Cascada de Artazul, Nacedero de Arteta y Cascada de Aizpun desde Aizpún

Se trata de una ruta muy espectacular para realizar en primavera, cuando los arroyos y los riachuelos están rebosantes y cantarines. Recorrimos una cueva y dos cascadas para volver por el puerto de Arteta a cerrar la ruta.
Partimos de la localidad de Aizpun y desde allí nos dirigimos a la cascada de su mismo nombre por un sendero bien marcado. Atravesamos una puerta y poco después dejamos la ruta a la cascada por acercarnos a la Caverna Maldaia. Es una oquedad amplia que en el momento de la ruta tenía una bonita cortina de agua de una cascada que caída desde su zona superior. Desde allí intentamos acercarnos a la cueva de Baratxitos, pero el terreno no estaba muy practicable y desistimos. Todavía nos quedaba mucha ruta por hacer.
Deshicimos nuestros pasos para volver a tomar la ruta de la cascada que discurre por el bosque y por la vega del arroyo. Llegamos hasta el borde de la cascada que no pudimos apreciar mucho y desde allí seguimos una senda con la intención de llegar hasta el frente de la cascada y después hasta la siguiente, la de Artazul. Este sendero tiende a difuminarse y hay que ir con un poco de atención al track hasta llegar al canchal, donde ya la senda se hace más visible, aunque no deja de tener cierta complicación por las piedras y la pendiente. Eso sí, desde aquí la vista del corte en la peña realizado por la cascada es espectacular, aunque el día de la ruta no había mucha agua.
Bajamos hasta la cascada de Artazul y ésta sí tenía un buen caudal. Estaba realmente espectacular. Disfrutamos del espectáculo y para tomar el camino hacia el Nacedero de Arteta tuvimos que mojarnos los pies ya que el caudal superaba con creces el cauce. Fue un buen ejercicio de pediluvio con una agua más que fresca. Llegamos al Nacedero de Arteta y aunque no se puede visitar el nacedero por un aviso de seguridad, sí que se puede ver el centro de interpretación de la “traída de aguas a Pamplona” y del funcionamiento de los paisajes kársticos.
Desde allí nos dirigimos a las Saleras de Arteta, unas antiguas explotaciones de sal aprovechando las surgencias de salmueras a través de un pozo. Siguiendo la pista llegamos a Arteta y allí tomamos la carretera NA-7030 en dirección al puerto para subir a la meseta del valle de Goñi. Esta quizá sea la parte menos atractiva de la ruta ya que se realizan unos cuantos kilómetros por carretera. Eso sí, es una carretera, que cuando realizamos la ruta, no tiene casi tráfico. Prácticamente nos encontramos con ciclistas y uno o dos coches. Si se quiere evitar un buen tramo de carretera se puede alargar la ruta hasta Senosiáin y desde allí tomar una pista de ascenso y un sendero que desemboca prácticamente a un kilómetro de cima del puerto. Según se va ascendiendo por la carretera se va abriendo la panorámica del Valle de Ollo en forma de circo. Las vistas merecen la pena, pudiendo contemplar bastantes de sus localidades desde las alturas.
Una vez coronado el puerto nos dirigimos hacia Goñi, un pequeño pueblo con mucha historia y ya cerremos el camino hacia Aizpun. Poco menos de un kilómetro antes de llegar a esta localidad hay un pequeño aparcamiento para dirigirse otra vez a la otra vertiente de la cascada. Nosotros nos acercamos, aunque no pudimos verla mucho porque el mismo caudal del río no nos dejó acercarnos a los lugares de mejor visión.
Es una ruta con cierta complicación en su tramo entre cascadas y que requiere de cierta forma física para superarla y después se requiere un poco de paciencia para cerrar la ruta por la carretera. Buscamos otra forma de hacerla circular pero no encontramos buenos senderos para poder hacerlo y la carretera, al menos cuando hicimos la ruta, tiene muy poco tráfico.


Ruta circular desde Aizpún pasando por:
- Caverna Maldaia (0.9 km)
- Cascada de Artazul (3.7 km)
- Nacedero de Arteta (4.4 km)
- Puente de Ugo (5.0 km)
- Saleras de Arteta (5.5 km)
- Ermita de Santiago (6.6 km)
- Arteta (7.2 km)
- Goñi (16.6 km)
- Cascada de Aizpun (20.5 km)