Circuito a Porracolina

La ruta recorre el macizo del Porracolina desde su estreno este, con el Pico Peñalavalle, hasta alcanzar el Porracolina al Oeste, pasando por el pico Mosquiteru (famoso por hacerse la prueba del km vertical desde Arredondo) y el Alto de los Pipiones. En el descenso también alcanzamos la Porra de Las Hormigas.
-Comenzamos la ruta subiendo en coche desde Bustablao por la carretera a los Machucos (puerto muy duro que ha cogido fama gracias a la Vuelta España) y dejamos el coche a la altura del desvió a nuestra izquierda de una pista de cemento, hay una pequeña zona para dejar algún coche.
-Empezamos la uta en esa pista que nos lleva a la zona de Buzulucueva, hasta que nos topemos con las señales amarillas y blancas de PR a nuestra derecha.
Continuaremos las marcas del PR por terreno kárstico ya, hasta alcanzar el desvío a la izquierda hacia Peña Lavalle 1035m, primera cima del día y un balcón al valle del Asón.
Retrocedemos hasta el PR y seguimos ascendiendo dejando la entrada a la sima del Cueto atrás y al poco el PR termina y seguimos la senda hacia el Mosquiteru.
Afrontamos el repecho mas duro hasta llegar a la segunda cima del día El Mosquiteru 1206m, que es un promontorio de rocas fascinante.
-Seguimos por el cordal hacia el Oeste, pasando un resalte rocoso en el cual tendremos que utilizar las manos, siendo el punto técnico mas complicado de la ruta, ascendemos todo el cordal hasta el Alto de los Pipiones 1343m, tercera cima del día.
-Descendemos unos metros hasta el collado antes de afrontar la subida al Porracolina 1414m y disfrutar no al 100% de las magnificas vistas que nos ofrece por la niebla.
-Descendemos de nuevo al Collado y bajamos dirección norte al Pozuco y la Porra de las Hormigas 1223m, quinta y ultima cima del día. El descenso se realiza por un antiguo PR ya prácticamente sin marcar. Descendemos hasta la carretera y una vez en ella giramos a la derecha y descendemos por ella unos 2.5km hasta alcanzar el punto de salida.
Es una ruta muy bonita con vistas impresionantes, técnicamente salvo el resalte rocoso no tiene dificultad reseñable, la parte antes de llegar al alto de los Pipiones prestar atención a las trazas del sendero, pues de desvanecen.
Es una ruta que no ha de hacerse con niebla y tener cierta experiencia en la montaña y preparación física.