Camino del Norte - etapa 33, O Pedrouzo - Santiago de Compostela

Etapa 10/33...día 24 de Agosto.
La etapa de hoy a excepción del tramo inicial, transcurre por una intensa presión urbanística, la proximidad del aeropuerto nos cambia totalmente la perspectiva del camino. El aeropuerto ha obligado a este cambio. Lavacolla ha dejado de tener el sentido que tuvo para los peregrinos medievales, lugar donde se lavaban en el río Sionlla para entrar adecentados en la ciudad de Santiago después de pasar meses o años en peregrinación. Pero siempre nos recordará la ilusión que tuvieron para llegar hasta la tumba del Apóstol.
Último día del camino…un extraño sentimiento invade nuestro cuerpo, tenemos una sensación de alegría y de tristeza a la vez. De alegría por haber hecho realidad el sueño de todo peregrino, llegar a Santiago después de un largo recorrido y tristeza porque esto se ha acabado. Ahora nos damos cuenta que lo importante del camino no es el final… la verdadera esencia de este camino se encuentra en lo que éste te va ofreciendo a cada paso, dejando atrás tantos recuerdos que serán difíciles de olvidar….
Pero aún nos quedan 20 km que patear, así que salimos de la Pensión Maribel y nos dirigimos hasta el restaurante Galaicos, (donde cenamos anoche), para tomar el primer café y algo de bollería. Retrocedemos por la N-547 (Avenida de Lugo), hasta la Casa do Concello, donde pasamos frente la estatua del Gallo Piñeiro una escultura de bronce policromado obra de Cándido Pazos, símbolo del Concello de O Pino, remontamos la calle Rúa Concello hasta llegar al polideportivo y campo de futbol. El Camino gira en este punto a la izquierda y seguimos por una pista forestal entre eucaliptos, que de manera rápida nos lleva hasta la pequeña aldea de San Antón, situada en la vaguada formada por el río Brandelos. Avanzamos por un bonito robledal, sobre una pista que va combinando asfalto y tierra hasta llegar a O Amenal.
A partir de aquí empieza el repecho más duro de la jornada, arropados por las sombras que dan las copas de los robles y eucaliptos, el camino nos conduce hasta Cimadevila, con pendiente constante y pronunciada en un primer momento y más suave a continuación. El desnivel, que continúa por una pista forestal, se prolonga a lo largo de 2 kilómetros, hasta alcanzar el punto más alto, situado a 360 metros. Alcanzada la cota nos dirigimos al pie de la autovía A-54, junto al aeropuerto de Lavacolla. La valla de separación con el aeropuerto está repleta de pequeñas cruces, forma parte de la idiosincrasia de la peregrinación. Un monolito esculpido con el bordón, la calabaza y la vieira anuncia la entrada en el municipio de Santiago. Rodeamos el perímetro del aeropuerto, dejando a mano izquierda varias hileras de balizas y, después de cruzar una carretera secundaria, entramos en San Paio, pasando delante de su iglesia de San Paio. Afrontamos un breve repecho por pista asfaltada y tomamos la pista de la derecha, que desciende. Tras salvar la Autovía A-54 por un paso inferior, seguimos descendiendo pasando por A Esquipa, núcleo pegado a Lavacolla que entramos a continuación. Nos aproximamos a la iglesia de San Pelayo de Sabugueira, levantada en 1840. El camino bordea el templo y su cementerio adjunto y llega a un cruce con la carretera N-634…nosotros, a la altura de la iglesia, bajamos por unas escaleras en cuyo final se encuentra el cruceiro de Lavacolla y en la plaza un palco de música.
Hoy, sin duda es un día especial, así que en Lavacolla, hemos quedado todo el grupo para dirigirnos, por la N-634 (fuera del trazado del Camino) hasta el núcleo de Sabugueira (850 m.) para darnos un pequeño homenaje con un gran desayuno en el restaurante Sabugueira. Hecho el refrigerio volvemos al punto donde se inicia el camino hacia Vilamaior. En apenas cien metros cruzamos el río Sionlla, cubierto de ovas y conocido como arroyo de Lavacolla, lugar donde los peregrinos se despojaban de sus sucias vestimentas y se lavaban en vistas de su próxima llegada a Santiago….como ya he comentado en la introducción.
Nada más cruzar el río arranca un repecho de cierta dureza por asfalto, que se prolonga durante más de medio kilómetro hasta llegar a Vilamaior, desde donde se suaviza. Poco después alcanzamos, a través de un sendero, Neiro, donde se sitúan la sede de la TVG (Televisión de Galicia), que dejamos a mano derecha, y unos metros después, giramos a la izquierda, justo donde está situado el cámping de San Marcos, con un mercadillo de artículos referentes a la ruta jacobea en su interior. Tras girar a la derecha, bordeando el centro emisor de TVE, seguimos la estrecha y recta carretera que en su parte final lo hacemos en subida para entrar en San Marcos. Siguiendo las indicaciones del camino, giramos a la izquierda por una calle que también lleva al campo de fútbol San Marcos y que va ascendiendo progresivamente hasta llegar a la ermita de San Marcos donde giramos a la izquierda y nos encaminamos hacia uno de los grandes iconos del Camino, el Monte do Gozo (o colina de San Marcos). Se trata de un montículo de tan solo 380 m. situado apenas a 5 km de la meta en Santiago de Compostela. Aquí los peregrinos que vienen haciendo el Camino del Norte, el francés y el Primitivo, divisan por primera vez la ciudad de Santiago y las torres de su Catedral… (de ahí el topónimo con el que se conoce a este lugar, por la alegría sentida al verlas). En la cumbre se sitúa un monumento de cerámica, acero y piedra, (no exento de polémica en sus primeros tiempos). Realizado entre 1992-1993 por la artista brasileña Yolanda d’Absburg, en alusión al Año Santo Compostelano de 1993 y al Papa Juan Pablo II.
Volvemos de nuevo a la ermita de San Marcos y seguimos camino, pasando al lado del grandioso complejo recreativo y de acogida a los peregrinos, Monte Do Gozo, capaz de albergar en Año Compostelano hasta 800 peregrinos. Bajamos un tramo de escaleras y acto seguido salvamos por el Puente de San Lázaro la autovía y las vías de acceso a la ciudad, seguimos por la rúa San Lázaro, rúa do Valiño, rúa das Fontiñas y rúa dos Concheiros, donde cruzamos la avenida de Lugo. Después la rúa de San Pedro, hasta la rúa Das Rodas donde se encuentra la Porta do Camiño. Entramos en el casco histórico por la rúa das Casas Reais, que sube hasta la plaza de Cervantes. Luego seguimos por la rúa do Preguntoiro, rúa de Xelmídez, Plaza Das Platerías y por fin Plaza del Obradoiro donde finaliza nuestra aventura. Es difícil no emocionarse…llegar a Santiago de Compostela como peregrino es una experiencia inigualable. La Catedral como siempre, de restauración y este año, incluso el interior estaba toda desmantelada, (tendremos que volver otro año para abrazar al santo). Una vez aplacadas nuestras emociones, nos encaminamos hacia la rúa das Carretas donde se encuentra la oficina del peregrino para recoger la Compostela y el certificado de distancia. En la misma rúa se encuentra el restaurante Carretas, donde más tarde celebraremos el final del camino con una buena mariscada…como manda la tradición!!
...y para los que lean estos resúmenes y se animen a realizar esta ruta, solo me queda desearles un BUEN CAMINO!!

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Etapa 10/33 ... dia 24 d'agost.
L'etapa d'avui a excepció del tram inicial, transcorre per una intensa pressió urbanística, la proximitat de l'aeroport ens canvia totalment la perspectiva de camí. L'aeroport ha obligat a aquest canvi. Lavacolla ha deixat de ser el sentit que va tenir per als pelegrins medievals, lloc on es rentaven al riu Sionlla per entrar polits a la ciutat de Santiago després de passar mesos o anys en peregrinació. Però sempre ens recordarà la il·lusió que van experimentar al arribar fins la tomba de l'Apòstol.
Últim dia del camí ... un estrany sentiment envaeix el nostre cos, experimentant una sensació d'alegria i malenconia alhora. D'alegria per haver fet realitat el somni de tot pelegrí, arribar a Santiago després d'un llarg recorregut i tristesa perquè això s'ha acabat. Ara ens adonem que l'important del camí no és el final ... la veritable essència d'aquest Camino es troba en el que el Camino et va oferint a cada pas que dónes, deixant enrere tants records que seran difícils d'oblidar.
Però encara ens queden 20 km per recorre, així que sortim de la Pensió Maribel i ens dirigim fins al restaurant Galaicos, (on vam sopar ahir), per prendre el primer cafè i brioixeria. Retrocedim per la N-547 (Avinguda de Lugo), fins a la Casa do Concello, on passem davant l'estàtua del Gallo Piñeiro una escultura de bronze policromat obra de Cándido Pazos, símbol del Concello de O Pino, remuntem el carrer Rúa Concello fins a arribar a el poliesportiu i camp de futbol. El Camí gira en aquest punt a l'esquerra i seguim per una pista forestal entre eucaliptus, que de manera ràpida ens porta fins al petit llogarret de Sant Antón, situada en el tàlveg formada pel riu Brandelos. Avancem per una bonica roureda, sobre una pista que va combinant asfalt i terra fins a arribar a O Amenal.
A partir d'aquí comença la pujada més important de la jornada, acompanyats per les ombres que donen les copes dels roures i eucaliptus, el camí ens condueix fins Cimadevila, amb pendent constant i pronunciada en un primer moment i més suau a continuació. El desnivell, que continua per una pista forestal, es perllonga al llarg de 2 quilòmetres, fins a arribar al punt més alt, situat a 360 metres. Aconseguida la cota ens dirigim al peu de l'autovia A-54, al costat de l'aeroport de Lavacolla. La tanca de separació amb l'aeroport està plena de petites creus. Formant part de la idiosincràsia del pelegrinatge. Un monòlit esculpit amb el bordó, la carabassa i la petxina de pelegrí anuncia l'entrada al municipi de Santiago. Voregem el perímetre de l'aeroport, deixant a mà esquerra diverses fileres de balises i, després de creuar una carretera secundària, entrem a San Paio, passant davant de la església de Sant Paio. Afrontem una breu pujada per pista asfaltada i prenem la pista de la dreta, que baixa. Després de salvar l'Autovia A-54 per un pas inferior, seguim descendint passant per A Esquipa, llogarret enganxat a Lavacolla que entrem a continuació. Ens aproximem a l'església de San Pelayo de Sabugueira, aixecada al 1840. El camí voreja el temple i el seu cementiri adjunt i arriba a una cruïlla amb la carretera N-634 ... nosaltres, a l'alçada de l'església, baixem per unes escales on al final es troba el cruceiro de Lavacolla i a la plaça una llotja de música.
Avui, sens dubte és un dia especial, així que a Lavacolla, hem quedat tot el grup per dirigir-nos, per la N-634 (fora del traçat del Camino) fins al nucli de Sabugueira (850 m.) Per donar-nos un petit homenatge amb un gran esmorzar al restaurant Sabugueira. Fet el refrigeri tornem al punt on s'inicia el Camino cap a Vilamaior. A cent metres creuem el riu Sionlla, cobert de freses de peixos i conegut com riera de Lavacolla, lloc on els pelegrins es despullaven de les seves brutes vestimentes i es rentaven en vistes de la seva pròxima arribada a Santiago...com ja he comentat en la introducció.
Tot just creuar el riu arrenca una pujada de certa duresa per asfalt, que es perllonga durant més de mig quilòmetre fins a arribar a Vilamaior, des d'on es suavitza. Poc després arribem, a través d'un sender a Neiro, on està instal·lada la seu de la TVG (Televisió de Galícia) que deixem a mà dreta, i uns metres després girem a l'esquerra, just on està situat el càmping de San Marcos, amb un mercat d'articles referents a la ruta jacobea al seu interior. Després de girar a la dreta, voregem també el centre emissor de TVE, seguint aquesta estreta i recta carretera que en la part final ho fem en pujada per entrar a San Marcos. Seguint les indicacions de camí, girem a l'esquerra per un carrer que també ens porta al camp de futbol San Marcos i que va ascendint progressivament fins arribar a l'ermita de San Marcos on girem a l'esquerra encaminar-nos cap un dels grans icones del Camino, el Monte do Gozo (o colina de San Marcos). Es tracta d'un turó de tan sols 380 m. situat tot just a 5 km de la meta a Santiago de Compostel·la. Aquí els pelegrins que vénen fent el Camino del Norte, el Francés i el Primitivo, albiren per primera vegada la ciutat de Santiago i les torres de la seva Catedral... (d'aquí el topònim amb què es coneix a aquest lloc, per l'alegria sentida al veure-les). En el cim es situa un monument de ceràmica, acer i pedra, (no exempt de polèmica en els seus primers temps). Realitzat entre 1992-1993 per l'artista brasilera Yolanda d'Absburg, en al·lusió a l'Any Sant Compostel·là de 1993 i al Papa Joan Pau II.
Tornem de nou a l'ermita de San Marcos i seguim camí, passant al costat del grandiós complex recreatiu i d'acollida als pelegrins Monte Do Gozo, capaç d'albergar l’Any Compostel·là fins a 800 pelegrins. Vam baixar un tram d'escales i acte seguit vam salvar pel Puente de San Lázaro l'autovia i les vies d'accés a la ciutat, vam seguir per la rúa San Lázaro, rúa do Valiño, rúa das Fontiñas i rúa do Concheiros, on creuem l'avinguda de Lugo. Després la rúa de San Pedro, fins la rúa Das Rodes on es troba la Porta do Camiño. Entrem al casc històric per la rúa das Casas Reais, que puja fins a la plaça de Cervantes. Després seguim per la rúa do Preguntoiro, rúa de Xelmídez, Plaça Das Platerias i per fi Plaza del Obradoiro on finalitza la nostra aventura. És difícil no emocionar-se... arribar a Santiago de Compostel·la com a pelegrí és una experiència inigualable. La Catedral, com sempre, de restauració i aquest any, fins i tot l'interior estava tota desmantellada, (haurem de tornar un altre any per abraçar al sant). Un cop assossegades les nostres emocions, ens encaminem cap a la rúa das Carretas on es troba l’oficina del pelegrino per recollir la Compostela i el certificat de distància. En la mateixa rua es troba el restaurant Carretas, on més tard celebrarem el final del Camino amb una bona mariscada... com mana la tradició !!
... i per als que llegeixin aquests resums i s'animin a realitzar aquesta ruta, només em queda desitjar-vos un BUEN CAMINO !!