Camino viejo Agramón

Además nos acompañaron Regino y Limón (cachorrete de pastor vasco de 3 meses al que ya le gusta mucho el monte).
La ruta comienza en la Nava de don Fernando a la que se accede desde la carretera Hellín-Agramón (hay varias formas de llegar). Transcurre por lo que queda del camino antiguo que unía Agramón con Hellín (lo que aún no ha sido roturado).
Desde el cortijo se asciende por un camino hasta un collado que tiene una caseta y una antena de telefonía bien visibles (a la izquierda está Cabeza Llana). Desde aquí hay unas magníficas vistas de Agramón, el pantano de Camarillas y la sierra de los Donceles.
A nuestros pies el paraje de la Escarihuela con un cortado que parece imposible descender, pero a mano derecha de la caseta podemos seguir, más o menos, las trazas del camino que va descendiendo hace el valle. Este paso es el que califica la ruta como de dificultad moderada, pues hay que prestar cierta atención al camino (una caída desde aquí sería horrible).
Una vez abajo buscamos un camino para terminar completamente el descenso (es el que seguimos en la subida, pues en la bajada no lo encontramos y bajamos campo a través) hasta dar con una pista forestal. No hay pérdida, sólo hay que ir bajando hacia Agramón.
Un desvío a la derecha señalizado nos lleva a la Ermita de Agramón, el Calvario, con un mirador encantador. Bajamos luego por el camino de las columnas que señalan las estaciones del Vía Crucis llegando hasta el propio Agramón.
La vuelta es más o menos por el mismo camino, aunque desde Agramón puede tomarse otro que no pasa junto a la ermita (es el camino que llevábamos antes de tomar el desvío a la derecha).