Cementerio de Jumilla

Mucha gente siente rechazo por los cementerios. A mí, sin embargo, me fascinan desde que era pequeño, cuando acompañaba a mis padres periódicamente a visitar a nuestros fallecidos.

Un cementerio es, además, una ingente fuente de historia local, y encima muchos acogen verdaderas joyas arquitectónicas y rincones muy bonitos.

Éste es el caso del cementerio de Jumilla, al menos el sector antiguo, el actual es una serie de repeticiones de nichos, muy útiles pero sin el menor encanto. Supongo que es el signo de los tiempos.

El caso es que hace un tiempo subí al Castillo de Jumilla, a cuya espalda, abajo, se encuentra el cementerio, y desde allí arriba lo vislumbré porque me pareció inusualmente monumental. Pero cuando bajé estaba cerrado, así que lo dejé anotado en mi lista de visitas pendientes.

El cementerio es pequeño y tiene dos partes: la nueva (perfectamente omisible), y la antigua, de estilo romántico, en la que encontraremos un puñado de panteones, algunos de ellos auténticas obras de arte. Los hay de estilos clásicos y modernos. Personalmente siempre preferí lo clásico, no tanto por su belleza (muchas obras contemporáneas me parecen preciosas) como por la carga histórica y antropológica que acumula el panteón de una familia pudiente desde hace casi doscientos.

Tres edificios, todos muy cercanos destacan sobre el resto: el primero es la ermita, de estilo romántico, siendo la edificación de mayores dimensiones de todo el cementerio.

El segundo, situado un poco más a la izquierda, es el de la familia de D. Francisco Pérez de los Cobos e Hijos, de estilo ecléctico medieval, coronado por un ángel que toca una trompeta anunciando el Día del Juicio Final. Este panteón se encuentra descuidado, lo que por un lado le confiere una mayor belleza, pero por otro preocupa por el deterioro que ya se observa.

El tercero, a la espalda de la capilla y dentro de uno de los recintos ajardinados, es el sobrio y hermoso panteón octogonal del Barón del Solar, con una vistosa cúpula y un diseño muy elegante.

Si queréis más información, he encontrado este interesante documento del portal Región de Murcia Digital: https://www.regmurcia.com/docs/nayades/N011/N11-010.pdf

El paseo entre tumbas, nichos, panteones y unos cuidados jardines bien arbolados, hacen que ésta sea una visita, en mi opinión, imprescindible en Jumilla. Para muchos será una agradable sorpresa descubrir un rincón que guarda en tan poco espacio estas pequeñas e indudables bellezas.