Circular a Temisa por sus laderas 06112023

Una jornada entretenida que tenia como objetivo probar el estado de mis rodillas, y nada mejor para hacerlo que someterlas a un sube y baja por las laderas del Valle de Temisa que me queda cerquita de casa.
Partí desde la playa de la Garita al encuentro del desagüe del barranco de Temisa, ascendí por la pista que marcha paralela a su cauce para alcanzar la carretera (LZ-1) cruzarla y pasar al otro lado (saltando la valla).
Continue paralelo al cauce hasta que los muros de piedras me hicieron desviarme cruzando la zona de Trujillo hasta la pista de tierra que conecta Tabayesco con la zona de Tope Tegaso.
Por la pista accedí al pueblo y me fui a la izquierda por la calle Chafariz hasta el hotel rural que hay en la entrada. En las inmediaciones de la parada de guaguas me pase al camino de tierra que asciende en dirección al depósito regulador de aguas de Tabayesco y unos metros antes de él empece el primer ascenso.
Empezaba a llover, la primera del día, y yo avanzaba por El Lomo del Perenquén sacando el chubasquero y rapidito por si me entraban las dudas. Empece la subida sabiendo que no me iba a encontrar vereda alguna que me guiara, el viento aceleraba su aliento para incrementar mis dudas: casi no había empezado aún y podía retroceder, en casa podía prepararme un café bien cargadito y calentito.
Pero yo seguí, voy avanzado por el lomo del Perenquén, es un trayecto corto, me decía, sólo es cuestión de paciencia. Sigo con mis bastones impulsando pisadas hacia el frente con el fresco del alisio, la intensidad de la lluvia ahora ha menguado pero el viento sigue impertinente.
Llego arriba, Suerte de Los Negros, la idea inicial de pasearme por la cabecera de El Vallito la quite de la lista de pendientes y continue avanzando con la idea de llegar a los restos de la vivienda que hay en la zona.
Ubicado entre los muros de piedra de la vivienda, parece ser que aborigen, me tome el primer respiro del día e inicie la segunda etapa, había subido ahora tocaba bajar.
Continué por el sendero que desciende hasta la degollada para después seguir por la cabecera del barranco de La Luciana hasta alcanzar el Lomo de bajada: La Escalerita.
Unos metro mas abajo de la vivienda ubicada en esta zona me enganche a la vereda que desciende por este lomo, esta es mas trotada y hay ruta para dejarse llevar. Voy descendiendo sin que que aparezcan mas dificultades que las propias de la pendiente, con cuidado voy sorteándolas hasta alcanzar El Morrete y lo que viene a continuación se sortea con paciencia. Un tiempito después estoy sobre el asfalto de la carretera LZ-207, yo me giro a la izquierda y continuo en dirección a Chafariz, toca de nuevo paciencia antes de volver a subir.
Hay que subir de nuevo y me ubico en un murito blanco que señala una canalización bajo la carretera para que el agua descienda al cauce del Valle sin generar dificultades. Un poquito antes de la vivienda de Don Manuel (con mayúsculas), que es la que está mas próxima al barranco de Chafariz, el murito me dice que por ahí hay que subir para ir bordeando el Cercando del Marqués y continuar hasta un poco mas arriba de El Morrete, que hace un rato ya dejamos atrás, menudo trazado mas disparatado!
Este tramo ahora parece que marcha sobre una autopista, tiempo atrás me costaba un h… subir por aquí pero los cazadores que frecuentan esta zona han habilitado el sendero de toda la vida y ahora no aparecen ni dudas. Se sube muy bien, algunos tramos generan dudas pero se solventan curioseando por los alrededores. Llego a La Escalerita, terreno pisado hace una rato, y asciendo hasta la vivienda para respirar y engullir nutrientes e hidratación.
Continuo ascendiendo por la pequeña meseta que da término a la Pequena hasta alcanzar la Peña del Tajosé para luego, ya en la pista, pasar entre la Peña de Los Pilones y la de La Pequena para dirigirme hacia los alrededores de la Peña de la Gallina para localizar el sendero de bajada por El Agujero.
Al pie de la señalética que indica las opciones de la zona se da inicio a la vereda que desciende por este lado hacia el estanque de Chafaríz. Este sendero baja zigzagueando para evitar el hueco en la pared rocosa de esta ladera, El Agujero; al principio marcha recto alejándose un poco para luego iniciar un zigzagueo en descenso hasta salvar la depresión rocosa y continuar recto hasta el barranco de Chafariz.
No me entretuve en el estanque, avance por el cauce hasta la carretera para descender a la pista que marcha por el Valle. Ahora tocaba despedirme de la ladera sur y entretenerme en la del norte, para ello una vez ubicado en las proximidades del cruce de barrancos - hay tres: Chafariz, La Madre del Agua y el Cuchillo-, me dirigí a este último para ascender, última subida, por su ladera hasta la degollada que separa Temisa de Malpaso.
Tocaba subir hasta Faja y lo hice por la vereda habilitada en el filo de la montaña que da a este lado.
Una vez arriba continue por la vereda que marcha por el borde la montaña de cara al Valle de Temisa, la vereda continua bordeando la meseta de cara a los barrancos de Los Rincones para continuar por Tegaso y descender por uno de sus lomos hasta la zona de Trujillo. Lo que quedaba de la jornada era acercarme a Arrieta y concluirla llegando a casa.
Las rodillas, por cierto, se portaron bien.