Circular desde el Castell de subirats, viendo els Flandes dels Casots

Hemos salido desde el parking del Castell de Subirats. Un sendero y, más tarde, una pista nos han llevado a la residencia de la Font Santa. Hemos seguido por pistas y algún sendero hasta llegar a La Creueta, donde hoy hay dos antenas y una edificación. Hemos continuado por el camino de la Sierra del Pi de Moió hasta llegar a la Sima del Ordal (es más una cueva que una sima) si puede entrar perfectamente. tiene una fundición de unos 25-30 m.

Seguiremos por pistas y senderos hasta Can Revella, pasando primero por un antiguo corral muy derruido. Un primer tramo por pista nos introducirá en una serie de senderos (más bien atajos), que nos llevarán a la Fondalada de Can Vidal, donde encontraremos la Encina de Cal Ros (hoy sólo queda un tronco muerto). Aquí encontraremos unos cuantos campos de viñedos (can Llopart)


En un cruce de 3 pistas y un sendero, tomamos el sendero de la derecha que baja a la hondonada de Can Vidal donde pasamos por la Encina de Cal Ros (hoy es un tronco muerto).
Cerca veremos una bonita cabaña de piedra seca y, poco después, un cobertizo con una gran mesa donde se hacen catas de vinos. Al final de la viña encontraremos la entrada a las Flandes.

Hay una cuerda para ayudarnos a salvar el único paso un poco "comprometido" de la ruta: una fuerte bajada donde las rocas y ramas nos ayudarán a "salvarla". Se trata de un caos de rocas bajo un riscal que vale la pena descubrir. El camino está muy cuidado, encontrará algunas cuerdas, pero no...
Es un rincón mágico.

Un bonito y fácil sendero nos conducirá hasta la carretera del Castillo, que seguiremos hasta encontrar un desvío que lleva directamente al Castillo, pasando por la Creu de Subirats. Salimos del recinto amurallado para regresar al parking.