Canuto de Algamasilla, Cerro del Tambor, Torre Guadalmesí, Vereda de la Costa, Vereda de Marchenilla. Algeciras (Cádiz). A.N.

Pelayo, Canuto de Algamasilla, Cerro del Tambor, Torre Guadalmesí, Vereda de la Costa, Vereda de Marchenilla. Algeciras (Cádiz). A.N.

Ruta de senderismo realizada el sábado día 05 de Octubre de 2019.

Distancia total recorrida: 21,14 kms.
Duración: 8 horas (con almuerzo y paradas).
Desnivel acumulado: 514 metros (de subida y también de bajada).
Grado de dificultad: Moderado - fácil.

Dimos comienzo a este sendero a las 09:30 h. en un pequeño aparcamiento, justo donde comenzamos nuestra marcha por el corto pero precioso trayecto por el Arroyo de la Marchenilla, que hay que cruzar en dos ocasiones (ojo, en épocas de lluvias pudiera ir crecido). Este corto trayecto le saltamos al regreso (un camino de arena con pendiente de subida que se nos hizo pesado por el calor que hacía).

Básicamente se puede decir que en el mismo sentido en que se ha realizado esta ruta, la ida hasta la Torre Guadalmesí es por un camino de arena y el resto por sendero que encontramos fácil de seguir y desbrozado. Pasamos por varios pasos por valla y varias bifurcaciones.
Transitando por la costa, lo haremos no por la playa, sino, por arriba de los acantilados. Al menos en dos ocasiones "tocamos" la playa. Se recomienda que el tránsito por aquí se haga con marea baja. Finalizado el tramo por la costa, comenzamos el regreso por un sendero bastante pendiente que más arriba se irá suavizando. Nos llamará mucho la atención el fondo rocoso (los conocidos como Flyshc) que veremos perfectamente con marea baja, dispuestos paralelos y alineados en una misma dirección.
Subimos al Vértice Geodésico Cerro del Tambor, más por aprovechar que estábamos muy cerca. Junto al vértice hay un enorme aerogenerador.
Durante la ruta cruzamos varios arroyos que estaban secos. Precaución en días de lluvias, pudieran ir crecidos.
Parece ser que lo ideal para hacer esta ruta es hacerlo con viento suave de poniente, tal vez el más aconsejable para poder disfrutar de las preciosas vistas al estrecho y Marruecos.
La ruta en general tiene muy pocas sombras. El regreso se nos hizo un tanto pesado por ser básidamente de subida en su primera mitad y por el calor que hacía.

Recordad que esta ruta es orientativa, los comentarios son subjetivos, se ha de tener en cuenta muchos aspectos, tales como la capacidad física, experiencia en senderismo, ir con el calzado, atuendos adecuados, tener en cuenta la climatología, ir con guía o con ayuda de un gps, contrastar esta ruta con otras similares que he hayan hecho recientemente por si hubiera alguna información importante a tener en cuenta.
Wikoloc pudiera presentar errores varios en cuanto a desniveles, distancias. Es por eso que se hace aconsejable comparar una misma ruta con las realizadas por otras personas.

Mis agradecimientos a l@s amig@s que me acompañaron. También a "Kminante del Sur" y "Andarines Gaditanos" por sus rutas grabadas en Wikiloc y a Ana, por conjugar ambas rutas.

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A continuación, explicación del recorrido por nuestra amiga y compañera de ruta, Ana:

Dejamos el coche en Huerta Grande, en la Barriada Pelayo, en un lateral de la carretera para comenzar nuestra ruta cruzando la bonita Garganta de la Marchenilla o Canuto Algamasilla.
El arroyo de Algamasilla nace en la parte alta de Pelayo, en el interior de la Sierra de Luna. El atractivo de este itinerario se encuentra en el pequeño “canuto” existente, formación vegetal propia de climas subtropicales, que da una idea del clima que hubo en la zona en la edad terciaria.
Durante el recorrido, aparecen alcornoques, laureles, sauces, alisos, y mucha hiedra enredada. La gran cantidad de vegetación existente ofrece la umbría necesaria para que, en verano, el arroyo sea un remanso de frescor y humedad.
Cruzamos el pequeño canuto y enlazamos con el sendero del Cerro del Tambor, que por una pista de unos 4,5 Km, nos lleva a un antiguo Bunker y a un Mirador al Estrecho. Tenemos atrás la Sierra del Algarrobo y a la derecha la Sierra del Bujeo. Antes de llegar al Mirador cogemos un desvío, y flanqueados por una fila de aerogeneradores, alcanzamos el Vértice Geodésico Tambor, que con sus 229 metros sobre el nivel del mar, nos permite ver la Costa hasta Tarifa por la derecha y hasta la Punta del Acebuche a la izquierda. Vemos la Torre Guadalmesí, otro de nuestros objetivos y nuestra siguiente parada, el antiguo bunker y el Mirador del Cerro del Tambor.
Tras la parada y la contemplación de ambas orillas del Estrecho, volvemos a la pista y en continuo descenso llegamos a la costa, a la altura de la desembocadura del Río Guadalmesí. Subimos a la torre del mismo nombre, Torre Guadalmesí, declarada bien de interés cultural el 29 de junio de 1985. Se trata de una torre vigía del siglo XVI.
Esta torre toma su nombre del arroyo Guadalmesí, topónimo de origen incierto que podría provenir de la voz bereber wadí-n-Nasá, río donde pasar la noche, asimilada a de la voz árabe wadí-n-nisá, río de las mujeres, que, afectada por el fenómeno fonético de la imela fue fácilmente confundida por los cristianos repobladores con el vocablo castellano guadamecí, cuero adobado y adornado con dibujos de pintura o relieve. De hecho, el topónimo Guadalmesí aparece ya en la Crónica de Alfonso XI redactada en 1340 como Guadamecil y más tarde en múltiples variantes similares hasta la forma actual. Su función principal, aparte de la vigilancia de tránsito por el Estrecho manteniendo contacto con la torre de la Isla de las Palomas y la torre del Fraile, fue la de evitar que buques enemigos hicieran acopio de agua en el cercano arroyo de Guadalmesí, único punto de todo el tramo de costa donde podía hacerse en verano.Tiene planta redonda y forma cilíndrica alamborada con 12 metros de diámetro en la base y una altura total de 15 metros. El cuerpo de la torre es macizo en su tercio inferior estando el resto de la construcción ocupada por una estancia abovedada a la que se accedía mediante una puerta-ventana situada a 5.5 metros del suelo y orientada al norte. Desde esta estancia, que posee otra ventana abierta hacia el mar, se tenía acceso a la terraza superior mediante una escalera helicoidal interna incluida en el muro perimetral. En la actualidad su estado de conservación es bueno, aunque ha perdido su revestimiento y, en zonas puntuales diverso material constructivo, principalmente en ventanas, escalera y terrado.
Dejamos atrás la Torre y seguimos la vía pecuaria que unía Tarifa con Algeciras. Esta V.P. que durante siglos ha servido para el transporte de ganado, tiene la categoría de Colada, que es la menos tras cañadas reales, cordeles y veredas.
Pasamos por Punta de la Espadilla, la Punta de la Parra, un antiguo búnker, la cala y el cuartel de Arenillas y llegamos a la Punta Botija, donde desemboca el Arroyo Maraber o Botija. Contemplamos el espectáculo de los flysch.
Los Flysch (que en alemán quiere decir fluir o deslizarse) son formaciones rocosas de origen sedimentario compuestas por una alternancia rítmica de capas de rocas duras intercaladas con otras más blandas que favorecen la erosión diferencial, creando paisajes espectaculares.
Tras repones fuerzas, subimos por una vereda que sale a la izquierda del Arroyo, se trata de la Vereda de la Cuesta de Marchenilla. Tras una empinada subida, nos deja bonitas vistas a la Cordillera del Rif y a la ensenada del Tolmo.
Llegamos a un cruce señalizado y girando a la izquierda, en menos de dos kms. Terminamos nuestra ruta.

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Espero que sea de vuestra ayuda.

Amig@s y Naturaleza. A.N.