Circular a Santa María de Belsué, Pardina de Ascaso, Usieto y Lúsera, desde la chopera de Belsué

Desde Belsué, nos acercamos por la carretera que une dicha población con Nocito, hasta llegar a la chopera de Belsué, donde aparcamos el coche.

Aquí, iniciamos el recorrido, caminamos unos metros por ancho camino, hasta vadear en un par de ocasiones el río Flumen, que no lleva mucho caudal.

Unos metros más adelante, llegamos a un cruce de senderos, donde iniciamos la circular en sentido de las agujas del reloj, alcanzando rápidamente el despoblado de Santa María de Belsué, que visitamos, para continuar entre muros de piedra seca, hasta cruzar por un puente metálico el cauce del río Flumen.

Después, continuamos por un bonito sendero que nos lleva por medio del bosque, cerca del cauce del río Flumén, hasta alcanzar los restos de la pardina de Ascaso, donde abandonamos el "Camino Natural", para seguir por un sendero herboso, por el que volvemos a introducirnos en un pinar, hasta llegar a la confluencia del barranco Varón en el río Flumen, punto en el que vadeamos el río por tercera vez.

A partir de este punto, comenzamos a ganar el poco desnivel que tiene el recorrido, donde los pinos se entremezclan con los robles, mientras el barranco va formando pequeñas cascadas.

Cuando la pendiente finaliza, atravesamos una zona de pradera, salpicada con pinos, donde alcanzamos un cruce de senderos, en el que de momento, continuamos todo recto para visitar primero los restos de la ermita de Usieto y un poco más adelante, las ruinas de la pardina de Usieto.

Después, regresamos sobre nuestros pasos, cruzamos el barranco por una pasarela de hormigón, para continuar por medio del bosque por amplio camino herboso, dejando a nuestra derecha otro camino que sube al Tozal de Lúsera (la parte final no hay camino).

A medida que avanzamos, el pinar va dando paso al piorno, el camino se va estrechando hasta convertirse en un sendero, por el que avanzamos hasta una bifurcación, donde en caso de seguir rectos iríamos hacia el despoblado de Ibirque, pero como no es nuestro caso, tomamos el que en claro descenso nos ha de conducir hasta Lúsera (derecha).

Siguiendo el sendero, vamos bajando disfrutando de las vistas hacia el Tozal de Guara, tapado parcialmente por las nubes, paralelos al barranco de Alaña, que forma preciosas cascadas de Toba, por un bonito sendero salpicado de pinos y robles, por el que poco a poco nos vamos alejando de la compañía del barranco.

Cuando salimos a cielo abierto, ya podemos ver Lúsera, al que llegamos en poco más de cinco minutos, tras alcanzar de nuevo el "Camino Natural". Damos una vuelta por este pequeño núcleo, que vuelve a estar habitado, para bajar junto a la iglesia por un sendero, en el que atravesamos la pista de acceso, para continuar entre matorral bajo, disfrutando de las vistas hacia Cienfuens.

Tras realizar una suave subida, a lo lejos ya vemos el despoblado de Santa María de Belsúe, al que nos dirigimos en ligero descenso, acompañados en sus últimos metros por el río Flumen, cerrando la circular y retrocediendo sobre nuestros pasos, realizando un par de vadeos, hasta llegar al aparcamiento de la Chopera de Belsué.