Camino portugués a Santiago de Compostela. Etapa 4: A Esclavitude ~ Santiago de Compostela

LLegamos a nuestra última etapa del Camino Portugués y vamos a comenzarla junto al Santuario da Escravitude, lugar donde dejamos la anterior. Es un tramo fácil, donde la presencia de asfalto (menos del esperado) nos hace recordar que estamos muy próximas a la Ciudad de Compostela.
Comenzamos siguiendo una rúa que sale a un lado del Santuario y que nos llevará hasta la iglesia de origen románico de Santa María de Cruces. Por un tramo con varios cambios de dirección, entramos en Angueira de Suso. Un interminable emparrado nos cobija camino del núcleo de Areal y éste nos conduce hasta A Picaraña y nuestra inseparable N-550.
Vamos a la derecha, marchando por el arcén durante más de 800 metros hasta dejarla por el lado izquierdo para entrar en Faramello, dividido por los concellos de Rois y Teo.
Unos cientos de metros más adelante el itinerario se desvía a la izquierda. Unas rampas conducen hasta Rúa de Francos. Pasamos la ermita de San Martiño e inmediatamente junto a un tosco crucero, catalogado entre los más antiguos de Galicia.
Después del bar-restaurante Carboeiro bajamos para acometer una subida por pista asfaltada hasta Osebe, ya en la jurisdicción de la parroquia de San Juan de Calo, y cruzamos las vías para llegar hasta Casalonga a la altura de la carretera CP-0205. La seguimos por la derecha y luego giramos a la izquierda por el Camino de Riotinto para cruzar un arroyo y entrar en el núcleo de Pedreira.
A la salida progresamos por una cómoda pista envuelta por castiñeiros que va subiendo ligeramente y dejando a un lado los grupos de casas de Lamela y Areira. Tras cruzar una pista y pasar un aserradero se dirige hasta A Grela.
Desde aquí el itinerario sube por carretera y entra por la travesía do Porto en O Milladoiro, el mayor núcleo poblacional del Concello de Ames. Pasamos O Milladoiro por la rúa do Esquío y más adelante junto a una subestación eléctrica, prólogo del Agro dos Monteiros, que está situado a 262 metros de altura, la cota más alta del Camino Portugués en Galicia y que nos regala la primera vista de Santiago y de las torres de la catedral.
Bajamos por la pista asfaltada y varias sendas que van atajando hasta Rocha Vella, de la parroquia de Conxo, ya perteneciente al Concello de Santiago. Damos un pequeño rodeo para cruzar las vías del tren y nos dirigimos hasta Ponte Vella para cruzar el río Sar. Pasado éste seguimos a la derecha, cruzamos por un paso inferior la SC-20 y encontramos la variante que, por derecha, llega a Santiago por Conxo. Nosotras cruzamos por arriba la autovía de circunvalación y poco después desembocamos en la avenida da Choupana. La seguimos, cruzamos una rotonda y proseguimos por la avenida Rosalía de Castro hasta el mismo casco antiguo. Cruzamos por el parque de la Alameda donde se encuentra una de las esculturas con más pegada de la ciudad: las dos Marías, obra de César Lombera. Tras cruzar el paso peatonal del final del parque llegamos por fin a la Porta Faxeira, uno de los accesos al centro histórico de Santiago. El trazado del Camino Portugués hasta la catedral discurre ahora por la rúa do Franco que nos conduce a la mismísima plaza del Obradoiro, frente a la catedral de Santiago.
Esta vez, la sensación de felicidad por el objetivo conseguido se torna en desolación, al ver, salvo los pocos peregrinos que estábamos allí, una plaza prácticamente vacía...
Pero bueno, creo que casi todos los que hacemos el Camino terminamos con el deseo de volver pronto por algún otro. Y esta vez el deseo es que en la próxima ocasión, el bullicio de la gente y de la ciudad sea el de hace unos meses, sin mascarillas y con mucha más ilusión. ¡ULTREIA!

Información: Guías Eroski y Gronze.