Carretera de las aguas, desde Av. Pedralbes hasta Torre Baró

Iniciamos la excursión en la plaza Pio XII que es el inicio de la Av. Pedralbes en la Av. Diagonal. Es un hermoso y ancho paseo que tiene unos pinos añejos, muy altos, en ambas aceras que le dan un aspecto singular y agradable.
Al finalizar la subida por la misma, nos encontramos con el Monasterio de Pedralbes. Nos dirigimos hacia la izquierda por la Av. de Esplugues y siguiendo por la acera del Monasterio insensiblemente nos lleva por la Av. Pearson, cruzamos por arriba la ronda de Dalt y vamos por el carrer de la Abadessa de Olzet, Carrer de la Rábida, pasando por el Jardi dels Torongers y giramos a la izquierda en Passeig de San Francisco, luego nuevamente a la izquierda. Ahora a la derecha cogemos un trozo de la Av. Pearson y recto vemos una calle que termina en la vegetación, el passatge de la Font del Lleo. Llegados hasta aquí no se ve claro el sendero, pero no es difícil de encontrar. La referencia son las torres de electricidad con su cableado; siguiéndolas por la derecha, se intuye un sendero que lleva hasta la carretera de las aguas. Hay una forma más fácil de llegar por un sendero mejor marcado por el carrer de la font del lleo.
Una vez en la carretera de las aguas vamos hacia la derecha y ahora es solo cuestión de caminar.
La próxima dificultad la podremos encontrar al llegar a la Plaza dels Maduixers, donde se acaba la pista, hay un parking y la carretera es asfaltada. Debemos seguir por la carretera asfaltada en dirección norte, siempre subiendo, y si bien yo intenté coger un sendero por le bosque, al final termina nuevamente en la carretera, y solo le agrega dificultad. Al final de la pista asfaltada el camino se divide a derecha e izquierda y está atravesado por una cadena en ambos sentidos. Cogemos el de la izquierda, que es el que sube y va transformándose en un sendero irregular que nuevamente se transforma en pista. Pronto encontramos un letrero indicador. Vamos a la derecha en dirección Font del bacalla, Tibidabo. A los pocos pasos encontramos otro desvío hacia la derecha, con unas escaleras que nos llevan por la Font del bacalla, que nos hace perder altura, pero que vale la pena por lo bonito del entorno y la presencia de agua. Este camino termina en la carretera de la Arrabasada. Al llegar aquí hay un banco donde poder sentarse. Debemos cruzar la carretera porque del otro lado hay un sendero por fuera de los guadarrails que no presenta dificultad para caminar y es seguro. Lo cogemos hacia la izquierda, subiendo. Pasamos por una gasolinera donde se pierde el sendero, pero lo volvemos a retomar al pasar la misma. Luego de unos minutos andando aparece a nuestra derecha la señal del centro de acogida de animales sueltos. Debemos coger por aquí. Es nuevamente la pista de la carretera de la Aguas. Una vez aquí hay que seguir las indicaciones que dicen "carretera o paseo de las Aiguas" y llegaremos al final del recorrido. Al llegar al final nos encontramos en Torre Baró. Para coger el transporte público es todo bajada hasta la estación del metro o Renfe, que están muy cerca una de otra.