Cañar, Acequia de Barjas, Puente Palo, Dique 24, Cañar

Disfrutando de una magnifica excursión otoñal por esta zona por el recorrido de la Alpujarra, que comprende las localidades de Cañar y Soportujar, (aunque sin pisar esta última) y como nexo de unión, la recuperada acequia de Barjas, el robledal de la Loma de Cañar y Soportujar, y el barranco y Río Chico.

Tomando el bello pueblo de Cañar como punto de partida, junto a la "niña" de mi casa, tomamos (denominada por los habitantes del pueblo, vereda de la Sierra) el Camino Real de Los Neveros que sube a la antigua Casa Forestal de Cañar y el Área Recreativa de Puente Palo. Este sendero, es el primitivo, el de toda la vida, el que antaño tomaban los ganaderos y labradores para realizar sus quehaceres diarios. La apertura del carril de la Sierra, originó (como casi siempre que se abre un carril) la practica perdida del camino real y verdadero. Conforme ganamos altura, si volvemos la vista atrás, contemplamos en primer plano la localidad de Orgiva, el embalse de Rules, y en la lejanía, en la costa granadina, Salobreña y el mar Mediterráneo. Un éxtasis visual, digno de contemplar.

Tras recorrer algo menos de tres kilómetros en ascenso llegamos a la unión de la recuperada Acequia de Barjas con la Acequia Grande de Cañar. Ambas Acequias toman el agua del Río Chico. Muy próximas a Puente Palo.

Una vez en la de Barjas, seguiremos su curso en terreno suave, hasta llegar al cortijo de Las Alberquillas. Un caballo blanco en el cobertizo y unos perros nos reciben un poco de malas pulgas, pero al ver mi "compañera", una "dama" de su par, se relajan y se muestran curiosos y apacibles. A continuación del cortijo a nuestra derecha, una balsa sirve de de aporte de riego para las labores de los cortijos.

Conforme avanzamos por el curso de la Acequia, la vegetación va siendo más frondosa, imperando sobre todo los Castaños. Hermosos y recios ejemplares esta variedad de árboles. Su porte, tronco y envergadura es en algunos colosal. Son muy longevos y resistentes al clima. Al avanzar, el Castaño va dando paso al Robledal, y en nuestro avance, pasaremos los barrancos del Pasillo y del Nevazo, donde en este último, hay una pequeña catarata con gran cantidad de hielo. En sus proximidades una fuente de nueva construcción, surte de agua fresca al caminante.

Pasada la fuente, llegamos al barranco de La Era Alta. Aquí hay que abandonar la Acequia y remontar unos bancales de antiguas labores pertenecientes a los cortijos de la Majada de La Era y encontrarnos con la Acequia Grande de Cañar, junto al Área Recreativa de Puente Palo.

Puente Palo (ya no es de palo, pero hace muchos años, lo fué) nos facilita el paso del Río Chico. Ahora lleva poco caudal, pero en tiempo de lluvias y en el deshielo, sin él, sería muy complicado el vadeo.

Pasado el puente, a nuestra izquierda sale un ramal de carril que se dirige a los cortijos de Haza Llana, La Laguna, Prado de Las Rosas y la Piuca, que obviamos, y continuar por el carril que baja a antigua Casa Forestal de Soportujar, el cual abandonaremos en breve y tomar a nuestra derecha el sendero PR A 22 hacia el dique 24 del Río Chico.

El sendero PR A 22, es una maravilla!!!! a cada recodo, cada tramo, su vegetación, es una imagen idílica, la contemplación y el deleite es mágico. Cada paso que damos es una invitación a detenernos y saborear la naturaleza en su máximo esplendor. Los colores otoñales, aún persisten en la vegetación que arropa e inunda el barranco con unos colores cromáticos de ensueño. ¡¡¡maravilloso, maravilloso!!!.

Al llegar a las inmediaciones del lecho del Río Chico, en el dique 24, pasaremos la Acequia de la Vega que baja por el margen izquierdo del Río, llevando su rico elemento a las labores en Soportujar. En la Cota del dique, a la derecha del margen derecho del Río, tomamos el sendero E4 GR 7 en el tramo Lanjaron, Cañar, Soportujar para llegar a Cañar en poco más de dos kilómetros por el bello paseo de los Sotillos, dando vistas Carataunas, Soportujar, Valle del Río Guadalfeo. La Contraviesa y la Sierra de Lujar. Todo un lujo contemplativo mientras caminamos.

Ha sido una mañana magnifica, y sumamente gratificante.

SOBRE CAÑAR Y EL DIQUE 24:
El pueblo de Cañar, se remonta a la época de dominación musulmana en los siglos VIII al XI, y a partir del XIV Cañar se incluye en la Tahá de Órgiva. Al parecer y según algunos libros de historia, Barjas desapareció en una riada en el año 1816. Era un anejo de Cañar. Las crecidas del río y los daños que causaban en la zona dieron lugar a la construcción del Dique 24. El cual se terminó de construir en el año 1943. Recientemente, en octubre del 2014 se ha llevado a cabo la recuperación de la Acequia de Barjas, la cual llevaba abandonada mas de 30 años. Este Río Chico, torrencial y bravío según que épocas, de "chico" no tiene nada sobre todo en el deshielo y en fuertes lluvias: Para evitar la importante erosión que causaban los aluviones de agua, en su angosto barranco, a mitad del siglo pasado se edificó el dique 24. Una obra de vital importancia para contener las riadas. Su cuenca y manantiales provienen de la cabecera de Cerrillo Redondo, Tajos de Los Machos y Las Alegas. Los dos primeros de 3.000 msnm. A pesar de su corto recorrido, el desnivel es muy importante, ya que salva casi los dos mil metros en apenas 16 kilómetros. El Río a lo largo de los años, siempre ocasionó daños y destrozos, y para "amansar" sus aguas, se edificó el impresionante dique superando los treinta metros de altura.