Cañada de Juan Navarro- Cañada de la Charca y divisoria, los exploradores arrieros

En el día de hoy cambiamos totalmente de paisaje y nos dirigimos hacia la comarca del Temple para una vez en Agrón tomar camino de Fatimbullar, pasando por el cortijo de Don Juan y ya cerca de la Cañada de Juan Navarro dejar el coche y empezar a subir parte de esta cañada que antiguamente se nota que tenia algún carril que nos iba subiendo por la misma, hoy desaparecida en parte.
Lo más impresionante de esta zona de Granada es su extensión y tupido bosque de encinas que cambia totalmente el paisaje que llevábamos los días anteriores, subiendo por la cañada vemos a lo largo de la misma apiladas gran cantidad de piedras se nota que nuestros ancestros en todo estos parajes se dedicaban al cultivo de cereales y aprovechaban cualquier claro en la sierra para cultivar, el camino se pierde y podemos intuir algunas veredas que nos dejarán pronto en la divisoria desde donde contemplamos la siguiente cañada conocida como Cañada de la Charca, en la cañada divisamos una cerca correspondiente a la finca de Fatimbullar que luego a la vuelta traeremos para regresar al punto de partida.
En esta cañada vemos al frente un camino también de poco recorrido que luego desaparece y se convierte primero en vereda y luego igualmente se pierde contemplando bastantes piedras apiladas para abrir espacios para los cultivos, hoy todo desaparecido, poco a poco esperando la presencia de algún marrano que durante el día están escondidos no tenemos la suerte de contemplar ninguno, pero vemos los hoyos realizados con sus hocicos buscando tubérculos, cada día existen más jabalíes,
Esta subida formaba parte de la Vereda de los Leñadores por donde subían a la Sierra de la Mora entre otras cosas a cultivar y a por leña, pronto llegamos a lo más alto de la sierra y contemplamos delante de nosotros grandes extensiones de terreno abierto despejado de encinas que lo dedican para cultivo.
Dejamos ya estas vistas y nos dirigimos hacia la otra cañada que es la que sube junto a la alambrada de la finca de Fatimbullar que una vez en la misma la saltamos para poder bajar por el camino que ya casi abajo del carril pasamos de nuevo por la alambrada para dirigirnos hacia la Cañada de Juan Navarro donde tenemos el coche y donde damos por finalizada esta parte de la sierra que no conocíamos.