Circular Arucas - Casablanca - Azuaje - Lomo Blanco - Los Dragos - San Andrés - El Puertillo - Cruz de Pineda - Arucas

Este paseo está basado en la ruta descrita por en Toni Vera en https://www.wikiloc.com/hiking-trails/el-pagador-los-dragos-azuaje-las-canales-25692966. Mientras él la hace circular desde El Pagador, nosotros la comenzamos y acabamos en Arucas y omitimos el tramo que baja por el centro del cauce del Barranco de Azuaje desde el molino de agua (cerca de Casablanca) hasta San Andrés. En nuestro caso añadimos los tramos “Arucas - Molino de Agua en Azuaje” y “San Andrés – Arucas”.

El objetivo de esta ruta era volver a recorrer los senderos de la zona de la desembocadura del barranco Azuaje y Lomo Blanco, senderos que no transitábamos desde hace más de quince años, además de explorar dos senderos de una de nuestras zonas preferidas de Gran Canaria: “Los Canales” y “Los Dragos – El Roque”.

El tramo desde Arucas hasta Casablanca lo hemos hecho tantas veces que ya lo consideramos como “tramo de enlace”. Un tramo que partiendo desde la calle Acequia Alta y bajando por el Camino del Árbol Bonito nos lleva a El Hinojal y desde allí, atravesando el barranco de Los Palmitos, a Cambalud, Los Dolores, Presa del Lomito y, finalmente, a las inmediaciones del campo de fútbol de Casablanca. Son 5 km que se completan en aproximadamente una hora.

La “diversión” comienza bajando al fondo del barranco Azuaje desde Casablanca por el camino de “La Trinidad”. Con cierta dificultad por la maleza y el riachuelo, atravesamos el cauce hasta alcanzar el lateral derecho de la casa del molino desde donde parte el sendero de ascenso a el Lomo Blanco. Si bien el sendero es practicable, en algunos tramos se hace dificultoso por la vegetación que invade el camino (se nota que no se transita mucho por él). Poco después de abandonar el molino llegamos a un alpendre que sortearemos a la izquierda. Lo comento porque es fácil equivocarse y desviarse en este punto. Poco antes de llegar a la cima el sendero queda oculto por un desprendimiento de una pared de piedras junto a él. Si bien se puede pasar por este tramo sin especial dificultad ni peligro (vamos saltando de piedra como si estuviéramos en la playa) no deja ser intimidante el mirar hacia la pared y pensar que puede ocurrir otro desprendimiento en cualquier momento. Dado que en esa parte el sendero tiene forma de “U”, podemos sortearlo subiendo en línea recta teniendo cuidado de no quedar “ensartado” en alguna tunera.

Una vez en la carretera del Lomo Blanco, subimos unos metros para desviarnos a la derecha y atravesar perpendicularmente el lomo en dirección oeste hacia el barranco del Pagador. Cruzamos el barranco por un sendero bien marcado hacia la zona de Los Dragos. En esta zona el barranco puede atravesarse en poco tiempo y sin dificultad ya que éste no tiene la profundidad que adquirirá tan sólo unos pocos metros más abajo, tal y como comprobaremos más adelante en nuestra ruta.

Al llegar arriba giramos a la derecha para acceder al “Camino de Los Dragos”. En su parte inicial este camino pasa entre palmerales y bonitas villas decoradas con cactus y buganvillas para luego adentrarse en una extensa vega de fincas de plataneras, la mayor extensión de este cultivo en la Villa de Moya. Según reza un cartel informativo al comienzo del sendero, se cree que el nombre del caserío de Los Dragos se debe a que en la antigüedad predominaban los dragos en esta zona. A pesar de que la preocupación por proteger esta especie vegetal se remonta al siglo XVI, actualmente se pueden ver muy pocos ejemplares de este árbol en la zona.

Al llegar a la punta de la loma, el camino de tierra se torna en un sendero descendente, empedrado y zigzagueante denominado “Camino de los muertos” desde donde se puede disfrutar de maravillosas vistas de la costa (zona de El Altillo y Charco de San Felipe). A la llegada al caserío de La Cueva giramos a la derecha para tomar el sendero que nos permitirá cruzar de nuevo el barranco del Pagador en dirección al Lomo Blanco. A pesar de la abundante vegetación, el paso por el fondo del cauce en este punto es totalmente practicable pasando por auténticos “túneles vegetales”.

El sendero de subida acaba en el acueducto del Lomo Blanco en la zona llamada “Los Canales”. Este es uno de los dos acueductos del municipio de Moya (el otro es el de Trujillo). El acueducto del Lomo Blanco data del siglo XX, tiene una altitud de 184m, está construido con cuatro pilares de piedra y cal y su canal, la acequia por donde fluye el agua, está hecho de madera de palma.

Tomamos a la izquierda la carretera del Lomo Blanco que, transcurridos unos metros, se convertirá en pista de tierra. La pista transcurre por el mismo borde del barranco Azuaje lo que nos permite tener una inmejorable panorámica “aérea” de su desembocadura. Destacan las cuidadas fincas de plataneras de la parte final del cauce.

Al llegar al final de la loma recomendamos desviarnos a la izquierda para asomarnos a la cara oeste y disfrutar de la vista de la costa de San Felipe y de la montaña de Guía/Gáldar. Antes de reincorporarnos al camino, podremos asombrarnos con un gigantesco estanque que destaca en la zona. Formando un cuadrado de unos 60 metros de lado, fue excavado en medio de la loma en el siglo XIX y todavía está en uso. A pesar de que su pared más baja a nivel del terreno tiene una altura de dos metros, alguien ha puesto un par de piedras en forma de escalera junto ella lo que nos permite asomar la cabeza y maravillarnos, sin peligro, con esta magnífica obra de ingeniería hidráulica.

La pista de tierra se torna en una pista de hormigón y serpentea en bajada por la punta de la loma hasta el fondo del barranco. A mitad de la loma, y justo antes de un cartel y una cadena que nos indica que a partir de ahí entramos en propiedad privada, debemos desviarnos a la izquierda por un sendero que nos llevará al antiguo campo de fútbol de San Andrés en el mismo centro del cauce. El sendero es practicable sin mucha dificultad pero hay que tener cuidado de no tropezar en su parte final pues, a pesar de que en esta parte el camino está empedrado, la erosión por las escorrentías de agua se ha llevado parte de la tierra del sendero y deberemos fijarnos bien e ir pisando en las piedras que han ido quedando.

Antes de tomar rumbo a la Ciudad de Arucas podemos acercarnos a la costa y apreciar la desembocadura del barranco de Azuaje para luego tomar a la derecha toda la línea costera atravesando los barrios de San Andrés y Quintanilla hasta llegar al Puertillo. Desde ahí, tomamos el otro “tramo de enlace” subiendo por el cauce del barranco de Bañaderos (atravesando algún que otro intrincado pero transitable cañaveral), abandonándolo a la altura de la depuradora de aguas residuales y continuando por el Camino Viejo del Porrón hasta llegar a Cruz de Pineda. Allí tomaremos la calle Manuel Hernández Pérez que abandonaremos a la derecha hacia la calle José Suárez Suárez para incorporarnos a la calle del Hinojal. Casi al final de esta calle tomamos una pista de tierra a la izquierda que finalmente se tornará en camino que comienza en una zona rocosa justo antes de una casa (a los 19,5 km de la ruta) y que nos llevará hasta la carretera de Trasmontaña (concretamente en la parte del Paseo de San Patricio) y desde allí hasta Arucas.