Circular desde Cortijo del Mojón. Ida por Arroyo Blanco y regreso por las Molaticas

NOTA IMPORTANTE: LA DIFICULTAD CON LA QUE CATALOGO MIS RUTAS ESTÁ REFERIDA PARA MONTAÑEROS HABITUADOS A CAMINAR, QUE SE DESENVUELVEN CON SOLTURA POR TODOS LOS TERRENOS, NO PARA SENDERISTAS OCASIONALES. SI TIENES POCA EXPERIENCIA, AÑÁDELE UN GRADO MÁS A LA DIFICULTAD DE MIS RUTAS PARA NO LLEVARTE SORPRESAS.

Corto recorrido circular desde las ruinas del Cortijo del Mojón, en los confines de la Región de Murcia, a escasos metros de la provincia de Albacete. Para acceder a este perdido rincón hay que pasar el Sabinar y continuar en dirección a Nerpio. Poco después de pasar el desvío a Arroyo Tercero, aparece otro desvío a izquierda hacia la Rogativa por una estrecha y desgastada carretera que se interna por un bonito estrecho que hace el Arroyo Tercero. Llegamos así a la zona que hay entre los dos bonitos arroyos de la zona, el mencionado Arroyo Tercero y el Arroyo Blanco. Pues bien, comenzamos a caminar por asfalto en dirección a la Rogativa para pronto desviarnos precisamente para recorrer este segundo arroyo. Comenzamos caminando por las semiperdidas trazas que hay junto a la acequia que va paralela un corto tramo al arroyo. Vamos pasando de un lado a otro del arroyo buscando las zonas menos incómodas entre las crecidas matas (algunas aulagas especialmente pinchosas) hasta llegar a un cerrado meandro que hace el arroyo, punto en el que abandonamos la compañía de éste para subir por su izquierda (vertiente derecha oragráficamente hablando) y ganar altura sobre el cada vez más escaso cauce. Entramos ahora en la parte sin duda más espectacular de la ruta (y bastante más cómoda que la previa junto al arroyo), primero caminando junto a cultivos de cereal, para después "volar" sobre el espectacular estrecho que hace el Arroyo Blanco, antes de llegar a su cortijo homónimo (cuando llegamos a unas presas tenemos que volver a ganar altura, buscando una traza que nos facilita este paso a la parte superior de los farallones). Una vez estamos sobre la cortijada (las vistas ahora son espectaculares, con los campos de cultivo y las montañas al fondo, entre las que destaca a la izquierda la imponente Villafuerte), nos desviamos un poco a izquierda para salir a un camino por el que salimos a la pista que nos sube hasta la parte alta de esta ruta, caminando ahora entre los abundantes cultivos de aromáticas y pinadas de carrasco con algún ejemplar aislado de sabina albar (Juniperus Thurifera). Es la zona que aparece en los mapas como las Molaticas. Nos desviamos en un momento dado por un camino a izquierda junto a cultivos de secano, que poco a poco se va difuminando hasta casi desaparecer. Hay que estar atento para no perder la poca traza que mantiene, antes de llegar a una especie de alto, punto en el que vuelve a reaparecer como marcada pista en pronunciada bajada, realizando para ello buenos zig-zags, antes de caer sobre la carretera asfaltada, por la que retornamos al punto de inicio.
Esta parte primera o última de la ruta junto al Cortijo del Mojón y el cercano Cortijo del Rabillo, sin duda son de los paisajes más bucólicos que se pueden encontrar en Murcia, entre los dos arroyos que vienen de Villafuerte y de la Cañadica de Andrés, entre los más grandes ejemplares de nogales que se cultivan en toda la provincia.