Cascada de los Bolos-Rio Dúrcal

******NOTA IMPORTANTE*****:
LA DIFICULTAD CON LA QUE CATALOGO MIS RUTAS ESTÁ REFERIDA PARA QUIENES ESTEN HABITUADOS A ESTE TIPO DE ACTIVIDADES Y QUE SE DESENVUELVEN CON SOLTURA POR TODO TIPO DE TERRENOS Y NO PARA AQUELLOS QUE LAS PRACTICAN OCASIONALMENTE. SI TIENES POCA EXPERIENCIA, AÑÁDELE UN GRADO MÁS A LA DIFICULTAD DE MIS RUTAS PARA NO LLEVARTE SORPRESAS. 👍

En primer lugar decir que el desnivel no es tanto, ya que las interferencias del gps entre montañas a veces falla, el desnivel positivo acumulado es de unos 430 metros.
Iniciamos esta ruta desde los aparcamientos que hay antes de llegar al I.E.S. Valle de Lecrín que está en el Camino de las Arenillas.
Tomamos el camino de la derecha que va junto a una acequia, al final del camino bajamos al rio y tomamos un sendero a la derecha que nos sube a la acequia Mahína, caminaremos sobre el margen de esta acequia a buena altura, si tienes vértigo puedes ir por dentro de ella. En un punto de la acequia hay un pequeño túnel que hay que hacerlo o bien por dentro de la acequia más cómodo o agacharse para pasarlo. Poco más adelante la acequia se mete en la montaña y tenemos que pasar por un paso estrecho, si llevas mochila pasas muy ajustado, mejor en la mano.
Llegamos por la acequia hasta un repartidor y a partir de aquí comienza la ruta acuática. La primera sorpresa fue encontrarnos el canal de la fuga sin agua, una lástima porque dicen y en fotos se ve, es espectacular. Seguimos rio arriba en zona con rocas y algunas pequeñas pozas sin que el agua llegue en ningún momento por encima de los muslos. Hay que ir con precaución ya que las piedras resbalan y puedes tener un tropiezo. Hay algún que otro momento en el que tienes que trepar alguna piedra, pero no es nada complicado. Al final tienes tu recompensa, una espectacular cascada, y una poza para que puedas darte un baño, si es que aguantas el agua tan fría que viene.
Comentan que por el lado izquierdo se puede subir arriba de la cascada, y seguir con la ruta, pero que es complicado y difícil, con riesgo de caídas, así que desde aquí iniciamos la vuelta.
Al llegar al repartidor, en vez de tomar la acequia, seguimos rio abajo para ver si se puede progresar sin que haya mucha vegetación, al principio bien, pero luego no pudimos seguir, asi que subimos nuevamente a la acequia por la que vinimos y seguidamente bajamos por un sendero que nos llevó a la otra parte del rio y caminar junto a la acequia de enfrente. El final está bajando unos escalones que te devuelve al rio y tras pasar un puente tomamos el sendero de Nico Molina que por el rio nos enlaza con el camino por el que iniciamos la ruta, y por ahí de vuelta al aparcamiento.