Cañada morales- cerro peguera- entredicho-Risca del Quijarron- Pr A-193

Recorrido: Cañada Morales- collado de las ramblillas-cerro peguera- majalón de peribañez-collado de cañada morales- piedra de los tres mojones- entredicho- Risca del Guijarron- salegas anchas- Hoya de los conejos-Área Recreativa los parrales- Pr a 193/Gr 247- cortijo de montillana- el chorreón- cañada morales.


Salimos desde Cañada morales, en el cruce del camino de San Juan de la cruz y del Pr que sube del tranco, dejando el coche en el hotel losam.
Este camino nos lleva a Guadabraz y lo recortaremos por unos cortijos, en una verea para llegar a un tornajo en un cruce habiendo seguido unas baliza del camino de San Juan que nos acompaña en una parte del recorrido, el camino sube a la izquierda pero nosotros seguimos hacia Guadabraz pasando por las ruinas del cortijo de la tejera y desviándonos después a la izquierda por una empinada cuesta que nos lleva a cruzar un olivar y este a la parte baja del poyo de cumbre que nos saca de nuevo al camino de San Juan de la Cruz.
Este tramo hasta llegar al collado de las ramblillas también tiene una inclinación considerable y te saca el aire del cuerpo, una vez en el collado nos aparecen varias indicaciones, las del Gr 144 que hemos subido acompañado del camino de San Juan o el de la caseta de la bandera en el cerro peguera, al que nos dirigimos ahora subiendo por pista.
Al llegar a la caseta las vistas claras nos hacen pararnos un buen rato y disfrutar del entorno, después volveremos a bajar por el camino pero al frente hay un sendero que seguimos aunque después desaparece y nos lleva al collado de cañada morales, donde cogemos la cuerda del majalón de peribañez asomándonos a ver ya el entredicho y la cuerda de los tres mojones.
Llegamos a otro collado donde se cruzan varios caminos y nos dirigimos a la baliza marcada con una x para subir a la cuerda de la piedra de los tres mojones, fácil e intuitiva para recorrerla hasta llegar al Vértice del entredicho que también nos ofrece unas buenas vistas.
Bajamos del vértice por el lado derecho campo a través y por la zona más abierta que vemos hasta llegar al Gr que lleva a subir a la Risca del Quijarron. Si el día esta bueno como es nuestro caso las vistas son una maravilla, La Sierra de las Lagunillas o Monteagudo, desde la caseta de vigilancia, a la que hemos llegado por un camino serpenteante que volveremos a bajara hasta el cruce que habíamos llegado en la bajada del entredicho, esta vez seguimos rectos, cruzando el arroyo del parral del abuela que algo de agua tiene y que llevara al Tranco.
Siguiendo el camino de bajada en una curva vemos un camino viejo a la derecha que baja paralelo al nuevo camino hasta que se desvía al tornajo de la tiná de las salegas anchas y la tiná después, antes nos acercamos a ver una vieja era cerca del tornajo, pasando la tiná unos metros más arriba recuperamos el camino o pista que habíamos dejado y que nos va bajando cerca del rastrillo de tranco y hoyos de herrera, allí hay una fuente que está llena de abejas, cerca hay panales.
Continuamos el camino pasando por la hoya de los conejos hasta llegar a la carretera, justo aquí empieza la etapa 5 de Gr 247 y que lleva hasta la hoya de los trevejiles, nosotros seguimos hasta el cruce de la casa rural los parrales, donde termina la etapa 4 y bajamos al área recreativa los parrales para comer algo.
Por la parte alta de las barbacoas y la fuente hay un camino que seguimos hasta una era, seguimos subiendo hacia arriba para ver las ruinas de lo que parece fue parte de la casa forestal o anterior a esta, después volveremos a la era para ir bajando a encontrarnos con el Pr A- 193 que viene del km 76 y sube a cañada morales y que más adelante se cruzara compartirá camino con el Gr.
Seguimos el Pr desviándonos para ver el cortijo Montillana y asomarnos al embalse y después mas adelante para ver la cascada del Chorreón, volviendo después a coger el desvío cerca de esta que sube a Cañada morales, por un bonito recorrido que por un sendero para desembocar en una camino más ancho que nos lleva a un olivar que cruzamos y dejamos en una baliza ( que hay que estar atentos para no pasarnos) subiéndonos después por otro sendero hasta un camino que lleva a final de Pr justo donde hemos dejado el coche.