CIRCULAR A CABEZA RENALES DESDE EL ESPINAR-VEREDA SANTA QUITERIA-PUERTO DEL BOQUERÓN-SENDA LA DEHESA-VEREDA DE LA TALANQUERA

Marcha realizada el sábado 23 de abril de 2016
AVISO: Se entiende, que todo aquel que quiera realizar esta misma ruta, asume la responsabilidad que conlleva una actividad no exenta de posibles riesgos o incidentes, en un entorno en el que el sentido común y las circunstancias pueden marcar la diferencia entre pasar un buen día o todo lo contrario.
Una vez más tampoco hoy se han cumplido los pronósticos del tiempo, que daban casi el cien por cien de probabilidad de lluvia, y ni una gota al menos por la zona de la sierra oeste que hemos pateado.

La marcha la empezamos junto a la cruz de piedra que hay al inicio del polígono industrial de los Prados de la Charca. Al medio kilómetro dejamos las últimas naves, que como en tantos otros pueblos de la sierra, presentan un aspecto nada vistoso (por decirlo suavemente). Rápidamente empezamos la subida por lo que empezó siendo una pista, pero que conforme subimos va cambiando a una senda, muy bonita por cierto, y que coincide con la Vereda de Santa Quiteria. Esta senda de unos seis kilómetros hasta llegar al puerto del Boquerón, se va encajonando cada vez más, con el arroyo del Boquerón a la derecha, que baja de lo más cargado, y con un muro de piedra en seco a la izquierda, que sólo perdemos de vista al llegar al puerto del Boquerón. Aquí hemos visto que de frente continua, también con el mismo rumbo sur que traíamos, el camino de Peguerinos, mientras que por la izquierda y un poquito más abajo, pudimos ver la conexión con el camino del Ingeniero, que ya pudimos recorrer en su totalidad, hace un par de años, cuando antes de bajar a San Rafael, decidimos subir a Cueva Valiente. En esta ocasión hemos de regresar a El Espinar, y para ello hemos franqueado en el mismo puerto, a través de un portón metálico, el límite provincial que delimita las provincias de Madrid y Segovia, para conectar con la citada senda de las Dehesas, que primero y durante un par de kilómetros se mantiene en el altiplano, para después de forma bastante brusca iniciar una bajada entre pastos plagados de vacas avileñas negras, que con sus terneros de un color totalmente opuesto al de las madres nos miran con la curiosidad y la ignorancia del fin último (culinario) de su crianza. Por esta otra ladera del macizo de Cabeza Renales tenemos otros seis kilómetros, que ahora son casi todo el tiempo de bajada, desde los mil seiscientos metros del puerto, y con rumbo sur, hasta que poco antes de la carretera Sg-500, tomaremos por la derecha la senda de la Vereda de la Talanquera, que ya no dejaremos en los próximos cinco kilómetros, hasta llegar al Espinar, ahora con rumbo este, y así acabar entrando por otra zona del mismo polígono industrial, por el que salíamos esta mañana. Una ruta, que de hacerla hasta el puerto del Boquerón, de ida y vuelta, puede ser muy apta para familias con niños, y con múltiples opciones y rincones, a cual más bonito, para bajar hasta el mismo cauce del arroyo del Boquerón, que en esta época muestra su mejor cara.