Campillo de Deleitosa-Garganta de Descuernacabras- Acueducto de las Herrerías- Campillo de Deleitosa

Iniciamos el recorrido desde la Iglesia de San Sebastián
Recorremos las calles para llegar a la plaza de Francisco Pizarro y seguir las señales que nos conducen al camino de Robledollano.
Caminamos entre huertos muy bien cuidados y nos desviamos para ascender por un camino muy empinado que en algunos tramos alcanza un desnivel del 38% hasta llegar al puerto de Deleitosa.
Nos detenemos para ver a lo lejos la sierra de las Villuercas.
Tomamos una pista forestal y descendemos pausadamente dejando a la izquierda el arroyo de la Gargantilla y a la derecha la sierra de la Juncadilla.
En los riscos se deja ver la cueva de Juan Caldilla, que en las fotografías que hicimos se distingue con mucha dificultad.
Una pequeña senda muy escondida y poco señalizada sale a la izquierda entre la vegetación para descender hacia la Garganta de Descuernacabras.
Al frente tenemos la sierra del Camorro del Alcarreón, con una exuberante vegetación.
Descendemos hasta el canal, donde nos detenemos para ver las ruinas de la Herrería del siglo XIV.
Seguimos ya por el interior del canal, construido con pizarras y cuarcitas. Servía para llevar los minerales extraídos de las minas hasta la herrería.
El camino se hace muy seguro entre las paredes del canal, sorteando algunas piedras que impiden el paso, por lo que veces salimos del cauce para sortearlos. Estas piedras se ponían antes de las curvas para frenar el empuje del agua.
Dejamos atrás la solana de la Gargantilla y el Cabronil. Por el margen derecho vemos numerosos arroyos que descienden para aumentar el cauce del arroyo Torneros.
Al margen derecho se aprecian las empinadas lomas de Valdetrochas y del Piecito.
Llegamos al acueducto de las Herrerías, muy bien conservado y de 80 metros de longitud, que hace una curva para salvar la gran altura de la vaguada y con unos preciosos arcos por el que discurre el canal.
En lo profundo del valle se ven las ruinas de la central eléctrica.
Continuamos el recorrido por el canal, que se ve a lo lejos como serpentea en las faldas de la montaña.
Pasamos por el arroyo de los Regajos donde hay una señalización para ir por un camino más corto a Campillo.
Nosotros continuamos por el canal que va tomando cada vez más anchura. Vemos como el arroyo Fresnedoso y más adelante el del Maillo aporta más agua al arroyo Tornero.
El cerro de las Minas destaca al otro lado de la garganta de Descuernacabras.
Llegamos al final del canal, donde hay unas enormes compuertas para controlar la evacuación del cauce.
Desde esta zona hay una estrecha y serpenteante senda, que a veces se pierde, y se cruza el arroyo de los Enriscaderos.
Seguimos y vemos en el margen derecho los restos de un molino y más adelante el puente Viejo.
No llegamos al mismo, ya que iniciamos una subida hasta alcanzar el camino que viene del puente y que nos conduce a Campillo.
Hacemos un fuerte ascenso hasta llegar a encinares y desde las lomas vemos los cerros de la Puente y a lo lejos la Sierra de las Villuercas.
Pasamos por una cancela y llegamos a la cuesta ya asfaltada que pasa al lado del cementerio para llegar a las casa de campillo de Deleitosa y finalizar la ruta donde la comenzamos.