Castro Filabres PR A 322 Las Hoyas

Esta ruta es para realizar en invierno, a principio de la primavera o como nos ha ocurrido a nosotros en un día nublado con lluvia, y el motivo es que no hay ni una sombra. Siempre vamos por la parte alta del barranco y luego pasamos a pista o campo a través pero sin árboles.

Partimos desde el mismo pueblo de Castro Filabres situado a 960 m, de altitud siguiendo el PR-A 322 que es un sendero circular de 11,5 KM pero que nosotros vamos a realizar solamente en parte, hasta el tramo que llega a las cortijadas de las Cristaleras.
En estas fechas está todo muy verde y la ruta atraviesa varias cortijadas típicas de esta sierra realizadas con pizarra. Pensábamos que al ser un recorrido balizado no íbamos a tener problemas en seguirlo pero a partir del km 3 se pierde, hay muchos senderos abiertos por animales y las marcas del recorrido están pintadas sobre piedra. Hay que dedicar bastantes esfuerzos en buscarlas. Muchas se encuentran ocultas por la vegetación. Es necesario llevar gps si quieres más o menos intuir por donde discurre. Esta situación se agrava llegando a la cabecera del barranco del Pello porque hay que subir unos riscos y hay que hacerlo un poco por intuición. No habría sido mala idea poner de vez en cuando unos postes que nos vayan guiando. En este aspecto, en la fecha de realización no tiene un mantenimiento adecuado.

A partir de las Cristaleras la subida es por pista prácticamente hasta el refugio de las Hoyas. A nosotros se nos hace cómoda. La vuelta la hacemos por la cuerda de las Hoyas, primero por el cortafuegos y luego por un tramo de pista que dejamos para desviarnos a la derecha buscando otra pista que nos llevará a Febeire.
Desde aquí buscamos enlazar con el GR-244 que viene de Velefique y va a Castro de los Filabres pero lo hacemos campo a través con cuidado porque hay cierta pendiente y está llena de esparto. Es algo complicado porque te puedes resbalar y doblarte un tobillo con mucha facilidad. Es la parte más difícil de la ruta.