Circo de Montuerto

Circular desde Montuerto.
A continuación escribiré un resumen de la ruta:
Teníamos previsto realizar la ruta el sábado en la mañana, pero después de ver la previsión del tiempo, decidimos realizarla el viernes por la tarde. Un gran acierto, disfrutamos de luz de tormenta pero sin tormenta.

Nos desplazamos en coche hasta Montuerto, pueblo leonés situado a 35 km de la capital. Una vez cogemos el desvío para entrar en el pueblo, tenemos que atravesarlo hasta llegar a un punto donde se encuentran unas pequeñas fincas con animales junto con las últimas casas del pueblo. Ahí podremos dejar el coche sin problema.
Nada más bajar del coche vino en nuestra búsqueda Campanilla, una simpática perrita del pueblo que se apuntó a la aventura.

Comenzamos la caminata después de preguntar a una paisana por el camino, ya que al principio de la ruta debemos escoger entre dos caminos. Nos comentó simpáticamente que debíamos tirar por el camino de la derecha, además de advertirnos que disfrutásemos de las praderas, que ya estaban vestidas de primavera.
Se trata de una pista forestal por la que iremos ganando altura cómodamente hasta llegar a un punto donde nos encontraremos un pequeño refugio, junto con un pilón y una nave de ganado. A partir de este punto, la pista se vuelve sendero, por el que seguiremos ascendiendo hasta llegar al valle, desde aquí podemos observar el circo de montañas que nos rodean y divisar la cresta por la que avanzaremos una vez arriba. Desde aqui, podemos observar el Pico Prado Llano arriba, frente a nosotros, si lo cogemos como referencia, debemos ascender a la cresta por si derecha, si observamos con imaginación, podemos observar un sendero que nos marca la ascensión. Después de este fuerte repecho, llegamos a la cresta, dónde podemos observar las vistas al otro lado del valle, infinidad de cumbres, un puesto de vigilancia de incendios, varias pistas forestales, algún pequeño pueblo y un embalse a lo lejos; me encantaría poder nombrar estos lugares, pero no conozco ninguno de sus nombres.
Continuamos la ruta, avanzando por la cresta en dirección a la primera de la cotas: Peña Corbero (1683 m). Una pequeña ascensión por un terreno irregular, donde e alguna ocasión es necesario echar las dos manos y coronamos el Prado Llano, nuestra cota más alta: 1722 m.
Continuamos siguiendo la cresta hasta llegar a la Peña del Tejo, la tercera de cuatro cotas, a 1682 m. Por último, descendemos ligeramente hasta el alto de las Colinas (1636 m). A partir de aquí comenzamos a descender bruscamente hasta encontrarnos con un sendero que baja por una gran llanura que podemos divisar desde arriba. Una vez en el sendero, lo seguimos poniendo rumbo de nuevo hacia el valle, hasta llegar a la nave de ganado y el refugio. Una vez ahí, finalizamos la ruta deshaciendo el camino forestal que tomamos en el inicio, hasta llegar al punto donde dejamos el coche.

Esta es una ruta de dificultad moderada, hay un tramos de subida exigente y el terreno por el que avanzamos en la cresta es algo técnico, mirada atenta a cada paso, pero sin olvidarnos de parar a contemplar el espectáculo. La primavera y las luces de tormenta hicieron que se viera todo con un poquito de magia. Además de disfrutar de la compañía de Campanilla que sin duda, es una de las perritas más felices y en forma de la zona. (Lo de Campanilla fue cosa nuestra).

Los waypoints están un poco desubicados (se volvió loco el gps)