rodear las ruinas de Bælo Claudia: Tras una zona de aparcamiento, iremos por una pasarela de madera que de allí parte; a continuación un pequeño tramo por arena de playa (¡con lo complicado que es andar por la arena seca…!). Llegaremos a otra pasarela de madera, la cual no abordaremos, sino que iremos por un “camino” arenoso entre la alambrada de las ruinas arqueológicas y dicha pasarela. Nos vamos alejando de la playa; a nuestra derecha habrá siempre la doble alambrada que nos separa de las ruinas, y que no perderemos de vista
El piso va pasando de arenoso a térreo, y su delimitación se hace cada vez algo más definida
Tras algo más de 500 mtrs de haber abandonado la playa nos encontraremos una puerta que nos dará lugar inmediatamente a otra puerta (tras franquearlas, dejaremos ambas cerradas), y a través de esta llegaremos a una carretera local que proviene de El Lentiscal (en este punto es donde nos unimos a la opción A)
Nos encontramos en las estribaciones de la Sierra de la Plata: 300 mtrs. más adelante, nuestra carretera gira a la derecha, ofreciéndonos una bella vista de la ensenada de Bolonia durante un rato, continuamos por ella, y a los 250 mtrs. se bifurca, pero iremos por la pista principal que es la de la derecha.
A partir de este punto – y durante 3,13 kms. - nuestra camino irá “serpenteando” durante un buen rato, pero siempre con la bella estampa de la ensenada a nuestra derecha. Justo a esta altura vemos que el asfalto (más o menos degradado) se desvía a nuestra izquierda para ir a las antenas que se observan en lo alto de la sierra; por ahí no, sino que continuaremos de frente por el camino de tierra.
A los 220 metros nos saldrá a la izquierda la entrada a unas casas, y a otros 470 mtrs. pasaremos junto a una gran roca ocre de donde parte un camino (sin desbrozar) a la izquierda que también ignoraremos.
Nuestro camino va a transcurrir ahora bajo una imponente mole rocosa, donde si nos paramos (hay una casetilla de madera a nuestra derecha como posible observatorio) podremos ver las Buitreras y sus correspondientes buitres revolotear por la zona.
Seguiremos de nuevo de frente por el camino principal, pasaremos una valla abierta y más adelante - a unos 1,25 kms. desde la roca ocre – nos encontraremos con un trozo (escasos cinco metros) del camino asfaltado: En ese momento debemos abandonar el camino principal, desviándonos a la izquierda para aproximarnos a una cerca de piedra como de 1 mtr. de altura (desde aquí ya se ve Tahivilla, Benalup-Casas Viejas y Medina-Sidonia), para encontrar – a unos 20 metros – una entrada que franquearemos hacia el otro lado.
Al principio será una suave pendiente, que se bifurcará en un par de ocasiones, pero que siempre iremos buscando la dirección descendente y hacia Tahivilla.
Poco a poco el camino – siempre descendente – se hará cada vez más degradado (llegando a ser impracticable) y nos obligará a ir por fuera de él, pero siempre sin perderlo de vista. Si es tiempo húmedo será un auténtico barrizal.
A medida que vayamos descendiendo, y abandonando a nuestra espalda la Sierra de la Plata, iremos recuperando el camino físico: Nos orientaremos por un viejo (… y extenso) cortijo que aparecerá ante nosotros: Se trata del Cortijo «El Acebuchal», caracterizado por un bajorrelieve en la entrada de su edificio). Hacia él dirigiremos nuestros pasos.
Ya junto al Cortijo, habremos de abrir una valla (hay un solitario árbol a su izquierda) para pasar: En este momento el cortijo queda a nuestra derecha y una muy amplia cañada (de unos 60 mtrs de ancho) sale a nuestra izquierda. Es por esta cañada por donde deberemos ir, buscando los modernos molinos eólicos. Poco a poco su anchura irá disminuyendo a medida que avanzamos por ella…
A los 850 mtrs. veremos que una cancela (que se puede abrir) queda a nuestra derecha y da paso al primer grupo de molinos… Podríamos ir por aquí, pero creemos que es mejor continuar por la cañada 500 mtrs. más, en que otra entrada a nuestra derecha - que accede hasta otro grupo de molinos - nos va a llevar por caminos más rectos, ya sin pérdida. Accedemos por esta. La senda está desdibujada pero sabemos que al llegar a las inmediaciones del primer molino, desde allí, iremos por un amplio camino, perfectamente definido.
Pasaremos por hasta tres grupos de molinos (en algunos momentos divisaremos Tahivilla), hasta salir del Parque Eólico. Cerca de 1 kms. más tarde, nuestra ruta hace un “quiebro” a la derecha, de donde parte una “descarada” recta de 2,8 kms. que nos conduce a Tahivilla. Cualquiera de las calles que salen a nuestra izquierda tras pasar el cementerio nos llevará a su casco urbano.