Camino portugués a Santiago de Compostela. Etapa 1: Puente internacional de Tui ~ Redondela

Se conoce como Camino Portugués, o más concretamente Camino Portugués Central (para una mejor distinción de los demás) al camino jacobeo que une Lisboa con Santiago de Compostela. En la actualidad es el segundo camino en número de peregrinos, sólo superado por el Camino Francés. Según la información que encontré, hoy en día sus dos principales puntos de partida son Porto y Tui, esta última localidad en la frontera hispano-lusa.
Nuestra etapa comienza en el Puente Internacional sobre el río Miño, inaugurado en marzo de 1886 e influido por los diseños de Gustave Eiffel. Desde aquí y siguiendo las flechas nos dirigimos hacia el centro de Tui.
Pasamos por el Parador de Turismo de San Telmo, vamos por el camino de la Barca que nos brinda una panorámica extramuros del núcleo histórico y de la catedral en lo más alto.
Después del edificio conocido popularmente como Cárcel Vieja, con un portalón del 1584, llegamos hasta la catedral de Santa María, templo – fortaleza, a caballo entre el románico y el primer gótico de la Península Ibérica y consagrada en 1225.
El circuito urbano de Tui merece ser recorrido con detenimiento ya que hay numerosos lugares y edificios históricos, es realmente hermoso.
Pasamos delante de la iglesia de Santo Domingo y avanzamos hasta llegar a la parte de atrás de la iglesia de San Bartolomeu de Rebordans (su origen es del siglo XI, siendo uno de los templos más antiguos de Galicia), aquí tomamos un camino de tierra.
Nos encontramos con el Puente medieval sobre el río Louro y monumento al peregrino. No cruzamos el puente y continuamos en la misma dirección por un tramo boscoso. Más adelante tomamos a la derecha una carretera local y, poco después, pasamos bajo el puente de la vía del tren.
Llegamos a la carretera nacional N-550, en A Picoña. La cruzamos y a 70 metros tomamos una calle a mano derecha. Poco después, siguiendo la carretera PO-342, salvamos por un paso elevado la autopista A-55; caminamos aprovechando el carril rojo para peatones y ciclista; luego cruzamos por un paso inferior la autopista AP-9.
Un poco más adelante torcemos por un camino a mano derecha, abandonando la carretera. De inmediato volvemos a cruzar, ahora por un paso elevado, la AP-9, avanzando luego por un bonito tramo boscoso. Vadeamos el río San Simón por el puente de San Telmo o das Febres (con pasarela de madera). Recibe este nombre porque en este lugar enfermó de muerte San Telmo en la primavera de 1251. Pedro González Telmo, que así se llamaba, es el patrón de los marineros. Por este agradable escenario sombrío, abrigado por la vegetación de ribera del río Louro, llegamos hasta A Magdalena, de la bonita parroquia tudense de Santa Comba de Ribadelouro.
Cruzamos la carretera y en unos metros doblamos por una calle a mano derecha, tomando poco después un camino de tierra. Salvamos el río Louro a través del puente medieval de Orbenlle, de un solo arco.
En las inmediaciones de Orbenlle parte el itinerario alternativo, que evita el paso por el polígono industrial. Es una entrada a mano izquierda, junto al cartel. Esta variante desciende ligeramente entre tupida vegetación hasta el vado de A Ponte Baranco, sobre el Louro y cruza posteriormente un paso de invierno. Desde este punto, un camino de tierra entre viñedos y arbolado alcanza una pista asfaltada, que se interna por la parroquia de San Xurxo de Mosende, visitando los lugares de Monte, Vides y Cruceiro. Otro posterior paso de invierno, conocido por los vecinos como ‘paso de Botate’, desemboca en un camino de tierra. Después, por una pista local accedemos a la parroquia de Santiago de Pontellas junto a las casas de Centeáns. Una carretera local, con carril peatonal y para ciclistas, conduce desde este punto al sendero que sigue la estela del río Louro.
Recomendación: no crucen el río aunque vean el mojón que indica hacia la carretera. Según pudimos saber después, siguiendo el río siempre con el cauce a la derecha, se alcanza el mismo albergue de peregrinos de O Porriño. Nosotros nos guiamos por el mojón y nos cansamos de carretera, un tremendo fallo.
Llegamos al centro de O Porriño pasamos por la ermita de San Sebastián y más adelante junto a la capilla de San Benito y la iglesia de Santa María; por la rúa Ramón González llegamos al Ayuntamiento, obra del arquitecto porriñés Antonio Palacios iniciada en 1921.
Una glorieta o rotonda en la N-550, separa el Concello de O Porriño con el de Mos.
Pasamos la fonte do Chan y junto a una placa homenaje a los hermanos Novás, reconocidos alpinistas gallegos que han coronado un buen número de ochomiles. Después giramos para reencontrarnos con la N-550, en este punto debemos cruzar la carretera nacional y continuar de frente junto a unas naves por el camiño da Quiringosta en dirección Piñeiro, donde pasaremos bajo las vías del tren.
Avanzamos por una carretera local que salva un río y nos plantamos un poco más adelante ante un cruce que seguimos por la derecha y llegamos hasta Veigadaña.
Más adelante nos encontramos la iglesia de Santa Eulalia y al pazo de los Marqueses, siglo XVII, en Mos. Unos metros más arriba hay un albergue y dos bar-restaurantes, uno de los cuales pertenece al albergue.
Subimos la calle enlosada y poco después proseguimos por asfalto, ganando altitud. Por carretera local pasamos los núcleos dispersos de Os Cabaleiros y A Pereira, donde una pista de tierra entre robles, pinos y eucaliptos nos reconforta de tanto asfalto pero al que volvemos en breve en el lugar de Inxertado.
Llegamos a la capilla de Santiaguiño de Antas, reformada en 2003 y situada en el punto más elevado de la jornada. Al cruzar la carretera nos adentramos en el Concello de Redondela y a 100 metros nos tropezamos con el miliario de Vilar-Guizán-Louredo, indicador de distancia romano de la vía XIX que unía Braga con Astorga.
En seguida entramos en Vilar de Infesta, formada como todas las parroquias gallegas por un buen número de lugares diseminados que nos desorientan, ya que cuesta saber con certeza dónde empieza o termina tal o cual lugar. La parroquia se atraviesa en ligera bajada por la carretera central y hay que prestar atención para coger un desvío a la izquierda que pasa junto a la churrasquería Choles.
Frente al restaurante, el itinerario dobla a la derecha por una pista de tierra que conduce a otra asfaltada. Entre pinos retomamos una senda para acceder a la parroquia de Saxamonde. Primero el barrio de Casal do Monte y algo más abajo el barrio de Padrón, que cuenta con el albergue O Corisco. En un tramo de dura bajada seguimos hacia O Souto y llegamos a la N-550 en O Muro.
Siguiendo la carretera nacional entramos en Redondela. Nos encontramos de inmediato con el primer edificio relevante: el convento de Vilavella, residencia de monjas en el siglo XVI y lugar de celebración de eventos en la actualidad. Tras el convento pasamos bajo el viaducto Pedro Florani, inaugurado en 1876 y catalogado Bien de Interés Cultural. El albergue de peregrinos fue habilitado en la Casa da Torre, una residencia señorial renacentista del siglo XVI.
Nuestra etapa finaliza en las proximidades del Concello de Redondela.
A pesar de la cantidad de kms, (creo que mi Wikiloc contó algo más), la ruta se puede considerar fácil, ya que no existen más dificultades que la distancia y el tramo de fuerte bajada. Los lugares que recorre son muy interesantes y dignos de visitar, pero la cantidad de asfalto (calculo que más de un 90%, muchísimo para quienes no nos gusta), hacen que la etapa sea algo pesada y pierda encanto.

Información:
Guías Gronze y Consumer.