Cañón de Añisclo

Ruta de ida y vuelta recorriendo todo el cañón, hasta la zona de Fuenblanca.
El Cañón de Añisclo es sencillamente espectacular, esculpido por la acción erosiva del río Bellós durante millones de años.
Sus numerosas cascadas y saltos de agua, sus interminables paredones, una vegetación exuberante y varios puentes hacen que podamos disfrutar de un día inolvidable.

El desnivel resultante es erróneo, normal cuando se anda entre paredones. Lo correcto será entre 800 y 900 metros.

Para llegar al parking de San Úrbez se toma el desvío en Escalona, recorriendo la parte sur del cañón por una estrecha carretera de sentido único. Sólo el acceso ya resulta espectacular.

La ruta no tiene pérdida, consiste en recorrer el cañón en toda su longitud (12 kms), por buen sendero, claramente indicado.
Se inicia descendiendo hacia el este para cruzar el cañón por el espectacular puente de San Úrbez y visitar la ermita (incrustada en la roca) donde vivió el santo en el siglo VIII.
Continuando hacia el norte podemos ir admirando todo el cañón. Existen dos fuentes en la primera parte del recorrido, cerca de Cumaz. El frondoso bosque compuesto de hayas, pinos, abetos, avellanos, bojes... algunos ejemplares magníficos, sobre todo un tejo enorme.
En Cumaz el río forma un sifón, hay que asomarse en las rocas y puede resultar peligroso.
En la Ripereta existe una playa de roca, ideal para descansar y respirar un poco de tranquilidad.
Un paso equipado con sirga (muy sencillo) ayuda a llegar a la zona de Fuenblanca. Una impresionante cascada surge de la pared rocosa. El río Bellós forma pequeñas cascadas mientras desciende desde su nacimiento, cerca del collado de Añisclo. Existe una vieja cabaña que puede servir de refugio. Una derivación del Gr-11 baja desde el collado de Góriz por el barranco de Arrablo y asciende hasta el collado de Añisclo, sirve para evitar pasos comprometidos por la nieve durante el invierno en la ruta habitual del Gr-11.
La vuelta se realiza por el mismo camino hasta las cercanías de la ermita de San Úrbez, girando a la derecha se desciende al rio completando un pequeño circuito para visitar la hermosa cascada de Aso y volver al parking.