Circular al Gamoniteiru desde el Angliru

La ruta la realizamos el martes 9 de junio, para estrenar el verano montañero. Despues de los exámenes había ganas de soltar las piernas. El tiempo no era el ideal, daban lluvia para la tarde y decidimos optar por una ruta corta, y nos inclinamos por el techo del Aramo. Y ahí que nos fuimos, el tiempo no respetó y nos impidió coronar también el Xistras, pero bueno, son cosas que pasan…
COMO LLEGAR
Arrancamos del Angliru, para llegar tomamos la A-66 y nos desviamos hacia Morcín-Riosa, siguiendo en todo momento los carteles hasta estas localidades por la N-630. Tras pasar Santa Eulalia de Morcín, nos desviamos a mano derecha por la AS-231 hacia La Foz-Riosa. Por esta carretera llegaremos a La Vega (capital de Riosa) y en pleno pueblo nos encontramos con indicaciones hacia el Angliru, que debemos seguir en todo momento. En la cima hay un enorme aparcamiento.
DATOS TÉCNICOS
Distancia: 12.1 kms
Dificultad: Moderada
Desnivel positivo: 760 metros
Cota máxima: Gamoniteiru (1791 metros)
Itinerario: Circular
Niños: Si están de andar sí, no hay peligro pero las subidas son explosivas
Señalización: Ninguna, es intuitivo, pero ojito cuando baja la niebla
NOTA IMPORTANTE: Es frecuente que caiga la niebla sobre el Aramo, desaconsejo totalmente caminar por la sierra entonces, son todo cuestas y sería tremendamente fácil perderse.
LA RUTA
Salimos muy pronto de Avilés, y a las 8 y media estábamos ya subiendo el Angliru, pero una densísima niebla y unas vacas en medio del puerto nos retrasaron y cansaron mucho, así que paramos en un mirador en plena subida a hacer unas fotos y descansar un poco. Las Ubiñas aparecían imponentes sobre el mar de nubes.
Y a las 9 y cuarto estábamos en el aparcamiento de la cima del Angliru, viendo los 3 de los 5 grandes que ya coronamos: Gamonal, Moncuevu y Barriscal. Para hoy teníamos como objetivo alcanzar los otros dos: Gamoniteiru y Xistras, muy cercanos uno del otro. (Las fotos las copio de la última ruta)
Nos preparamos y a las 9 y media arrancamos bordeando el Moncuevu y superando un duro repecho que nos dejaba las primeras vistas de nuestro objetivo del día, el Gamoniteiru con sus características antenas. A la izquierda el Barriscal y más al fondo tras un mar de nubes y ya en el Macizo de las Ubiñas el conjunto Tapinón-Siegalavá y justo a la derecha de ambas Peña Llana.
Y tras bajar a Vega Barrera y subir el duro repecho de la Campa Teya (150 metros de altitud ganados en apenas 700 caminados) nos sentamos a descansar y beber un poco de agua, amén de comer unos frutos secos para reponernos del esfuerzo. Mirando hacia atrás tenemos a la izquierda el Moncuevu, al fondo y con la cima tapada por la niebla la Gamonal y a la derecha el Glayiru o Barriscalín, antesala del Barriscal.
Y dándonos la vuelta aparecen ya mucho más cercanas las antenas del Gamoniteiru, y a la izquierda el Xistras. Lo malo que vemos un valle entre medias, y eso desmoraliza bastante. Lo bueno es que vemos perfectamente marcada la pista que lleva a su cima, me recuerda un poco al Faro de las Cíes y la verdad es que facilita mucho la subida, apenas te enteras y en un momento te plantas arriba.
A media subida hacemos un breve alto en el camino, la perspectiva del Macizo de las Ubiñas sobre el mar de nubes es increible, parecen flotar…
Os enuncio de izquierda a derecha lo que va saliendo: Conjunto del Tapinón-Siegalavá y Peña Llana, el Fariñentu medio tapado por el coloso de Peña Rueda, y a su derecha Peña Ubiña al fondo y los Fontanes justo a su derecha; debajo de estos tenemos el Ranchón y tras una pequeña hondonada los Huertos del Diablo, perdiéndose luego toda la montaña por debajo de 2.100 metros hasta llegar a Somiedo por debajo de las nubes.
Alcanzamos la cima del Gamoniteiru (1.791 metros) y su cruz tras enlazar con la carretera y subir unos metros por prado; la cima no tiene ningún encanto con todas las antenas detrás, la verdad sea dicha… y nos damos cuenta que las nubes subieron en las Ubiñas y en la parte occidental de Somiedo (Peña Orniz, Albos…) así que solo nos quedan vistas de su parte más oriental, destacando el Cornón con su pirámide perfecta hacia la izquierda de la imagen, y a su izquierda Cogollo Cebolledo y Moscoso. A su derecha y en un plano más cercano destaca Peña Negra, y ya no pude reconocer nada más.
Y dándonos la vuelta sobre nuestros pasos vemos la Sierra del Aramo en su conjunto, o al menos su parte central, con sus infinitos surcos calizos (como vereis con niebla es terriblemente fácil perderse en ellos). De nuevo vemos Moncuevu, Gamonal y Barriscal.
Nos hacemos unas fotos comemos algo y cuando íbamos a reemprender la marcha hacia el Xistras de pronto se mete la niebla y empieza a llover, así que bajamos por la pista por la que subimos y seguimos con mucho cuidado el track, la verdad es que sin GPS creo que nos hubiéramos perdido, porque las referencias son nulas y es todo subir y bajar y sin saber en ningún momento hacia donde. No paramos nada hasta pasar el Barriscal que hacía como tapón, al menos para la lluvia, y solo hice una foto aprisa y corriendo de las cabañas de Veguellina, espectaculares bajo la niebla.
Y tras rodear dicho pico dejó de llover, y nos quedamos a solas con una densa niebla. Una charca para que beba el ganado se convierte en un lugar fantasmagórico en estas condiciones, creedme.
Y destacar también los sustos que nos daban las vacas, a las que veíamos solo cuando estaban muy cerca por la niebla y no se sentían muy cómodas con tal cercanía, y es que no se les veía hasta unos 5 metros y el susto era mutuo.
Y por fin llegamos al coche, la bajada un rosario hasta la Cueña las Cabres donde ya dejaba de haber niebla porque se veía poquísimo y había que ir superdespacio. Y nos fuimos a casa con la imagen de las Ubiñas flotando sobre las nubes en la retina pero con el sabor amargo de la lluvia, la niebla y el trabajo a medio hacer, con la espinita clavada del Xistras, al que seguro que volvemos para acabar de una vez con los 5 grandes del Aramo.