Cerrada del Pintor desde el Puente de las Herrerías

Para el día final de mi breve estancia en Cazorla buscaba una ruta corta, ya que mi talón seguía fastidiado y para sustituir la que tenía planificada, encontré un acceso más corto a la Cerrada del Pintor, que era lo que tenía en mente. El track que llevaba también subía al Picón de los Halcones, pero esa parte la dejo para otro día ya que hoy no iba en condiciones de realizar ese ascenso.

Decir que la ruta es excepcional, ya que a la grandiosidad de la "Praera" Marchante se une la increíble belleza de la Cerrada del Pintor. Ya digo que iba tocado de un pié y eso impidió que subiera al Picón, pero también que siguiera la senda que bordea el Tornillo del Gualay hasta el comienzo de la Cerrada de la Canaliega, un paseo adicional que según leo es bellísimo.

Dos advertencias sobre la ruta. En el ascenso por el Sendero a El Poyo de la Mesa, hay que estar atento al waypoint que indica el desvío, ya que no se ve ninguna senda (de hecho no es una senda en ningún momento) y hay que atravesar una zona de espesa vegetación para seguir el rumbo correcto. Si os fijáis, yo me pasé ese desvío por bastante trecho, lo que me costó un pronunciado ascenso adicional.

Desde el inicio del Arroyo Habares se asciende por un camino con mucho desnivel. Casi al final yo fui de listillo y en vez de tomar el atajo que está indicado, decidí seguir en el camino, ya que parecía que pronto se uniría con el sendero que viene desde El Poyo de la Mesa. Pero no, sigue bastante tiempo en paralelo y terminé cruzando campo a través, añadiendo 1 innecesario kilómetro a la ruta. Viendo ahora el mapa podía haber seguido un poquito más y ya encontraba el dichoso sendero... ¡mejor toma el atajo!.

En cuanto a la Cerrada del Pintor, se podía andar por el lecho sin problema, ya que está prácticamente seco, con alguna poza aislada. Al llegar a la zona más estrecha hay una poza que ocupa todo el espacio y el agua debe llegar por la cintura. No me decidí a quitarme toda la ropa y seguir mojado, así que en ese punto emprendí el camino de regreso.