Chandrexa: Ruta da Ferrería - Teixedo - Alto de San Mamede

Bonita ruta. Se empieza siguiendo el curso del sendero de la Ferrería, justo en el puente que cruza el río Navea en el brazo más al Norte del embalse de Chandrexa.
El camino es una pista de tierra amplia, apta para turismos, hasta alcanzar, a los 1.500 m, el área recreativa de Santa Cruz. Seguimos por la pista, ahora algo más estrecha pero muy llana, siempre dejando el río Navea a nuestra izquierda. A medida que avanzamos, el camino se encajona más entre las suaves montañas de esta zona del macizo central, hasta alcanzar, aproximadamente a los 4 km de ruta, las ruinas de la antigua herrería que da nombre a este tramo del camino.
A partir de ahí se continúa, ya por un estrecho sendero, hacia el poblado abandonado de Teixedo, que se comenta fue habitado por maquis en la posguerra.
El camino discurre a través de una bonita zona boscosa, predominando el carballo, y siempre pegado al arroyo. La humedad y la sombra es alta y provoca que troncos y rocas estén cubiertos por espesas capas de musgo, creando un ambiente espectacular.
Tras 3,5 km se llega a las ruinas de Teixedo. En este punto os recomiendo subir hacia San Mamede por el sendero que se inicia pasada la última casa que tenemos a la derecha (el que figura en el track de bajada), y no por el atajo que empleé y que está lleno de zarzas.
Tras una continua subida en zigzag a través de un joven souto, se alcanza la pista que delimita una plantación de pinos y bidueiros, y que por tramos se empina considerablemente. Siguiendo la pista, y disfrutando de cada vez mejores vistas de la sierra de Queixa, se alcanza la cima de San Mamede, a 1616 m, coronada por una pequeña capilla reconstruida a mediados del siglo pasado, pero con indicios de origen a finales del primer milenio.
Las vistas son brutales: desde Cabeza de Manzaneda por el Este, Verín y Xinzo por el Sur, Maceda y las sierras de Peneda (Portugal) y del monte Faro (Pontevedra) por el oeste, y el alto del Rodicio y Montederramo por el Norte… La ubicación estratégica y altitud de este monte le provee de una de las más amplias vistas que se pueden encontrar en todo el macizo central.

Ruta muy recomendable, muy cómoda y sin apenas pendiente hasta Teixedo, y algo más empinada después, pero que se compensa con las fabulosas vistas que se van consiguiendo de la sierra de Queixa, y con la brutal panorámica al llegar a la cima, en San Mamede.