CIRCULAR AL MONTAZO Y EL CAÑO DEL AGUADERO (P.N. SIERRA MÁGINA)

Soberbia ruta en la que se corona una montaña no muy conocida del Parque Natural de Sierra Mágina como es el Montazo, de apabullantes vistas, a la que abordamos siguiendo uno de los senderos más impresionantes que esconde este espacio natural como es el Cordel del Camino del Montazo, antiguamente usado por los neveros para acceder desde el pueblo de Bedmar a los abundantes pozos de la nieve ubicados en las altas cumbres de esta sierra y que eran uno de los motores económicos de esta región en los siglos pasados. Esta majestuosa obra de ingeniería rural, que sin cuidado alguno se mantiene casi inalterable al paso del tiempo, nos sorprenderá con sus múltiples revueltas y zigzagueos mostrando los vetustos muros de mampostería en seco que le dan sustento.
Aparte del Montazo y su camino de acceso, esta ruta sorprende por los diferentes parajes que se atraviesan en ella, como el agreste Barranco del Mosquito, de caprichosos pliegues orográficos que muestran los estratos que conforman sus verticales paredes y en cuyo lecho nos sumergimos en un precioso adelfal. El Caño del Aguadero, bucólico enclave donde la alegría del agua fresca siempre acompaña a este edén serrano. La verticalidad del Barranco del Perú contemplada desde la Majada de la Casilla, fantástico balcón al abismo. El Sendero de Santa María, de impecable factura que nos lleva a travesar la Cañada homónima, de agreste y salvaje imagen, que le da una singular panorámica alpina a este rincón maginero. Y sobre todo, las continuas panorámicas de esta sierra, singular y altiva isla caliza en el Valle del Guadalquivir que de nuevo nos atrapa con su maravilloso magnetismo.
Iniciamos esta ruta en la pista que conduce al Caño del Aguadero desde Cuadros, unos 2 kms más adelante del Area Recreativa, tras pasar el carril que da acceso al Cortijo de los Chuchos, en un ensanche que nos encontramos al dejar atrás éste.
Descendemos para tomar el mencionado camino tras abrir la cancela y que pasando junto a un olivar nos conduce inmediatamente a lo que queda del Cortijo de la Majá de los Chuchos o Cortijo del Valle como aparece en algunos mapas. Desde aquí seguimos un sendero que tras atravesar una coqueta pradera sube a un colladete y nos da vistas al Barranco del Mosquito y su confluencia con el impresionante Barranco del Perú. A la derecha quedaría la Lancha del Llanto, escarpada ladera de caliza pura donde es frecuente ver merodear cabras montesas.
A partir de aquí se muestra el majestuoso esplendor del sendero que llevamos, el Cordel del Camino del Montazo, cuyos magistrales muros de mampostería se dejan ver en el descenso hacia el cauce del Barranco del Mosquito, donde de repente nos vemos inmersos en un precioso adelfal que lo tapiza en una frondosa galería de cobertura vegetal que por momentos hace difuso el sendero aunque al avanzar curso arriba por este angosto barranco es sencillo retomarlo hasta que abandona el cauce del mismo por su orilla natural izquierda (derecha en nuestro sentido de la marcha).
La senda inicia ahora un zigzagueo en ascenso que nos hace ganar altura sobre el Barranco del Mosquito mostrándonos su agreste y hermosa fisionomía de imponentes tajos que dejan a la intemperie la desnudez de sus estratos, mostrando una multitud de pliegues de gran belleza plástica que logra embaucarnos con su salvaje atracción. Cada curva, cada recodo del camino sirve de improvisado mirador a este barranco pudiéndolo contemplar cada vez en mayor proporción de forma exponencial a la altura que vamos ganando, alternando panorámicas con el Carluco del que nos separa la profundidad del Barranco del Perú.
A medida que ascendemos por la ladera norte del Montazo el sendero va perdiendo entidad a la vez que va suavizando su moderada pendiente mientras llega a unos magníficos ejemplares de encinas centenarias tras las cuales atravesamos unos prados y llegamos a la Majada de la Casilla, precioso lugar donde el sendero parece finalizar al llegar a unos tajos. Este enclave nos sorprende por servirnos de privilegiado mirador sobre el Barranco del Perú, que discurre centenares de metros bajo nosotros así como del Carluco y la Corona.
Desandamos nuestros pasos hacia el este unos metros y dejamos el sendero para ya campo a través dirigirnos en fuerte ascenso primero hacia el este y luego hacia el sur para ganar la cuerda del Montazo sin excesivas dificultades salvo el incremento de la pendiente y el consiguiente esfuerzo hasta poder coronar finalmente el Montazo (1603 m).
Las vistas desde la cima son de lo mejorcito que nos puede brindar Sierra Mágina: Hacia el sur se nos queda el Carluco y La Corona así como el Aznaitín, el Monteagudo, la Serrezuela de Bedmar y La Golondrina, además de la Depresión del Guadalquivir donde se erigen altivas Ubeda y Baeza como máximos exponenes de la comarca de La Loma. Hacia el oeste destaca el Cárceles. Al sur una buena parte de la Cuerda de Mágina y hacia el este los Morros de Camaramarila.
Seguimos la cuerda del Montazo hacia el sur ya siguiendo un sendero más definido que nos lleva a la Peña de las Hoyas, donde es imprescindible recrearse con sus panorámicas de este afloramiento rocoso, y tras ella llegamos a un collado donde el sendero se divide, tomando nosotros el sendero de la izquierda que discurre paralelo en su inicio a una valla y que en dirección SE nos conduce en suave ascenso por unos bellos prados hasta el Refugio del Caño del Aguadero, bajo el cual encontraremos el Caño del Aguadero propiamente dicho, fuente ubicada en un paradisíaco enclave a la sobra de unos chopos donde es imprescindible una parada prolongada en tan agradable lugar.
Tomamos ahora la pista del Aguadero, amplio camino que viene desde Cuadros y que ahora seguimos en descenso durante casi 5 kms pasando junto al Hoyo de la Laguna y bajo los Morros de la Camaramarila dando vistas al impresionante Barranco del Mosquito en un cómodo trayecto donde las continuas vistas y algún imponente ejemplar de pino laricio junto al camino amenizan el avance.
Al pasar una barranquera bajos los Morros de la Camaramarila hemos de estar atentos a la izquierda del camino puesto que tenemos que tomar un sendero que se inicia con una pendiente acusada. Es el conocido como el Sendero de Santa María, sendero que nos permite recortar varios kilómetros de tediosa pista y que nos deleita con sus magníficas hechuras de recios muros de mampostería que nos conduce en descenso en un primer momento hacia el norte por la loma y posteriormente vira hacia el este para sumirnos en la espectacular Cañada de Santa María, agreste y amplio barranco de aspecto alpino donde el sendero discurre por su gran pedrera hasta levarnos a una pista que ahora ya seguimos hacia el norte y que confluye por la pista principal, la cual seguimos manteniendo el descenso y que tras pasar por el Cortijo Alto del Valle nos conduce a nuestros vehículos poniendo así el punto y final a esta preciosa incursión por Sierra Mágina.