CIRCULAR CASCADA DE LA BATANERA - PINTURAS RUPESTRES DE SIERRA MADRONA - LA BAÑUELA
near Fuencaliente, Castilla-La Mancha (España)
Viewed 15452 times, downloaded 483 times
Trail photos
Itinerary description
Ruta muy completa y cercana pero a su vez bastante desconocida por estos lares. Se aúna la majestuosidad e ímpetu natural de la Cascada de la Batanera captada en un momento óptimo gracias a las altas precipitaciones de este año, sobre todo en las últimas semanas, junto a la sobriedad e historia que irradian las Pinturas Rupestres de la Cueva de la Batanera y de Peña Escrita. A todo esto le añadimos la subida a La Bañuela, cumbre más alta de toda Sierra Morena, y nos da como resultado un recorrido bastante atractivo y exigente, aunque agradecido en sensaciones, resultado de combinar dehesa y montaña, prado y bosque, historia y naturaleza, líquen y roca,… Polos opuestos que como es bien sabido suelen ejercer una atracción irracional que en este caso embelesa al caminante.
La ruta se inicia en el paraje de La Dehesa, en un área de descanso junto a un campo de fútbol, al que accedemos por una pequeña carreterita asfaltada que tomamos desde la N-420, en el km 101’6, en las afueras de Fuencaliente. Tomamos el llamado camino cervantino, pista que sale a nuestra izquierda en dirección este y que nos lleva en ascenso entre encinas, alcornoques y jara, dejando el Arroyo de La Dehesa que discurre pacíficamente a nuestra derecha. Unos metros después de llegar a un alto, nos desviamos a la derecha justo antes de llegar a un caserío, donde parte un sendero perfectamente habilitado que desciende hasta el cauce del Río Cereceda en el punto en el que sus aguas se embravecen y se desploman desde una considerable altura formando la llamada Cascada de la Batanera o Chorrera de los Batanes, bello salto de agua cuya magia inspiró al mismísimo Cervantes, que en el capítulo XX del Quijote hace pasar a sus protagonistas una noche junto a la Chorrera de los Batanes. Podemos contemplar esta cascada en toda su integridad y esplendor bajando por el margen derecho del río, encajonado en unas paredes de roca desnuda, lisa y resbaladiza, a través de las que desciende un estrecho sendero por el que extremando el cuidado llegamos a la base de esta cascada. Tras captar la bella estampa de esta maravilla natural, salimos de la cascada y observamos en la otra orilla una cueva con su entrada protegida por una reja, es la Cueva de la Batanera a la que llegamos tras cruzar el río por un puente de madera y en la que contemplamos sus importantísmas pinturas rupestres, bella muestra del arte esquemático del Neolítico y que junto al conjunto de Pinturas Rupestres de Sierra Madrona son Monumento Nacional desde 1924. Es evidente que este paraje ha irradiado magia desde los albores de la humanidad.
Seguimos el sendero que asciende en fuerte pendiente en dirección Sureste hasta llegar a una pista que tomamos (obviamos la pista que sale a nuestra derecha, hay que tomar otra que discurre por encima)llaneando al inicio y que tras ascender un tramo finaliza en una explanada. Desde este punto y manteniendo la dirección Sureste que llevábamos encontramos un estrecho sendero que cuesta encontrar y que entre jara desciende hasta el Barranquillo de las Piedras, que recoge las aguas de toda la cara Oeste de la Sierra de Hornilleros y que cruzamos para subir después una fuerte cuesta para conducirnos hasta Peña Escrita, lugar donde se encuentran las pinturas más importantes de toda la zona y a las que accedemos subiendo por un sendero emporlado. Tras contemplar esta auténtica maravilla y la panorámica que se divisa desde este abrigo descendemos hasta el aparcamiento de Peña Escrita. Desde este punto tomamos el carril que está cortado al tráfico por una cadena y que nos introduce en dirección Este en el Barranco de Peña Escrita, cuyo arroyo cruzamos para llegar posteriormente tras una subida al Collado de Piruetanal, donde abandonamos la pista para coger el sendero que nos surge desde el collado en dirección este a través de un pinar de repoblación y que gana altura rápidamente buscando pasar por debajo del Peñón del Escorialejo donde comienza todo un espectáculo de verdor entre musgos, enebros, encinas, líquenes, jara y roca, mucha roca, subiendo progresivamente siempre por la agreste cara norte de la Sierra de Navalmanzano, cuya cumbre, La Bañuela, se deja ver por momentos en la lejanía. El sendero a veces es difuso y es muy fácil extraviarlo, por lo que hay que prestar mucha atención ya que si lo perdemos costaría mucho trabajo progresar por lo abrupto del terreno y la espesura de monte bajo que inunda la zona, además los imponentes cortados y lo resbaladizo de las rocas que encontramos contínuamente harían bastante peligroso no seguir el camino correcto. Digo esto porque hay varios ramales que suben a la cuerda buscando el único pinar autóctono que se puede encontrar en toda Sierra Morena, pero que salvo que se tenga mucho interés en conocer este paraje, no aconsejo tomarlo. No debemos abandonar la progresión por la vertiente norte de esta sierra. Personalmente recomiendo realizar esta ruta con ayuda de un GPS puesto que a partir de la cota 1000 el sendero se difumina y sin este tipo de aparatos puede ser complicado encontrar el camino correcto.
Seguimos ascendiendo trabajosamente manteniendo siempre la dirección Este mientras nos acompañan continuamente las vistas hacia el norte de la agreste cara Sur de la Sierra de Hornilleros y el Barranco de Peña Escrita que contemplamos en toda su extensión desde su cabecera. En la cota 1180 llegamos a un collado donde ya divisamos la cima de La Bañuela, iniciando así el tramo final de nuestra ascensión, primero por una especie de cortafuegos y luego a través de las paredes rocosas en cuya cumbre encontramos su vétice derruido que nos indica la culminación con éxito de esta ascensión a La Bañuela, de 1332 m de altura, y que es la cumbre más alta de la Coordillera Mariánica (Sierra Morena), lo que le da bastante solera y que junto a lo trabajoso de su ascenso nos da una satisfacción especial el coronarla. El nombre antiguo de este pico es “La Mójina”, como aún la llaman las personas mayores de Fuencaliente. Podemos disfrutar unas imponentes vistas, sobre todo hacia el Sur en la que si el día acompaña podemos ver hasta Sierra Nevada.
Iniciamos el descenso desandando nuestro camino hasta el collado antes mencionado en la cota 1180, y desde ahí descendemos ahora por la cara Sur a través de la Vereda del Cambullón, introduciéndonos en una vaguada repleta de brezos y jaras y que conforma la cabecera del Arroyo del Cambullón. La espesura del matorral que nos rodea hace complicado encontrar y seguir la vereda al comienzo. Debemos tener la referencia de que ésta discurre siempre a la derecha del arroyo en su descenso, separándose progresivamente de su cauce, y que desciende posteriormente en fuerte pendiente en dirección Suroeste hasta llegar al Camino de Navalmanzano. Seguimos esta pista en dirección Oeste y tras cruzar el Arroyo de San Juan nos lleva al Collado de Piruetanal y de ahí al aparcamiento de Peña Escrita por la pista. Una vez en el aparcamiento tomamos la pista asfaltada que tras cruzar el Río Cereceda nos conduce hasta el punto inicial de nuestra ruta.
La ruta se inicia en el paraje de La Dehesa, en un área de descanso junto a un campo de fútbol, al que accedemos por una pequeña carreterita asfaltada que tomamos desde la N-420, en el km 101’6, en las afueras de Fuencaliente. Tomamos el llamado camino cervantino, pista que sale a nuestra izquierda en dirección este y que nos lleva en ascenso entre encinas, alcornoques y jara, dejando el Arroyo de La Dehesa que discurre pacíficamente a nuestra derecha. Unos metros después de llegar a un alto, nos desviamos a la derecha justo antes de llegar a un caserío, donde parte un sendero perfectamente habilitado que desciende hasta el cauce del Río Cereceda en el punto en el que sus aguas se embravecen y se desploman desde una considerable altura formando la llamada Cascada de la Batanera o Chorrera de los Batanes, bello salto de agua cuya magia inspiró al mismísimo Cervantes, que en el capítulo XX del Quijote hace pasar a sus protagonistas una noche junto a la Chorrera de los Batanes. Podemos contemplar esta cascada en toda su integridad y esplendor bajando por el margen derecho del río, encajonado en unas paredes de roca desnuda, lisa y resbaladiza, a través de las que desciende un estrecho sendero por el que extremando el cuidado llegamos a la base de esta cascada. Tras captar la bella estampa de esta maravilla natural, salimos de la cascada y observamos en la otra orilla una cueva con su entrada protegida por una reja, es la Cueva de la Batanera a la que llegamos tras cruzar el río por un puente de madera y en la que contemplamos sus importantísmas pinturas rupestres, bella muestra del arte esquemático del Neolítico y que junto al conjunto de Pinturas Rupestres de Sierra Madrona son Monumento Nacional desde 1924. Es evidente que este paraje ha irradiado magia desde los albores de la humanidad.
Seguimos el sendero que asciende en fuerte pendiente en dirección Sureste hasta llegar a una pista que tomamos (obviamos la pista que sale a nuestra derecha, hay que tomar otra que discurre por encima)llaneando al inicio y que tras ascender un tramo finaliza en una explanada. Desde este punto y manteniendo la dirección Sureste que llevábamos encontramos un estrecho sendero que cuesta encontrar y que entre jara desciende hasta el Barranquillo de las Piedras, que recoge las aguas de toda la cara Oeste de la Sierra de Hornilleros y que cruzamos para subir después una fuerte cuesta para conducirnos hasta Peña Escrita, lugar donde se encuentran las pinturas más importantes de toda la zona y a las que accedemos subiendo por un sendero emporlado. Tras contemplar esta auténtica maravilla y la panorámica que se divisa desde este abrigo descendemos hasta el aparcamiento de Peña Escrita. Desde este punto tomamos el carril que está cortado al tráfico por una cadena y que nos introduce en dirección Este en el Barranco de Peña Escrita, cuyo arroyo cruzamos para llegar posteriormente tras una subida al Collado de Piruetanal, donde abandonamos la pista para coger el sendero que nos surge desde el collado en dirección este a través de un pinar de repoblación y que gana altura rápidamente buscando pasar por debajo del Peñón del Escorialejo donde comienza todo un espectáculo de verdor entre musgos, enebros, encinas, líquenes, jara y roca, mucha roca, subiendo progresivamente siempre por la agreste cara norte de la Sierra de Navalmanzano, cuya cumbre, La Bañuela, se deja ver por momentos en la lejanía. El sendero a veces es difuso y es muy fácil extraviarlo, por lo que hay que prestar mucha atención ya que si lo perdemos costaría mucho trabajo progresar por lo abrupto del terreno y la espesura de monte bajo que inunda la zona, además los imponentes cortados y lo resbaladizo de las rocas que encontramos contínuamente harían bastante peligroso no seguir el camino correcto. Digo esto porque hay varios ramales que suben a la cuerda buscando el único pinar autóctono que se puede encontrar en toda Sierra Morena, pero que salvo que se tenga mucho interés en conocer este paraje, no aconsejo tomarlo. No debemos abandonar la progresión por la vertiente norte de esta sierra. Personalmente recomiendo realizar esta ruta con ayuda de un GPS puesto que a partir de la cota 1000 el sendero se difumina y sin este tipo de aparatos puede ser complicado encontrar el camino correcto.
Seguimos ascendiendo trabajosamente manteniendo siempre la dirección Este mientras nos acompañan continuamente las vistas hacia el norte de la agreste cara Sur de la Sierra de Hornilleros y el Barranco de Peña Escrita que contemplamos en toda su extensión desde su cabecera. En la cota 1180 llegamos a un collado donde ya divisamos la cima de La Bañuela, iniciando así el tramo final de nuestra ascensión, primero por una especie de cortafuegos y luego a través de las paredes rocosas en cuya cumbre encontramos su vétice derruido que nos indica la culminación con éxito de esta ascensión a La Bañuela, de 1332 m de altura, y que es la cumbre más alta de la Coordillera Mariánica (Sierra Morena), lo que le da bastante solera y que junto a lo trabajoso de su ascenso nos da una satisfacción especial el coronarla. El nombre antiguo de este pico es “La Mójina”, como aún la llaman las personas mayores de Fuencaliente. Podemos disfrutar unas imponentes vistas, sobre todo hacia el Sur en la que si el día acompaña podemos ver hasta Sierra Nevada.
Iniciamos el descenso desandando nuestro camino hasta el collado antes mencionado en la cota 1180, y desde ahí descendemos ahora por la cara Sur a través de la Vereda del Cambullón, introduciéndonos en una vaguada repleta de brezos y jaras y que conforma la cabecera del Arroyo del Cambullón. La espesura del matorral que nos rodea hace complicado encontrar y seguir la vereda al comienzo. Debemos tener la referencia de que ésta discurre siempre a la derecha del arroyo en su descenso, separándose progresivamente de su cauce, y que desciende posteriormente en fuerte pendiente en dirección Suroeste hasta llegar al Camino de Navalmanzano. Seguimos esta pista en dirección Oeste y tras cruzar el Arroyo de San Juan nos lleva al Collado de Piruetanal y de ahí al aparcamiento de Peña Escrita por la pista. Una vez en el aparcamiento tomamos la pista asfaltada que tras cruzar el Río Cereceda nos conduce hasta el punto inicial de nuestra ruta.
Waypoints
Comments (14)
You can add a comment or review this trail
Completa información.
Lastima que no lo acompañes con fotos.
Ya están adjuntadas.
por que catalogas la ruta como dificil?
Se puede catalogar la ruta como difícil cuando se superan los 20 km de distancia y los 1000 metros de desnivel positivo acumulado.Lo hago por esto y por lo enmarañado y dificultoso de la subida a La Bañuela en su tramo medio, donde es bastante fácil perder el camino correcto a seguir.
I have followed this trail View more
Information
Easy to follow
Scenery
Difficult
Vistas inmejorables desde la bañuela en días despejados , en algunos tramos hay bastante vegetación y es fácil perder la senda si no utilizas gps , para mi gusto una ruta muy bonita.
PJ Castro, ¡qué maravilla de descripción y qué bien trabajada! Mi grupo de trekking la vamos a hacer este fin de semana con GPS. Gracias por toda la información desinteresada, los detalles tan bien indicados y el cariño que le has puesto. ¡Sigue así!
Gracias. Espero que disfruteis de la ruta tanto como yo lo hice. La lástima es la Cascada de la Batanera bajará ahora con poca agua, pero a pesar de todo merece mucho la pena por las pinturas y las vistas de La Bañuela. Saludos.
Hola buenas tardes PJ Castro:
Tenemos intención de hacer la ruta el próximo día 29 de Marzo, crees que sería una fecha apropiada para realizarla.
Saludos desde Alcalá de Henares
La ruta en esa fecha puede salir preciosa. Todo depende de que siga lloviendo bien, sobre todo las semanas y los días previos a la ruta para que la cascada tenga un buen caudal. El verdor de los musgos y líquenes en la subida a La Bañuela lo vais a tener en su punto. Espero que la disfruteis!!!
I have followed this trail View more
Information
Easy to follow
Scenery
Moderate
Ruta muy interesante y track fácil de seguir.
Muchas gracias por tu track, la sugerencia de la ruta y tus comentarios. Indicarte que, actualmente, el sendero que sube a la Bañuela está perfectamente habilitado, limpio y señalado (al principio por un cartel y luego por hitos), difiere un poco de tu track aunque la idea es la misma. Para la bajada, opté por volver por el mismo camino porque, el que propones, aunque se percibe un poco al principio, está ya tan cubierto de vegetación que me parece inviable.
Por lo demás, un camino muy bonito, sobre todo la subida a la Bañuela y la posibilidad de ver pinturas rupestres antes. Una pena que me ha cogido una época de sequía y no había agua en las chorreras.
I have followed this trail verified View more
Information
Easy to follow
Scenery
Difficult
Al principio todo muy bien hasta que llegues a una zona de jaras y el sendero lo pierdes por completo es un poco difícil volver a encontrarlo
I have followed this trail View more
Information
Easy to follow
Scenery
Moderate
Para disfrutar. Arqueología, baranquismo, historia y deporte...una pasada
La zona tiene unas vistas espectaculares.
Pero hay tramos en los que es muy difícil progresar porque la senda se ha perdido entre las Jaras y los Brezos.