Casbas - Santa Eulalia la Mayor

Cruce camino de Sieso a Foces

Salimos de Casbas por el barrio de las Casetas, siguiendo la indicación a Foces. A 2'3km caminos entre maginazos encontramos la pista que va de Sieso a Foces y seguimos por ella.

Cruce camino de Ibieca a Angüés

A unos 2 km nos cruzamos con la pista de Ibieca a Angüés, y seguimos recto por la pista señalizada a Foces

San Miguel de Foces

Llegamos a San Miguel de Foces por el sendero posterior a la Iglesia que nos obsequia de una magnifica visión de sus imponentes ábsides. Descansamos en la zona del merendero junto a los plafones informativos. Continuamos nuestro recorrido cogiendo la pista dirección norte hasta encontrar la pista de Angüés a Ibieca.

Ibieca

Entramos en Ibieca por el antiguo camino de Angüés, cruzamos la plaza de la iglesia de San Clemente, y salimos a la carretera de Aguas. A unos 300 m, justo en la entrada del cementerio, encontramos la pista de Arbaniés y seguimos por ella unos 2'4km, entre cultivos pequeños cultivos de secano y cereales. En este punto la dejamos y cogemos la pista de la derecha dirección norte, siguiendo las indicaciones del Camino Natural. Después de recorrer 1'3 km la pista se acaba y continuamos por un sendero que desciende entre carrascas, concojas, bojes y genistas, sobre un suelo meteorizado de areniscas, hasta llegar al barranco de la Ripa.

Barranco de la Ripa

Cruzamos el pequeño cauce por las piedras dispuestas y remontamos el desnivel, entre carrascales, hasta encontrar otra pista que discurre entre de cultivos de secano. . Seguiremos por ella, cruzaremos el camino de Arbaniés a Consullano, y después de andar 1'7km llegamos al bonito y sencillo puente medieval de Sipan.

Cruce con el amino de Arbaniés a Coscullano

Puente Medieval

El puente medieval, construido con sillares y con un único arco ojival, permite el paso del río Guatizalema, en el antiguo camino de Arbaniés. Lo pasamos y nos dirigimos al pueblo del pueblo de Sipán. http://www.sipca.es/censo/1-INM-HUE-006-150-001/Puente.html#.YppSE6hBzcs

Sipán

Entramos al pueblo de sipán y, si tenemos tiempo, contemplamos la Iglesia de María Magdalena. Seguimos nuestro recorrido buscando la pista dirección Ayera, hacia el oeste, que discurre, primero rectiliniamente luego sinuosamente, entre campos de cultivo de secano. . A 2'5 km encontramos las interesantes ruinas de San Esteban.

San Esteban

San Esteban es una modesta ermita, de la que se conservan los arcos ojivales, y está situada en la cima de un promontorio, que a su vez sirve de plataforma de una curiosa necrópolis (S. XI) con muchas tumbas antropomorfas. excavadas en la roca. También se pueden ver los restos de unos aljives de posible origen musulmán. Seguimos hasta el cercano pueblo de Ayera. http://www.sipca.es/censo/1-INM-HUE-006-150-033/Ermita/de/San/Esteban.html#.YppWWKhBzcs

Ayera

Entramos en Ayera por la calle única, que nos permite contemplar la iglesia de San Miguel Arcangel, buena muestra del barroco del s.XVIII. Atravesamos el pueblo por la misma calle, dirección norte, y continuamos por la pista, que a pocos metros girará a la izquierda y luego hará otro giro a la derecha, para realizar un último giro a la derecha, muy pronunciado, para iniciar el ascenso continuado. A 1 km de esta última curva encontramos a la izquierda las ruinas de la ermita de San Fertús, situada en una pequeña meseta donde antiguamente se emplazaba un pequeño pueblo medieval. Continuamos nuesto ascenso hasta el cruce con la carretera.

Cruce carretera HU-3300. Castilsabás

Esta carretera, a la izquierda nos lleva hacia Loporzano, a la derecha a la entrada del vecino pueblo de Castilsabás. Seguimos por la pista y atravesamos la carretera.

A la ermita de Nuestra Señora del Viñedo

A unos 300m podemos desviarnos a la izquierda para visitar la ermita de Nuestra Señora del Viñedo.La ermita es una construcción de sillería y ladrillo sobre planta de cruz latina con capillas laterales. La casa-hospedería está unida al templo y se encuentra bajo la custodia de una ermitaña que vive en ella y la cuida. Los bajos de esta casa sirven para albergar el Punto de Información El Viñedo.

Al antiguo molino de aceite

Por el mismo camino que hemos accedido a la ermita, a la izquierda encontramos otro que conduce a un antiguo molino. Se trata de una construcción rectangular con tejado a una vertiente, junto al que se ha instalado un panel explicativo. Tanto el edificio como su interior fueron restaurados recientemente, manteniendo su estructura original, y pudiéndose apreciar todavía en su interior la muela, la prensa, las piletas y canalillos necesarios para todo el proceso de transformación de la oliva en aceite. Volvemos a la pista principal para terminar nuestra ascensión a Santa Eulalia la Mayor. A 1'5 km de subida encontramos la carretera que nos llevará, en pocos metros, a la entrada del pueblo.

Santa Eulalia La Mayor

Entramos subiendo por la calle de la Iglesia. A unos 300 m encontramos la iglesia de San Pedro Apóstol, con un aspeto aqrquitectónico compacto, construido en sillería, con algunas decoraciones barrocas. http://www.sipca.es/censo/1-INM-HUE-006-150-066/Iglesia/de/San/Pedro/Ap%C3%B3stol.html#.YpyUAahBzcs

Ermita de Santa Maria de Sescún

Subiendo por la calle Alta, llegamos a la Ermita de Santa María de Sescún. Se trata de un edificio de origen románico del siglo XIII de alargada planta rectangular con nave única y cabecera plana orientada al este, construido en piedra sillar y con cubierta a doble vertiente. Por la parte de atrás el sendero continua subierdo hasta la emblemática Torre.

Castillo

Se trata de un medieval complejo defensivo, del que sólo se conseva de manera íntegra la torre principal. Se alza sobre un promontorio rocoso en las proximidades del núcleo de Santa Eulalia, desde donde disfruta de una privilegiada posición sobre la Hoya de Huesca y el valle del alto Guatizalema. Esta ubicación le permitía controlar el antiguo camino que, a través de Cuello Bail y Sescún, unía los llanos de la Hoya con el valle de Nocito y las tierras de la vertiente norte de la sierra. A nosotros nos regalará un paisaje inigualable, como premio y punto final de nuestra larga excursión.