Cerro Alcuza. Circular

Esta es una de esas rutas de entrenamiento cercanas a Málaga capital que, además de esta ventaja, tienen la particularidad de tener durante todo su recorrido unas inmejorables vistas. Y es que Málaga tiene la facilidad de contar con numerosos cerros con estas características bastantes cercanos a la costa.
Para comenzar a caminar, hemos avanzado el vehículo a la entrada oeste al Parque Forestal Ciudad de Málaga, junto a la finca La Pola. Todo el camino está, salvo en un pequeño tramo asfaltado, pudiéndose llegar con el coche con facilidad aunque como en principio no conocíamos la zona, algún ascenso nos hizo temer que no fuese así, pero como digo, se llega bien a la zona en que aparcamos el vehículo.
Desde ahí, se toma una pista donde encontramos un pozo de agua, pero rápidamente nos desviamos para empezar una subida sin tregua por una barranquera en la que la impresión es que puedes caer hacia atrás por el grandísimo desnivel que tiene.
El esfuerzo del ascenso se recompensa por las vistas, que a medida que subimos se hacen impresionantes. Primero de la bahía y el puerto, de la zona oeste de Málaga (Puerto de la Torre, Alhaurin..) , de la zona este, y mas tarde, veremos bajo los pies de los montes de Málaga , la Presa del Limonero, e incluso, en la zona mas alta, El Pantano de Agujero.
Todo es ascenso rápido hasta llegar al Alcuza, aunque las demás rampas no serán tan fuertes como la primera. Allí, en el cerro, encontramos un vértice geodésico que nos indica que nos encontramos en la cima.
Desde ahí nos dirigimos a otro cerro en el que divisamos unas antenas. Unos corredores nos dijeron que le llamaban de la caseta, pues aunque es mas alto según las indicaciones del gps y de la vista, no tiene nombre conocido.
Desde allí hacia el norte fuimos a un tercer cerro que tiene una forma plana como con forma de era, por eso decidimos llamarlo cerro plano.
La vuelta es progresiva y discurre muchos tramos por carril por lo que resulta muy cómoda . A la bajada, visitamos las ruinas de un antiguo cortijo, que nos abrigó del aire a la hora de la comida. Impresionaron el porte de los árboles de la que debió se la entrada del mismo. También visitamos unas antiguas minas de cobre abandonada. Hay que tener cuidado, pues hay galerías en el suelo que no están tapadas y son como pozos. En otras, sin embargo, se puede pasar incluso aunque sea pequeña.
En resumen, para unas horas de entreno, es una ruta cercana que está bien