Circular-Campo de las Beatas-rio Guadaira-Castillo de Marchenilla-Parque San Francisco- Pelay Correa-Castillo-Campo las Beata

Ruta con bastante sombra, en la zona del parque Oromana hasta el molino de aceña, donde giraremos a la derecha, y desde ahí hasta el castillo de Marchenilla y vuelta hasta el molino de Aceña , no hay nada de sombra, desde ahí ya practicamente hay bastante sobra en el resto de la ruta, son unos 6 km a pleno sol
transcurre por sendas, carriles y carretera y calles
Vegetación la tipica de ribera, eucaliptos, y olivos
Comenzamos aparcando en la AVd. de Portugal, junto a la entrada del parque Oromana, cruzamos la calle y entramos en el parque , nada más entrar a nuestra izquierda nos encontramos el primer molino , Molino de la tapada , giramos a la derecha por la ribera del rio, y atravesamos el parque, primero por un precioso lugar muy bien cuidado pero la vegetación crece a su libre albedrio, a unos 700 metros nos encontramos otro molino, el molino del algarrobo. tiene un azud transitable, pero nosotros seguimos por la ribera arriba, pasamos junto a un puente de hierro y seguimos rio arriba, llegamos al molino de San Juán, y el Molino de Benarrosa, ambos en la otra orilla, pero hay una imagén espectacular de ambos molinos desde esta orilla, seguimos rio arriba y a unos ochocientos metros nos encontraremos el molino el molino de Aceña, en la otra orilla, cruzaremos por su azud, y al pasar el molino veremos a nuestra derecha un manantial de agua, y enffrente los restos del molino de el molino del Kajul ,seguimos doscientos metros y giramos a la derecha en esta zona, hay varios molinos pero estan o privatizados o no queda absolutamente nada de ellos, en algunos sitios encontraremos algunos carteles informativos de los molinos, pero las inclemencias del tiempo han devorado toda la información, ya solo quedan los carteles, a un 1,6 km nos desviamos a la derecha por la colada de Marchenilla, y al fondo vemos los restos de un precioso castillo, el castillo de Marchenilla, a 900 metros nos desviamos a la izquierda y llegamos a la altura del castillo, es privado, seguimos camino por la colada de Marchenilla, hasta la venta el junco ( cerrado) pasamos junto a su terraza y encontramos un pequeño puente de hormigóm. cruzamos por el y llegamos a un carril, seguimos por la izquierda , pasamos junto a un cartel que nos indica el molino de Pared, pero esta privatizado y no se puede ver, seguimos camino y enlazamos con el camino por el que veniamos , seguimos camino hasta llegar de nuevo al molino del Kajul, donde giramos a la derecha y subimos por el parque de San francisco, llegamos al molino de las eras o de san francisco ( se llama así porque pertenecia a una comunidad de Franciscanos, seguimos camino y atravesamos el puente de del tren de los panaderos, , llegamos a la avd de Portugal y giramos a la derecha , seguimos paralelos al rio, atravesaremos el parque de la retama, y seguimos junto al rio , pasaremos bajo el puente del dragón ( precioso) , a unos cien metros a nuestra izquierda veremos el molino de vadalejos bajo, seguimos camino a unos 350 metros en la orilla opuesta dejamos el molino de realaje seguimos y llegaremos a un bosque de eucaplitos y dejamos a nuestra izquierda el molino pie alegre, seguimos por un bosque de galeria a un km y 700 metros llegaremos a las ruinas de los molinos de Pelay Correa, son dos uno a cada orilla unidos por un azud, cruzamos por el y giramos a la derecha, volvemos por un carril muy comodo, volvemos a pasar junto al molino del realaje y llegamos al puente del dragón, giramos a la izquierda pasamos junto al teatro auditorio y subimos a ver la ermita de la virgén del Aguila, el castillo de Alcala de Guadaira y bajamos hasta el puente del tren de los panaderos, ahora al cruzarlo giramos a la izquierda por la avd de Portugal y hasta el coche
La localidad de Alcalá de Guadaíra dista tan solo 15 kilómetros de la capital de provincia, Sevilla. Con gran presencia poblacional desde época calcolítica como lo demuestran los restos encontrados en Gandul.

Con la llegada de los romanos Alcalá quedaría incluida en la provincia Ulterior Baetica, con capital en Corduba (actual Córdoba), y capital regional en Híspalis. El rasgo más destacado del período romano en esta población es la completa reorganización de la economía agrícola, especialmente a partir del siglo I a.C

La economía agrícola se basaba principalmente en el comercio de los productos del campo. Este comercio solía realizarse por vía fluvial, mucho más barata que el transporte por tierra. No sabemos si el Guadaíra fue navegable en época romana, pero la presencia de algunos alfares en sus orillas parece indicar que así fue. Sospechamos que muchas infraestructuras de canalización de agua desde la fuente de Santa Lucía (junto al río Guadaíra) hasta Híspalis fuer realizada por los romanos, a través de un complejo sistema de galerías subterráneas, emergentes a pocos kilómetros de la capital en un acueducto que abasteció a la ciudad durante varios siglos.

Tras la conquista árabe-beréber del s. VIII, el área de Alcalá quedaría integrada en el territorio dependiente de Ishbilia (actual Sevilla). Es precisamente durante este período cuando tenemos las primeras referencias escritas a Alcalá de Guadaíra (Qalat Yabir), aunque todas ellas son bastante tardías. Estos resto se observan hoy en día en su majestuoso Castillo que domina la población, y la defienda, así como a su río.

La importancia de Qalat Yabir como fortaleza del entorno de Sevilla se vio reforzada por su papel en el control del suministro de agua a la capital a partir del siglo XII. En 1172, por orden del Califato almohade se recupera el antiguo acueducto y canalización de agua originada en Santa Lucía, que a partir de este momento volvería a abastecer a Sevilla prácticamente hasta el siglo XIX.

Entre los siglos XIV y XV, Alcalá de Guadaíra desarrolla una importante economía agrícola, centrada en el cultivo de trigo y olivar. La producción de cereales potenció la industria molinera alcalareña, de tal forma que en esta época en el curso del Guadaíra y sus afluentes se construyen numerosos molinos (San Juan, El Algarrobo), además de reaprovecharse algunos ya existentes en época andalusí. La producción de harina permitió también el desarrollo de una importante industria del pan, que hacia el siglo XV abastecía ya a la capital, dando origen al sobrenombre de 'Alcalá de los Panaderos'. En el siglo XV, Alcalá de Guadaíra era ya una de las poblaciones más populosas del entorno de Sevilla, con un poderoso castillo, numerosos habitantes, una sólida economía agrícola y una floreciente industria de transformación.fuente https://www.juntadeandalucia.es/cultura/agendaculturaldeandalucia/planes/molinos-del-guadaira-el-patrimonio-industrial-de-alcala