Cerrillo Redondo, Tajo de los Machos y las Alegas (Sierra Nevada)

Trazado circular que nos llevará a completar parte de la cuerda de tresmiles que engloba las cumbres de Cerrillo Redondo, 3.035m y Tajo de los Machos, 3089m, así como la variante que se descuelga hacia el este con el pico de las Alegas y el Refugio Forestal del Cebollar como hitos de referencia. El punto de partida lógico lo situamos en el Área Recreativa de Puente Palo, a faldas de la amplísima Loma de Cáñar junto al barranco de río Chico. Caminamos por las estribaciones meridionales del Parque Nacional de Sierra Nevada.

Con inicio en el Área Recreativa de Puente Palo lo primero es actualizar el estado de los accesos desde la carretera. Entramos a la sierra por la variante que parte del lado de Soportújar y salimos por el acceso desde Cáñar. Ambas nos llevan prácticamente el mismo tiempo de recorrido, aunque el carril desde Cáñar se encuentra actualmente en mejor estado, no obstante los dos accesos son asequibles con turismo.

Comenzamos el trazado con un corto tramo que nos coincide a la ida y a la vuelta, en continuo ascenso por el frondoso pinar de Puente Palo. El carril que pisamos acaba con su rodada en las inmediaciones del Cortijo de los Arroyos a media ladera de la Loma de Cáñar. Durant el ascenso hemos dejado de lado un desvío, en una curva cerrada a izquierdas, que se adentra en el valle de río Chico y que será nuestra opción de salida.

Una vez nos movemos a la altura del cortijo, con la estampa plenamente otoñal de la sierra con sus colores pálidos, marcamos la vista la divisoria de la loma. Y aunque desde aquí se antoja un trayecto a corto, será una subida sin tregua por la extensa rampa que nos separa de la dorsal.
Hasta que abandonamos los últimos pinos aprovechamos la barranquera de uno de los arroyos que caen hacia el valle, será un ascenso acusado pero sin complicaciones.

Una vez dejamos atrás el pinar podemos marcar el rumbo que se nos antoje hasta encumbrar la loma, en nuestro caso marcamos una traza directa hasta un pequeño resalto que nos da acceso a las vistas a dos aguas. Último tramo de fuerte pendiente y el canchal típico de buena parte de las laderas de Sierra Nevada.

Ganada la divisoria, con vistas a la vecina cuerda del Caballo_Tajos Altos, nos toca defendernos de las fuertes rachas de viento que golpean desde poniente, rachas que nos hacen aminorar el ritmo y en lo posible buscar los pasos a resguardo por el flanco de poniente.

El ascenso se reduce a caminar sobre la loma, amplísimas vistas al resto de la sierra y las sierras costeras, a la vertiente del Poqueira y a la coqueta cuerda del pico de las Alegas por la que caminaremos a la tarde.
Así ganamos primero la cota tresmil en el otero sur de Cerrillo Redondo y anotamos cumbre al paso con la misma tónica.

No se aleja mucho nuestro siguiente objetivo, y con una corta traza por la cuerda que los une marcamos nuestro segundo tresmil en la cima del paredón del Tajo de los Machos.
Aquí por fin abrimos vistas a la alargada cuerda desde el Caballo al Tozal del Cartujo, continuando por la cabecera del valle del río Lanjarón y el Refugio Elorrieta. Completamos la visual con el macizo central de la sierra y sus tres baluartes, Veleta, Alcazaba y Mulhacén.
En panorámica visual finalizamos con el Alto del Chorrillo y los pinares que despiden a la sierra sobre Capileira.

Ahora bajamos la mirada a la raspa que desciende al este, apuntando al Poqueira y que mantiene continuidad sobre la loma de las Alegas. Descenso directo, a discreción, sobre terreno pedregoso por la Loma de la Casilla de los Moros, agradeciendo al fin el paso por el collado que nos da paso a las Alegas.

Desde el collado, una escueta trocha nos remonta de forma suave hasta sumar cota y vistas en el pico de las Alegas. Hito de paso que nos marca un nuevo descenso por la directa hasta el desahuciado Refugio Forestal del Cebollar.
Caminamos ya inmersos en la cabecera de valle de río Chico.

Nos planteamos, para finalizar, el cierre y enlace con el carril de Puente Palo. Sabemos de la ausencia de vereda o trocha marcada hasta el vadeo de río Chico, desde el vado si tendremos una traza clara hacia nuestra salida.
En otra ocasión hemos optado por continuar al sur, a media ladera y campo a través pero sin excesivas objeciones a excepción de caminar fuera de pista, conectando con una traza algo marcada que desciende en dirección opuesta y que va buscando el vado.

Pero hoy nos decidimos por un descenso más directo, salvando el fuerte desnivel desde el refugio hasta río Chicho de una tacada, prácticamente es un descenso escalonado aprovechando el agarre del matorral bajo que se extiende por la ladera.

Una vez salvamos las aguas de río Chico, con el atardecer cayendo sobre nosotros, caminamos de forma cómoda por la vereda que nos lleva al enlace del carril. Sólo apuntar que en sus últimos metros la vereda cruza una zona embarrada, poco antes de salir a pista y poder cerrar nuestro trazado de vuelta al Área Recreativa de Puente Palo.

Nos vemos en las montañas.